De las calabazas de Griezmann a las de Nico

BarcelonaEl verano del 2018 el Barça tenía entre ceja y ceja el fichaje de Antoine Griezmann, entonces jugador estrella del Atlético de Madrid. El delantero francés quería cambiar de aires y aceptaba vestir de azulgrana para compartir equipo con Leo Messi y compañía. Las conversaciones no sólo estaban avanzadas, sino que se había llegado a un acuerdo total con él. El contrato estaba a punto de firmarse. Pero a última hora se desdijo y decidió quedarse en el club colchonero. El giro de guión provocó malestar en la cúpula azulgrana que presidía Josep Maria Bartomeu. Por el qué y por el cómo. Y es que se enteraron a través del documental La decisión que elaboró ​​la productora de Gerard Piqué, quien pese a saber cómo acababa la cosa, no informó a nadie.

En el caso de Nico Williams no ha habido documental, pero el show mediático ha sido similar. Tanto el Barça como el futbolista del Athletic lo tenían todo atado. Deco, director deportivo azulgrana, había hablado abiertamente del fichaje, el club había buscado los 64 millones necesarios para pagar la cláusula y sólo faltaba redactar el contrato y firmarlo. De repente, cuando el agente del jugador, Félix Tainta, pidió añadir un anexo al texto para que Nico quedara libre si no se le podía inscribir, todo se detuvo. Y de un día para otro apareció un comunicado del Athletic diciendo que el futbolista había renovado hasta el 2035. En las oficinas del Camp Nou se enteraron a través de las redes sociales. "Sabíamos que nos había pedido tiempo para pensárselo, pero no que estuviera negociando una renovación", dice uno de los directivos consultados.

La versión oficial del Barça es la de mostrar tranquilidad y aceptar que el fichaje no ha terminado completando "como tantas veces ocurre en el mundo del fútbol". Pero internamente admiten malestar porque sospechan que, detrás de todo, Nico y su agente han utilizado el club para cerrar una renovación al alza con el Athletic, donde se convertirá con el jugador mejor pagado de la plantilla, con un sueldo por encima de lo que le ofrecían en Barcelona. Cobrará ocho millones netos, que irán subiendo hasta los diez millones al término del contrato. La cláusula también sube, aunque se queda en torno a los 90 millones, una cifra igualmente accesible para los grandes clubs europeos.

El Barça insiste en que fue Nico quien se ofreció

Desde el Barça sostienen que fue Nico quien se ofreció en el club azulgrana. El año pasado, después de la Eurocopa, contratar al pequeño de los hermanos Williams era una prioridad. Pero la incertidumbre con el fair play generaba muchas dudas y fue el jugador el que declinó la propuesta. Según las fuentes consultadas por este diario, el presidente Laporta no quería saber nada de Nico este verano porque consideraba que no había confiado en su proyecto. Pero cambió de opinión cuando el agente se puso en contacto con el club. Que ahora fuese el jugador el que se ofreciera a venir y su amistad con Lamine Yamal, hacía cambiar sustancialmente las cosas. Además, esta temporada hay mucho más optimismo en el Camp Nou respecto a la capacidad azulgrana para poder fichar e inscribir a jugadores –el club aún no está en la norma 1:1 y tiene que haber salidas, pero dan por hecho que podrán acabar operando con normalidad.

Todo se atascó hace una semana cuando, pese a la palabra del Barça, el agente pidió garantías de que Nico podría inscribirse. De lo contrario, quería añadir una cláusula liberadora y que el jugador pudiera irse gratis a cualquier club. En el club sospechan que en ese momento ya tenía la oferta de renovación sobre la mesa y que estaba jugando a dos bandas. La postura culé era clara: no aceptaban. Y a partir de ahí ya no hubo más movimientos. Tainta pidió tiempo para que el jugador lo pensara y la historia acababa el viernes por la mañana con el anuncio de la renovación.

"Flick también se ha sorprendido, creía que estaba hecho, que había un compromiso", decía el sábado Uli Hoeness en declaraciones a BR24Sport. El presidente de honor del Bayern de Múnic mantiene una muy buena relación con el entrenador del Barça, que actualmente está de vacaciones en la localidad bávara de Tegernsee. En la entrevista, Hoeness encuentra comprensible que el Athletic luchara por renovar a su jugador, pero cree que la actitud de Nico no fue la correcta. En este sentido, opina que se le ha cerrado la puerta del Bayern, club que en su día también estaba interesado en contratar el extremo.

Luis Díaz y Rashford, las alternativas

Si bien con Griezmann hubo una segunda oportunidad y el verano del 2019 acababa firmando con el Barça, con Nico no pasarán más trenes para jugar en el Camp Nou. Ahora, el Barça, que sigue buscando un extremo, reactiva la vía Luis Díaz, aunque son conscientes de que no será fácil contratar al jugador del Liverpool, tanto por el precio –al menos 60 millones– como por la muerte súbita de su compañero Diogo Jota. La alternativa es la de Marcus Rashford, con quien probablemente podría llegarse a un acuerdo de cesión con el Manchester United.