"No faltarán catalanes acomplejados con ganas de ser más Madrid y menos Barça"

BarcelonaUno de los pocos momentos que rompieron la monotonía de las 11 horas de la reciente asamblea fue cuando Joan Laporta llamó "eruditos" y "mestretites" a los críticos del entorno del Barça mientras hablaba de preservar el modelo de propiedad del club. "La junta que presido somos los garantes de que el Barça sea de sus socios. Quizás somos los únicos garantes. Quienes dicen que el Barça es una empresa, esos eruditos, esos mestretites que dan lecciones, alerta y muy lejos", dijo Laporta ante los socios compromisarios mientras alzaba el tono de voz. Pero la misma semana, el tesorero del club, Ferran Olivé, había dicho que Goldman Sachs, el fondo inversor vertebrador de la financiación del Espai Barça, fue quien escogió a Limak como la constructora de la remodelación del Camp Nou.

Mientras, el Real Madrid se encamina hacia modificar el modelo de propiedad, un objetivo que podría hacer algún avance en la asamblea prevista para noviembre. Su presidente, Florentino Pérez, considera que es la forma de poder pelear de tú a tú contra los clubs estado y ya anunció hace un año la predisposición de dejar de ser una asociación deportiva sin ánimo de lucro. Entonces, la masa social merengue no opuso mucha crítica. La intención es permitir la entrada de inversores externos sin que los socios pierdan la mayoría de la propiedad del club.

Una de las fórmulas posibles, según informa The Athletic, podría ser separar la parte empresarial de la parte deportiva. En la empresarial, los inversores tendrían la posibilidad de adquirir participaciones de su actividad, y la deportiva se quedaría en manos de los socios a través de la fundación benéfica del club. El problema es que convertir a un socio en accionista tendría una fuerte carga fiscal para ese socio. El medio estadounidense también informa que el Madrid, junto a asesores cercanos de Key Capital Partners y el bufete de abogados Clifford Chance, está discutiendo sobre posibles modelos de propiedad.

"El Madrid no está obligado a llevar el asunto a esta próxima asamblea. De hecho, no está previsto que esta asamblea sea la definitiva. El principal problema es que Florentino no quiere que el Madrid se convierta en una SAD (sociedad anónima deportiva). Pero bufetes de abogados de primer nivel consultados por el Madrid aseguran que, en España, o eres una asociación deportiva sin ánimos de lucro [el actual modelo de propiedad del Barça y el Madrid] o eres una SAD. La ley del deporte no permite ningún otro modelo en España", explica al ARA Antón Meana, periodista de la SER especializado en la información del equipo blanco. "Florentino no presentará un nuevo modelo societario a los socios hasta que esté seguro de que va a ganar la votación", añade.

También conoce muy de cerca la realidad de la entidad Joaquín Maroto, adjunto al director en el diario As y exjefe de comunicación blanco con Florentino como presidente. "Creo que en la asamblea se anunciará la convocatoria de una asamblea extraordinaria únicamente para hablar del cambio del modelo de propiedad", prevé. "Lo que nunca perderá el Madrid es el control de la propiedad por parte de sus socios. Eso puedo asegurarlo porque conozco a Florentino y él hace 25 años ya se presentó para ser presidente del Madrid con el leitmotiv de evitar que el Madrid fuera una SAD. Entonces veía la deriva que tenía el club. Seguramente, sin Florentino el Madrid ya sería una SAD porque se lo habría comida la deuda", considera Maroto.

Las sociedades externas que tienen peso en el Barça

La financiación del Espai Barça ha comportado que el Barça tenga que satisfacer desde ahora y durante el próximo cuarto de siglo la veintena de fondos inversores vertebrados por Goldman Sachs que le están dejando el dinero para realizar las obras. Pero esta no es la única manera con la que entidades externas tienen argumentos para presionar las decisiones del Barça, sobre todo si en algún momento no se cumplen los puntos pactados por contrato, pese a que el club conserve su condición de asociación deportiva sin ánimo de lucro.

Las llamadas palancas también han comportado la aparición de otras sociedades que se han apoderado de activos del Barça a largo plazo a cambio de dinero a corto plazo. El 25% de los derechos televisivos en la Liga de los próximos 25 años los tiene Sixth Street; Blaugrana Invest (sociedad que cuelga de Socios.com), Vestigia, Hellgas, Aramark y Orpheus Media se reparten el 26,9% del capital social de Barça Produccions (la división audiovisual del club) y 475 palcos vip del Camp Nou los tendrán durante 25 años New Era Visionary Group y Forta Advisors Limited.

"Siempre he defendido que no se trata de modelo de propiedad. Se trata de gestión. Hay clubs muy bien gestionados y empresas cotizadas con todos los teóricos requisitos que comporta que son un desastre y quiebran", analiza al ARA Eduard Romeu, exvicepresidente económico del Barça durante este mandato de Laporta. "Al mismo tiempo, el modelo de propiedad del Barça es atractivo precisamente por ser un hecho diferencial. Y como siempre se dice, todo el mundo quiere lo que no puede tener. Y como el Barça no se puede comprar, tiene más valor todavía", sigue explicando.

Romeu tiene claro cuál debe ser el futuro del Barça: "Nuestro club debe ser siempre de los socios, su legítimo propietario. Y eso no está reñido con la buena gestión y las mejores prácticas. Y sin olvidar nunca que hablamos de sentimientos y, por tanto, todo es muy emocional. No es una empresa ordinaria al uso. Este para mí es el problema de algunos demasiado académicos. Esto nunca puede triunfar".

La espada de Damocles

¿Hay alguna forma de blindar el modelo de propiedad del Barça? "Siempre está amenazado", responde Marc Duch, financiero del entorno del Barça e integrante del grupo Manifest Blaugrana. También está vinculado actualmente al grupo de trabajo de Marc Ciria, potencial aspirante a la presidencia. "Siempre está la espada de Damocles. Potenciales compradores no nos van a faltar. Y catalanes acomplejados con ganas de ser un poco más Madrid y un poco menos Barça, tampoco", vaticina. "Yo me creo a Jan [Laporta] cuando defiende el modelo de propiedad. No es su intención alterarlo. Pero se puede dar la situación de que no tengamos más remedio porque hemos hecho méritos para ir hacia allá".

Por eso Duch es crítico con algunas decisiones que la junta de Laporta ha tomado durante los últimos tiempos. "No es compatible llenarse la boca con el modelo de propiedad y mantener las asambleas telemáticas. Tampoco con expulsar a la grada de animación del estadio. Ni con reconocer que quien elige la constructora del Camp Nou es Goldman Sachs. Cuando hay tantas cosas desalineadas, o todo es marketing y me engañas, o lo que no tienes es ninguna vergüenza", asegura. Los vasos comunicantes entre Barça y Madrid van mucho más allá del terreno de juego.