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Al Barça no le saldrá gratis jugar en Montjuic

Expertos consultados por el ARA sostienen que el Estadio Lluís Companys podría llegar a necesitar una inversión de 20 millones de euros

Sergi Escudero
3 min
El Estadio Olímpico Lluís Companys, detrás de unos matorrales.

BarcelonaEl presidente del Barça, Joan Laporta, explicó en su primera rueda de prensa que seguía muy presente la posibilidad de ir a jugar al Estadio Olímpico Lluís Companys, situado en la montaña de Montjuic, para facilitar las obras de remodelación del Camp Nou, una idea que ya había expresado durante la campaña electoral. De hecho, el ARA informó hace unos días de que las constructoras ven muy complicado que se pueda cumplir el plazo de cuatro años para hacer las obras mientras se disputan partidos en el estadio y que esto podría provocar que el exilio fuera de más tiempo del esperado, incluso de un año. 

Sin embargo, aún no se ha hablado del coste que tendría este traslado temporal a otro estadio. Según un experto en arquitectura deportiva que conoce de cerca el proyecto del Espai Barça, “no sería descabellado pensar que podría llegar hasta los 20 millones de euros”, una cifra nada despreciable teniendo en cuenta que las reformas solo las aprovecharía el Barça durante un periodo relativamente corto de tiempo. Los gastos se repartirían en cuatro patas principales: la mejora de la iluminación para adaptarse a los requisitos de LaLiga y la UEFA, la puesta a punto del terreno de juego, la reforma de los vestuarios y la implementación de gradas supletorias.

Precisamente este último concepto es el que sería más caro. “El coste de esta ampliación de espectadores podría ensartarse hasta los 10 millones”, explica un trabajador de una empresa que se dedica a ponerlas. La capacidad actual del Olímpico de Montjuic es de 55.926 espectadores y el Barça tiene 83.500 socios con abono, lo cual provocaría que las gradas extra tendrían que meter prácticamente a 30.000 personas si la junta de Joan Laporta no quisiera dejar fuera a nadie. Al preguntarle por estas cifras, el club azulgrana responde que todavía no ha hecho ningún estudio sobre lo que costaría marchar a la montaña olímpica y recuerda que la opción de dejar de jugar en el Camp Nou durante un tiempo no está ni mucho menos confirmada.

La mejora de la iluminación sería obligatoria porque ahora mismo el Estadio Olímpico tiene una capacidad de 1.881 luxs para ofrecer fútbol por televisión y los requisitos de LaLiga y la UEFA indican que, como mínimo, tiene que haber 2.000. Esta obra, según los expertos, podría bordear el millón de euros, el mismo coste aproximado que tendría la mejora del terreno de juego. “Coser uno de primer nivel desde cero se acerca al millón de euros, un precio que se incrementaría si quisieras ponerle calefacción y sistemas de aspiración en el subsuelo”, dice el experto en arquitectura deportiva, que, como gran conocedor del recinto, añade que necesitaría importantes mejoras en los vestuarios (los más grandes son de 125 m2) y seguramente también en la sala de prensa y en la zona mixta.

BSM no precisa quién tendrá que pagar las reformas 

Otros aspectos a tener en cuenta para cumplir con los requisitos de los organismos federativos son disponer del Skycam, de más de 20 posiciones de cámara, de sistemas de tracking de jugadores, de protección antidrones, del sistema Intel360 para las repeticiones televisivas, de VAR, de ojo de halcón para la Champions League y de cámaras superlentas, entre otros. Esta serie de dispositivos no están instalados ahora mismo en el Estadio Olímpico. “Del mismo modo, el Barça no podría jugar en el estadio Johan Cruyff porque no dispone de todos estos sistemas”, dice el profesional que conoce en profundidad el Espacio Barça. 

El Estadio Olímpico está gestionado por Barcelona Serveis Municipals (BSM). Fuentes de la entidad preguntadas por el ARA han preferido, haciendo referencia a criterios de confidencialidad, no valorar quién se haría cargo del coste de las posibles reformas que se tendrían que llevar a cabo, qué precio podría tener el alquiler de las instalaciones (el Espanyol pagó 600.000 euros anuales hasta el 2002 y después consiguió que el Ayuntamiento le redujera la cifra a la mitad), si sería posible realizar otros eventos mientras el Barça jugara allí ni si estructuralmente se podrían poner gradas supletorias en el estadio. Pero sobre este último aspecto expertos en arquitectura deportiva explican que sería viable. 

En cambio, las mismas fuentes de BSM sí que han querido dejar claro que el Estadio Olímpico prevé tener “el 40% de los días reservados durante los próximos dos años” y que “acoge una gran diversidad de acontecimientos”. Además, remarcan que “el Estadio no se puede desatar de su ubicación en la Anella Olímpica y la afectación que las actividades pueden tener por el uso ciudadano del Palau Sant Jordi y el Esplanada Olímpica”. Ahora mismo el acontecimiento más lejano anunciado en la web del Estadio Olímpico es un concierto de Iron Maiden que se celebrará en 29 de julio del 2022.

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