El Festival de la Arquitectura será "una mezcla entre una Bienal de Pensamiento y unas Fiestas de la Mercè"
Barcelona arranca el camino hacia la capitalidad mundial de 2026
BarcelonaLa ciudad de Barcelona es multidimensional: tiene un patrimonio rico que es un gran potencial turístico, sobre todo con el Modernismo; en sus calles hay obras de grandes arquitectos estrella, como Jean Nouvel y Herzog & De Meuron, aunque no siempre encajen con el tejido urbano, y a lo largo de la historia ha crecido aprovechando el impulso de grandes acontecimientos, también con sus luces y sus sombras, como la Exposición Universal de 1929, el XXXV Congreso Eucarístico Internacional, los Juegos Olímpicos de 1992 y el Foro de las Culturas. Ahora Barcelona busca su modelo de futuro, y la designación como capital de la arquitectura de 2026 es una oportunidad imperdible para trabajar desde ahora mismo. "Creo que Barcelona no necesita ninguno de estos modelos, pero sí que tienen mucho de aprovechable, y la ciudad no se agota en estas respuestas", ha afirmado este lunes la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en la presentación institucional de Barcelona como la Capital Mundial de la Arquitectura en 2026, que también incluye la celebración del Congreso Mundial de los Arquitectos por segunda vez después de la legendaria edición de 1996. "Lo que Barcelona necesita sobre todo es ser ella misma, que la ciudadanía defina la ciudad que quiere ser, y a partir de aquí hacer la transformación urbana que queremos y necesitamos, sin desaprovechar ninguna oportunidad, que también pueden ser grandes acontecimientos; pero eligiéndolas nosotros, que no sean sobrevenidas", explica Colau.
El elemento imprescindible de la futura transformación de Barcelona, que está considerada como un referente de la innovación en el campo de la arquitectura y el urbanismo, es la respuesta a los retos de las grandes ciudades en el siglo XXI: la lucha contra las desigualdades, la cohesión social, el cambio climático. "Es hora de que se ponga a las personas primero, sin excusas. La arquitectura tiene sentido cuando sirve para mejorar de manera objetiva la vida de la gente, con vivienda asequible y digna, servicios públicos, centros cívicos, jardines, parques, un espacio público de calidad...", dice Colau. El objetivo es que Barcelona se convierta en una ciudad más democrática, saludable y sostenible.
Para Colau, el futuro de Barcelona se tiene que inspirar en la innovación del Plan Cerdà, aunque sus detractores aseguran que el urbanismo táctico que impulsa el Ayuntamiento de Barcelona la pone en peligro, y este futuro pasa por un cambio "'de escala". "Ahora mismo Barcelona tiene una nueva ciudad creciente en su interior, una auténtica metamorfosis", asegura.
El proceso de organización de la capitalidad será "colectivo" entre todas las instituciones y entidades dedicadas a la arquitectura de la ciudad, y el resultado será "una fiesta de la arquitectura", como explica la teniente de alcaldía de Ecologia, Urbanisme, Infraestructures i Mobilitat, Janet Sanz. Esto quiere decir que la Semana de la Arquitectura crecerá a partir de 2022 y se convertirá en el Festival de la Arquitectura de Barcelona. Para eso se sumarán a la organización el gobierno español, la Generalitat y el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE). Habrá una ciudad invitada en cada edición para "intercambiar en todos los niveles los retos con otra ciudad", como dice también Sanz, a pesar de que no hace público cuál será la primera invitada. La primera edición de este festival, al cual quieren dar un vuelo internacional, se hará en mayo y será temático, estará dirigido a los barrios y pondrá en valor elementos de Barcelona como su patrimonio industrial, entre otras líneas posibles. "Será como una mezcla entre una Bienal de Pensamiento y unas Fiestas de Mercè", explica Sanz. En cuanto al desarrollo de los actos de 2026, los organizadores trabajan con tres espacios: un espacio comisariado, un consejo de personas expertas que puedan dar asesoramiento y un tercer espacio más abierto donde la ciudadanía pueda participar.
Las cinco instituciones que impulsan la capitalidad y trabajan para que Barcelona se convierta en "el epicentro mundial de la arquitectura" son el Ayuntamiento de Barcelona, el Col·legi d'Arquitectes de Catalunya, la dirección general de Ordenació del Territori i Urbanisme de la Generalitat de Catalunya, Agenda Urbana y Arquitectura del gobierno español y el CSCAE. "Nuestro espacio urbano está afectado actualmente por una serie de disrupciones como el cambio climático, las migraciones, la fragilidad de la cohesión social y la digitalización, y en estos momentos nos es muy necesario el papel mediador que la arquitectura puede ejercer para hacer más fácil la vida de las personas", dice el director general de Ordenació del Territori i Urbanisme de la Generalitat, Agustí Serra. "La arquitectura es un agente de cambio potentísimo en nuestras ciudades", subraya Iñaki Carnicero, el director general de Agenda Urbana y Arquitectura. También recuerda que 5.820 millones de euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia estarán destinados a la arquitectura, para rehabilitar viviendas y edificios, y para la construcción de viviendas de alquiler asequible, y que la ley de la calidad de la arquitectura española entrará en el Congreso en primera ronda este martes.
El carácter cultural de la arquitectura
La decana del COAC, Assumpció Puig, subraya que la capitalidad pone de relieve el papel transformador de la arquitectura y que es un ámbito de interés general. "La arquitectura es cultura", afirma. También que la arquitectura en Barcelona es reconocida por su singularidad y porque ha tejido el espacio público. "Barcelona es una ciudad cívica, desde hace mucho tiempo", subraya. "Si el ciudadano está orgulloso de su ciudad, la ciudad saldrá adelante seguro". Para Lluís Comerón, el presidente del CSCAE, los mejores momentos de la arquitectura se producen en "los momentos de cambio", porque es cuando revela que "es útil" y da "nuevos escenarios" para los cambios que se producen en la sociedad.