La DO Penedès ha logrado convertirse en la primera del mundo certificada oficialmente como ecológica

Cabrera de AnoiaLlevaban años trabajando, y por fin lo han conseguido. Esta próxima vendimia toda la uva que entrará con el registro de DO Penedès será ecológica. Lo afirma el presidente de la DO, Joan Huguet, justo en los días en que los viticultores se preparan para la vendimia. En total, esta certificación, la primera del mundo para una denominación de origen, implica a ciento treinta bodegas, con un total de 5.400 hectáreas cultivadas con agricultura ecológica. "En el Penedès hay un total de 14.000 hectáreas de viñedo pero están inscritas en otras denominaciones de origen, como son la DO Catalunya, la DO Cava o Corpinnat", dice Huguet. Por reglamento, pues, a partir de esta vendimia, los vinos que quieran entrar dentro de la DO Penedès tendrán que ser ecológicos; si no, quedarán excluidos.

"Este paso, importante, lo hemos conseguido gracias al liderazgo de Josep M. Albet Noya, de la bodega Albet y Noya de Sant Pau de Ordal, que fue el primer elaborador de buenos vinos ecológicos de Europa", explica Joan Huguet, y remarca la expresión "buenos vinos". Cuando Albet y Noya sacó vinos ecológicos al mercado, ya los había, "pero no de la calidad que hizo él, que es muy luchador y líder en el cultivo ecL". Ser ecológico al 100% como denominación de origen significa no utilizar productos de síntesis de química artificial como abono en la tierra; y tampoco fitosanitarios; implica respetar la naturaleza sin añadir ningún elemento externo que provenga de la química, pero, en cambio, sí de la naturaleza: viña". Para hacer una comparación con el cuerpo humano, Joan Huguet recurre a los zumos de naranja oa los antibióticos. "Si cada día tomamos un zumo de naranja como prevención para resfriados, entonces no debes tomar antibióticos; pues los métodos preventivos naturales que aplicamos en el viñedo es el mismo: utilizar soluciones naturales para no tener que recurrir a ningún químico".

La tierra, para el futuro

El camino hasta llegar a la vendimia de 2025, totalmente ecológica, no ha sido fácil. Las bodegas deben haber superado la certificación oficial del CCPAE, el organismo de control administrativo, que ha pasado la inspección de todos los viñedos registrados dentro de la DO Penedès. Ha sido un trabajo lento y constante; y, poco a poco, todas las bodegas han entendido que era la forma de buscar la calidad y la distinción con otras denominaciones de origen. "También porque preservar la tierra pasa por un cultivo ecológico; queremos que la tierra esté viva y no que sea una arena de playa, es decir, muerta", afirma Joan Huguet, que también es elaborador de vinos en la bodega Can Feixes, en Cabrera d'Anoia, y de espumosos, dentro de Corpinnat.

Desde que la DO Penedès decidió virar hacia la agricultura ecológica ha habido varios cambios, que el presidente cuantifica. "En 2022 se vendieron 19 millones de botellas; en 2023, 17 millones, y el año pasado, en 2024, 15 millones", dice. Esto significa que ha habido bodegas que no han querido continuar en la DO Penedès para no cambiar el método de cultivo en el viñedo. Y, al mismo tiempo, existen otros motivos que explican el descenso de un 25% en las ventas, como puede ser la bajada del consumo de vino. "Pero sobre todo es porque, en estos años, ha habido bajas de vinos dentro de la DO Penedès, porque no han aceptado los métodos de agricultura ecológica", dice Huguet, que añade que no tienen cuantificados cuántas bodegas se han ido a la DO Catalunya.

Sin embargo, para el presidente, Joan Huguet, ser ecológicos significa que los vinos tienen un valor añadido; estarán más valorados en todos los sentidos; en el respeto a la naturaleza y por lo que conlleva cuidar la tierra, y también en un precio más elevado, porque los costes de producción para el viticultor son más altos. "Sobre todo porque los elaboradores de la DO Penedès tenemos claro que de tierra sólo hay una, y debe sobrevivirnos porque la tenemos que dejar a nuestros hijos".

Sobre el valor añadido, Joan Huguet comenta que el objetivo final de la DO Penedès es liderar la tendencia de la ecología, al tiempo que conseguir que el consumidor local elija los vinos del Penedès por su alta calidad. "Cuando éramos pequeños, eEl vino blanco que todos teníamos en casa era del Penedès, pero ahora seguro que encontraríamos otras denominaciones de origen que no son catalanas", dice Huguet, que añade: "no somos chauvinistas, y lo único que defendemos como propio es el FC Barcelona; con el resto, nos decantamos por otras marcas foráneas cuando en casa tenemos bonísimas".

Siguiendo el hilo de los vinos blancos, el presidente de la DO sostiene que "en Barcelona se venden cinco veces más de la DO Rueda que del Penedès; y esto no tiene ningún sentido". Está claro que puede haber muchos motivos que expliquen por qué el Penedès no lidera el mercado: "ha vivido a la sombra de la DO Cava, que es el que daba más valor añadido; tiene cerca Barcelona, que no se casa con nadie, cosa que no ocurre con las otras capitales catalanas que tienen denominaciones de origen cerca, como es el caso de Girona, Tarragona o Lleida". Por todo ello, Joan Huguet cree que la certificación ecológica será una oportunidad para demostrar la calidad del Penedès, donde se hacen unos vinos blancos, tintos y espumosos de gran calidad.