Laporta se resigna a cesar a Ferran López como jefe de seguridad del Barça
La nueva junta azulgrana fichó al sustituto de Trapero durante el 155 para reforzar la estructura ejecutiva
BarcelonaNovedad importante en el comité de dirección del Barça. Según ha podido confirmar el ARA, la junta que preside Joan Laporta ha decidido cesar a Ferran López como jefe de seguridad. Las dos partes están tratando su salida estos días. La decisión llega después de unos días de ruido de fondo en el club sobre la tarea del que fue sustituto del mayor Trapero en los Mossos d'Esquadra durante la aplicación del artículo 155. López fue nombrado el mes de abril pasado, después de 31 años de carrera en la policía catalana, para dar un nuevo impulso a la estructura ejecutiva. Sustituyó a Xavier de las Moras, responsable de seguridad durante el último tramo de mandato de Josep Maria Bartomeu.
Fuentes consultadas por el ARA sostienen que la medida es por motivos profesionales. Consciente de que López no había respondido a las expectativas generadas, Laporta pidió mantenerlo en nómina, pero el CEO, Ferran Reverter, ha acabado convenciéndolo de que lo mejor es prescindir de sus servicios. Entre los errores que se le imputan internamente en estos meses en el cargo destaca la "infradotación" del dispositivo de seguridad para el Barça-Madrid de hace unas semanas, cuando se hizo viral la salida de Ronald Koeman del recinto del Camp Nou entre insultos y patadas. También se le ha criticado la inacción con Jordi Sin, miembro del departamento de seguridad en tiempo de Bartomeu que decidió mantener. Ahora Sin está de baja médica.
Otras actuaciones que se le han criticado a López en el Barça tienen que ver con cuestiones del día a día, como los descuentos que los policías destinados al Camp Nou tenían para cenar en los establecimientos del estadio, un gesto que el exmosso "congeló" amparándose en la situación económica del club. Así mismo, a López le han reprochado que fuera "poco operativo" a la hora de tomar decisiones y que no trabajara sus tareas de manera ágil. "Es poco tecnológico, le cuesta responder whatsapps y no usa el correo electrónico", apuntan desde Arístides Maillol. Tampoco gustó que no asistiera a la reunión con los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana posterior al clásico y a los incidentes con Koeman –envió a Rafa Soldado, jefe de seguridad del primer equipo– y que "se despertara tarde" en la gestión de aduanas de un desplazamiento de Reverter a los Estados Unidos para reunirse con Goldman Sachs, principal acreedor de la entidad. El CEO tuvo que aplazar dos días el viaje, clave en la firma de uno de los acuerdos con la banca de inversión norteamericana.
Venteo cogerá su relevo
A finales de octubre, Laporta, instado por los ejecutivos, dio luz verde a la llegada de otro mosso al área de seguridad: Lluís Venteo. La medida se tomó, según apuntan al ARA, "para ayudar". En principio, la nueva incorporación tenía que trabajar junto a López, al que conocía perfectamente de su etapa juntos en el cuerpo policial. Venteo, hombre de confianza del mayor Trapero, aterrizaba en el club avalado por su experiencia en la gestión de dispositivos para coordinar el acceso de los miembros de la grada de animación en el Camp Nou y evitar la entrada de radicales. También coordinó los cuerpos de seguridad en el Barça-Madrid de finales de 2019, el del Tsunami Democràtic. Venteo aceptaba estar por debajo de López en su desembarco en el Camp Nou, pero la estabilidad ha durado poco, hasta el punto de que López se encuentra negociando su indemnización –en un año y pico podría volver a los Mossos, puesto que estaba de excedencia–. Venteo asumirá la plaza de jefe de seguridad e instalaciones del Barça.