Laporta acumula su segundo ejercicio seguido en negativo

BarcelonaJusto tres meses después de haber terminado el ejercicio 2024-2025, el Barça hizo públicos este martes los números oficiales. Pese a que la junta de Joan Laporta separa los resultados ordinarios de los extraordinarios, una acción que desde el punto de vista contable carece de relevancia, la realidad es que el club azulgrana cerró el curso pasado con 17 millones de euros de pérdidas. Esto supone una desviación de 37 millones en negativo del presupuesto 2024-2025, que preveía 20 millones de beneficios. Así, Laporta habrá cerrado por segundo año consecutivo con pérdidas. En el ejercicio anterior fueron 91 millones negativos. Pero el debate social entre la masa culer que han traído consigo estos datos, de momento, es casi inexistente. Este miércoles hay un Barça-PSG de Champions League y, cuando el balón está de por medio, el resto pasa a un segundo plano. Buena jugada comunicativa.

La reciente actualización del límite salarial del Barça en la Liga ya hacía pensar en malas noticias económicas en este cierre. La Liga redujo en 112 millones de euros el límite salarial azulgrana, algo que significa que la entidad ha sufrido una desviación del valor de esta cifra respecto al presupuesto presentado a la patronal durante el invierno. La misma Liga apuntó como principal motivo de este desvío el hecho de que el actual auditor del Barça, Crowe, todavía no había validado la palanca de los asientos vip del Camp Nou porque el equipo de Hansi Flick aún no ha vuelto a jugar allí. Pero los asientos por sí mismos no cuentan todo el desvío. De hecho, según ha podido saber el ARA, en el cierre del ejercicio Crowe finalmente ha permitido incluir más de 40 millones de ingresos pertenecientes a los asientos vip. Y, sin embargo, igualmente el club ha tenido pérdidas.

La junta de Laporta tendrá que explicar a qué atribuyen los 17 millones negativos. En el comunicado oficial hecho público anoche, se limitó a mencionar esta cifra y a puntualizar que el resultado de los ingresos y gastos que a su juicio son ordinarios ha sido de dos millones positivos. Además, también anunció que ha presupuestado cuatro millones de euros de beneficios para el ejercicio 2025-2026, en el que se prevé "alcanzar nuevos récords en ingresos de patrocinio y merchandising, así como el retorno progresivo al Camp Nou".

139 millones de pérdidas acumuladas

Estos 17 millones de pérdidas se suman a los 122 millones de pérdidas acumuladas que llevaba Laporta desde que volvió a la presidencia en el 2021. Así, ya son un total de 139. El primer ejercicio, condicionado por la pandemia del coronavirus, la catastrófica herencia del mandato de Josep Maria Bartomeu y la depreciación del valor de diversos jugadores decidida por Laporta, comportó unas pérdidas de 481 millones. Esta losa empezó a revertirse el curso siguiente, que acabó con 98 millones de euros de beneficios que contaron con el impulso de la palanca de la venta a Sixth Street del 10% de los derechos televisivos de la Liga durante los próximos 25 años.

De palancas también fue el ejercicio 2022-2023. El Barça se apuntó 352 millones de beneficio en un curso en el que vendió un 15% añadido de los derechos televisivos y un 49% de Barça Studios, una piedra en el zapato que arrastra a causa de los diversos impagos de los inversores, la incapacidad para dotar de valor al proyecto y la depreciación que pidió (sin la aceptación del club) el anterior auditor, Grant Thornton. De hecho, el ejercicio 2023-2024 se cerró con 91 millones de pérdidas debido a los impagos a los que se ha hecho referencia.

Indignación en el entorno azulgrana

Por otra parte, el comunicado del Barça de este martes también informa que la asamblea de socios compromisarios en la que tendrán que aprobarse estos números se realizará el domingo 19 de octubre en formato telemático. Este hecho ha provocado la indignación de gran parte del entorno azulgrana, que precisamente hacía pocos días que se había unido para enviar una carta a la junta de Laporta para pedirla presencial o híbrida. "No tiene ninguna justificación, es coartar la participación, la democracia y la transparencia", dice al ARA Ricard Faura, uno de los firmantes de la carta en nombre del grupo Fem Barça.

"En una de las muchas reuniones que hicimos con el club, el presidente Laporta se comprometió ante los representantes de los grupos a realizar las asambleas en formato híbrido", sigue explicando Faura. También Víctor Font, el segundo candidato más votado en las últimas elecciones, dio su opinión. En este caso, en X: "Los socios compromisarios merecen poder participar de las asambleas de forma presencial. Como siempre se ha hecho. Ser un club democrático significa dar voz en persona a los representantes de los propietarios del club. Lucharemos para que esto se convierta en una obligación para quien gobierne el Barça".