Ni vendiendo a De Jong puede el Barça inscribir a Raphinha y Dembélé

BarcelonaDía sí, día también, la cúpula deportiva del Barça lucha por equilibrar la masa salarial del club, que los ejecutivos azulgranas querrían cifrar en 470 millones de euros, una cifra todavía alejada de la realidad. Mientras el entrenador Xavi Hernández pide una plantilla competitiva y el presidente Joan Laporta promete competir por títulos, el director de fútbol Mateu Alemany y el director internacional de captación Jordi Cruyff se enfrentan al rompecabezas que supone gestionar una plantilla heredada con salarios desorbitados y fuera de mercado. Desde el club se subraya que la situación económica en el Barça es tan grave que a pesar de que el club pueda hacer operaciones como la de Ferran Torres en el mercado invernal pasado o ahora la compra de Raphinha, inscribir a los nuevos contratos sigue siendo el principal dolor de cabeza. La activación de la segunda palanca –la venta de un 15% más de los derechos televisivos por un cifra superior a los 300 millones– está prevista para la semana que viene.

En este sentido, a pesar de que en la entidad azulgrana hay quorum en que Frenkie de Jong es un futbolista talentoso, la cúpula deportiva ya ha trasladado al jugador que está dispuesto a traspasarlo al Manchester United, dispuesto a pagar una cantidad superior a los 80 millones de euros entre fijos y variables. La oferta del conjunto inglés, que tiene prisa por incorporar al centrocampista neerlandés, satisface los intereses de los gestores del Barça, que argumentan que es una operación a la cual se ven abocados por las urgencias económicas. Quien tiene la sartén por el mango, sin embargo, es el jugador, que está contento y feliz en Barcelona, y al cual no se le puede obligar a irse, porque tiene contrato en vigor. De momento, De Jong, que ya ha aceptado varios diferimientos de su salario, no contempla rebajarse el sueldo. El club no se ha planteado todavía ninguna acción para presionar al jugador, a pesar de que es consciente que el United no estará eternamente a la espera, pero no se descarta la posibilidad de que el neerlandés no viaje con el equipo a la gira de Estados Unidos. El sábado por la mañana Xavi dará a conocer la lista de convocados. La intención de la entidad catalana sería cerrar la venta en los próximos días, incluso, antes de la gira.

Desde el Barça se está intentando convencer a De Jong de que dar el salto al United, a pesar de no disputar la Liga de Campeones, sería un buen destino para el futbolista. Por su parte, el conjunto de Manchester ve el neerlandés como el eje del nuevo proyecto que encabeza el exentrenador de Frenkie en el Ajax, Erik ten Hag. Desde la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí admiten que seguramente De Jong hará un muy buen curso en un conjunto rival, pero mantienen que es una decisión por criterios económicos. En los despachos nobles del Camp Nou explican que traspasando al neerlandés –que supone un coste de 42 millones de euros para la entidad– podrían incluir tres contratos nuevos: los de los recién llegados Franck Kessié y Andreas Christensen, y también el de Sergi Roberto, que seguirá en el Barça un curso más después de agotar su anterior contrato con la entidad.

Desde el club también se argumenta que De Jong es de los pocos futbolistas prescindibles que tienen mercado.

Con esto, sin embargo, no habrá suficiente aún para inscribir ni a Raphinha, fichado del Leeds y que este viernes será presentando como azulgrana, ni tampoco al nuevo contrato que vincula a Dembélé con el Barça hasta el 2024 y que se ha sellado este mismo jueves. Vendiendo a De Jong, el club todavía tendría que liberar alrededor de 20 millones más de masa salarial. Más salidas y rebajas salariales son las principales opciones con las que trabaja la entidad azulgrana.