¿Por qué Nike tampoco arregla los problemas domésticos del Barça?
El acuerdo "histórico" con la multinacional estadounidense no saca de pobre al club en términos de 'fair play'
Barcelona"La historia pondrá a cada uno en su sitio. Acuerdo histórico que responde a la grandeza del FC Barcelona [...] Orgullo de presidente y de las personas que se han dejado la piel durante dos años para lograrlo". son las que la vicepresidenta institucional del Barça, Maria Elena Fort, utilizó, a través de un tuit en la red X, para celebrar la oficialidad del nuevo contrato del club azulgrana con la multinacional Nike. Sin embargo, de momento la información sobre los detalles del pacto, que los socios y socias deben enfriar a través de la asamblea, es escasa, más allá de la cifra de máximos que la entidad filtró a algunos medios de comunicación: 1.700 millones de euros. Ni siquiera el grueso de los directivos conocen las condiciones del acuerdo en profundidad.
Esta cantidad a cobrar por la institución en los 14 años que durará el compromiso —hasta junio del 2038— patrocina un titular tan impactante como el que la junta directiva de Josep Maria Bartomeu alimentó cuando renovó la misma alianza en el 2018 ."Nike nos pagará 155 millones por temporada", proclamaba el entonces vicepresidente Manel Arroyo. Sin embargo, con el tiempo se vio que la previsión era por exceso y que el enrevesado clausulado con la compañía estadounidense escondía trampas que restaban poder (y también dinero) al Barça. En este nuevo acuerdo, Laporta ha intentado recortar algunas penalizaciones y ha mantenido el 100% de BLM, uno de los caballos de batalla de la negociación. Sin embargo, será el detalle (no desvelado) del contrato el que marcará hasta qué punto los 1.700 millones entrarán en la caja.
Lo que sí que varias fuentes confirman es que, al contrario de lo que vaticinó Laporta en la rueda de prensa posterior al cierre del mercado de fichajes, la entrada en vigencia del nuevo acuerdo con Nike no servirá para que el Barça acabe de una vez con los problemas que arrastra en el cálculo del límite salarial de la Liga. La explicación radica en la computación, por parte de la patronal del fútbol español, de la prima de renovación que el club percibirá por alargar su vinculación con el gigante textil de Portland. Si bien la intención del presidente era que esta cifra, superior a los 100 millones, sirviera para compensar el agujero acumulado en buena parte por los impagos de Barça Vision, la Liga sólo la acepta prorrateada durante los 14 años del acuerdo. Es decir, aunque el dinero entre de golpe en la caja, éste no actuará como salvavidas en términos de fair play financiero. Sí que ayudarán, en cambio, a tener tesorería y compensar el exilio en Montjuïc, por ejemplo, la prima debe periodificarse.
¿Qué necesita el Barça para volver a la regla 1:1 del 'fair play' de la Liga?
Por tanto, aunque los nuevos términos de la alianza con Nike tengan un impacto a corto plazo en las cuentas, el Barça tendrá que buscar otras vías para volver a la norma del 1:1, que es la que permite registrar jugadores por el mismo valor que se libera. La necesidad es perentoria en el caso de Dani Olmo, inscrito en Liga sólo hasta el 31 de diciembre en virtud de la lesión larga de Andreas Christensen. Tampoco Pau Víctor podrá competir a partir de enero si el club no le hace espacio antes, aunque en el caso del delantero santcugatense, que no está jugando demasiado, se explora la posibilidad de cederlo para que tenga más minutos en su primer curso en Primera División.
Hoy por hoy, contando el nuevo contrato con Nike, los cálculos que hacen en el Barça son que todavía se necesitarán más de 50 millones para volver al 1:1 y, de este modo, tener más margen para registrar la ficha completa de Olmo. La clave para entender esta vicisitud es haber reconocido 91 millones de pérdidas a causa de los impagos de Barça Vision. Esto es porque el fair play se calcula sumando los ingresos previstos y restando los gastos de gestión, además de las pérdidas acumuladas, que son el principal lastre del Barça desde que Laporta contabilizó 481 millones negativos en el 2021. Llegados a este punto, la solución para tapar el descubierto pasa o bien por encontrar nuevos inversores que acepten formar parte de la sociedad Bridgeburg o bien para que la entidad consiga dinero por otras vías, como ahora con la venta de jugadores con cartel, para internalizar de nuevo un negocio que genera dudas.
Una revisión al alza del presupuesto
Por otra parte, la posibilidad de aprovechar la baja de larga duración de Marc-André ter Stegen para inscribir a Olmo ha quedado descartada desde el momento en que se ha utilizado el artículo 77 del fair play de la Liga para registrar a Wojciech Szczesny, que aún no ha debutado con el Barça. El polaco tiene ficha en virtud del 80% del espacio salarial que ocupa el alemán, no porque el club haya generado de nuevo. Si renueva un año más, algo que también puede ocurrir con Iñigo Martínez, el Barça tendrá que reinscribirlos. Pero todavía queda mucho para ese debate. Antes es necesario resolver la situación de Olmo.
Diciembre es un mes clave, ya que la Liga hace un control de tesorería en todos clubs para comprobar que se esté cumpliendo con la previsión de ingresos que consta en su presupuesto. Una vez pasado este examen, se calcula el fair play para el mercado de invierno. Aparte de los inversores de Barça Vision, el club intentará rascar dinero de todas las partidas posibles, por ejemplo pidiendo una revisión al alza de lo que se prevé ingresar en Montjuïc, ya que los datos de asistencia de los últimos partidos han sido mejores . "Toda piedra da pared", afirman en la sede de la patronal. Laporta tiene 40 días de margen para evitar que el fichaje estrella de la temporada se vaya a la grada. Tiempo más que suficiente para (volver a) driblar el ridículo.