Arte

Los museos, un campo de batalla desde el que cambiar el mundo

Manuel Borja-Villel presenta su programa de exposiciones y actividades como asesor del departamento de Cultura

La consejero de Cultura, Natàlia Garriga, y Manuel Borja-Villel
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BarcelonaEl departamento de Cultura fichó el otoño del pasado año Manuel Borja-Villel, ex director de la Fundació Antoni Tàpies, el Macba y el Museo Reina Sofía, como asesor museístico para profundizar en el futuro de los museos y su papel social. Y este miércoles Borja-Villel ha presentado las actividades que desarrollará conjuntamente con su equipo desde la próxima semana hasta el 2026 en Catalunya, con el título genérico de Museo habitado, en el sentido de sentir los museos como propios. "Vivimos una época de crisis estructural, y sabemos que en épocas de crisis la sociedad mira hacia el pasado para entender mejor el presente y ver hacia dónde vamos", ha dicho Borja-Villel. "Este pasado representado por instituciones, museos y archivos les hace lugares de batalla, de antagonismo. En el ámbito museístico, todos los modelos que teníamos arrancaron en el siglo XVIII en la línea de la Ilustración, basada en la libertad, la igualdad y la fraternidad de unos, pero no de otros, porque, por ejemplo, la Revolución Francesa se produjo en paralelo a la de Haití, que no fue posible. "adecua a una época en la que hay muchas voces silenciadas contra la estructura patriarcal, la esclavitud y el extractivismo que plantean otras formas de organización", ha explicado.

"Los museos son espacios de conocimiento indispensables, espacios de una conversación ciudadana constante, donde absolutamente todo el mundo es bienvenido", ha afirmado la consellera de Cultura, Natàlia Garriga. "Las personas que trabajan en los centros museísticos lo hacen con un gran respeto, cariño y voluntad de representación de nuestro pasado, presente y futuro", ha subrayado Garriga.

El objetivo de Borja-Villel es "replantear" el ecosistema de los museos catalanes, a partir de repensar aspectos diversos de las instituciones como la idea de memoria, el uso de las colecciones, el estructura, la gobernanza, la sostenibilidad del funcionamiento y los públicos. Así que la "investigación militante" será una de las claves de todo ese proceso. "Los museos son muy populares, pero hay que plantearse si toda la gente que va es la que tiene que ir y si hay gente que no va nunca", ha subrayado Borja-Villel. Otro interrogante a responder es qué se puede hacer para forjar las historias de aquellos de quienes no se conservan documentos, o que cuando existen, como es el caso de los esclavos, los reducen a su condición de esclavitud para siempre. "Cómo se escribe la historia, ¿desde dónde se escribe?", ha pedido Borja-Villel.

Apoyar y visibilizar el trabajo realizado

Este replanteamiento de los museos se llevará a cabo conjuntamente con artistas, colectivos, entidades e instituciones que están trabajando en estos temas y que conoce de sus etapas barcelonesas anteriores, como IDRA, Transductores y Entrar Afuera. "Aquí hay un humus que permite dar un paso más allá", recordó Borja-Villel. La primera actividad serán unas jornadas que se celebrarán del 17 al 19 de junio en sedes como la Fundació Antoni Tàpies, el Palau Moja y el Centro de Arte Santa Mònica para plantear cómo serán los museos dentro de cincuenta años, proponer formas de institucionalidad alternativas y realizar jornadas de trabajo en el Museo Marítimo y el Museo de Historia de Cataluña en clave descolonial.

El plato fuerte del programa para el gran público será una gran exposición que se podrá visitar, simultáneamente, en el Museu Marítim, en el Palau Moja y a los nuevos Tinglados del Port Vell, cuya recuperación se presentó hace pocas semanas. Cada una de sus sedes abordará unas temáticas concretas. Los Tinglados, por ejemplo, estarán dedicados a las nociones de "paisaje, desplazamiento e identidad" a través del diálogo de una retahíla de obras históricas de artistas como Isidre Nonell, Colita y Anna Turbau con otras contemporáneas de Allan Sekula, Malgorzata Mirga-Tas, Efrén Álvarez y el colectivo Ayllú.

También habrá otros "ensayos expositivos". En el Palau Moja, se podrán ver las Variaciones Güell, de Jorge Ribalta, y trabajos de artistas como Aline Motta y Oriol Vilanova, entre otros. El ensayo del Museo Marítimo de Barcelona tratará temas como el impacto de la importación de materias primas como la madera de Guinea en el diseño de productos y arquitectura durante los años 50 y 60 con material histórico y obras de artistas contemporáneos como Antoni Muntades, Carlos Pazos y Claudia Claremi. Y el Pabellón Victoria Eugenia acogerá una serie de intervenciones artísticas para reflexionar sobre el impacto en nuestra forma de entender el mundo de las grandes exposiciones internacionales de las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del XX. Más adelante, se celebrarán dos congresos sobre museos: el primero del 26 al 28 de noviembre y el segundo en junio del 2025. El presupuesto de todo este programa es de 1,3 millones de euros. Queda pendiente hacer público qué museos del país acogerán también actividades de este programa.

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