El precio del fracaso: ¿vale la pena pagar millonadas por futbolistas?
Cada vez es más habitual fichar a golpe de talonario, pero el rendimiento no acostumbra a ser el esperado
BarcelonaCon el calor también llega el mercado de fichajes, una golosina para la ilusión mientras el regreso de la competición todavía acecha en el horizonte. Es el momento tanto para apuntalar proyectos como para intentar dar pasos de gigante incorporando grandes estrellas y el golpe de talonario es cada vez más habitual. ¿Vale la pena hacerlo? En los últimos 15 años ha habido 88 fichajes de más de 50 millones de euros y, en líneas generales, cuanto más caro es el traspaso, más se agudiza el fracaso.
Ian Graham, uno de los pioneros del big data en el mundo del fútbol y actual analista del Liverpool, sostiene que hay seis motivos principales por los cuales un fichaje no triunfa: el jugador no es tan bueno como pensabas, no se adapta al estilo de juego, no juega en su posición natural, al entrenador no le gusta, tiene problemas de lesiones o personales o, sencillamente, ya hay uno mejor en la plantilla. El Barça ha hecho once fichajes de más de 50 millones de euros y es fácil identificar qué problemas ha tenido cada uno de ellos.
Luis Suárez ha sido el único éxito incontestable. Neymar, a pesar de formar parte de un tridente histórico, abandonó Barcelona deshaciendo el relato de ser el sucesor de Messi. Fue la primera pieza del efecto dominó que culminó con los fichajes de Antoine Griezmann, Philippe Coutinho y Ousmane Dembélé. Otro de los delanteros, Zlatan Ibrahimovic, no encajó con Guardiola. Tampoco han acabado de brillar ni Miralem Pjanic, fichado gracias a la ingeniería económica de Bartomeu y a cambio de Arthur Melo, ni Frenkie de Jong. Curiosamente, ninguna de las estrellas de aquel Ajax semifinalista de la Champions ha acabado de encontrar su lugar fuera de Amsterdam. El azulgrana tiene la puerta abierta, De Ligt ha fichado por el Bayern sin haber destacado en la Juventus y Ziyech, sin demasiados minutos en el Chelsea, podría acabar el verano en Milán.
A falta de prácticamente un mes para el cierre del mercado, ya ha habido una decena de movimientos que superan los 50 millones de euros. Lidera la tabla histórica el Manchester City, con 14 traspasos. Solo dos de estos –Sterling y De Bruyne– se produjeron antes de que Guardiola aterrizara en Manchester. Excepto Grealish, por su coste –117 millones de euros–, y Haaland, por estatus, el City no acostumbra a fichar grandes estrellas, sino complementos que encajen en la pizarra del entrenador catalán. El Barça, segundo de la tabla, es, además, el equipo que históricamente más dinero ha gastado en traspasos: 2.680 millones de euros. El Chelsea podría empatar con los azulgranas si acaba firmando al catalán Marc Cucurella, del Brighton. En el lado rojo de Manchester, el United evidencia la dificultad de fichar por tantas decenas de millones. Solo Bruno Fernandes, líder del equipo, ha conseguido brillar. Maguire (87 millones de euros), Pogba (105), que ha vuelto gratis a Italia, o Di María (75) son algunos ejemplos de la quiebra en materia de fichajes.
El Madrid consigue colarse entre el músculo financiero de la Premier, pero con resultados no demasiado convincentes. Este verano ha incorporado al joven Tchouaméni y el mejor precedente es el de Cristiano Ronaldo. También aprueba Militão, que se ha acabado quedando con la titularidad después del adiós de Varane y Sergio Ramos. Kaká, Jovic, Bale, Hazard y James Rodríguez estuvieron lejos de las expectativas. Se cuelan en la lista dos equipos asiáticos: el Shanghai Port, que firmó a Oscar y Hulk, y el Jiangsu Suning, club ya desaparecido que fichó al brasileño Alex Teixeira.
Entre los diez jugadores más caros de la historia, solo hay un caso de éxito total: el de Cristiano Ronaldo. La lista la encabezan dos jugadores del París Saint-Germain: Neymar y Mbappé. El brasileño y Dembélé son los dos únicos futbolistas del ranking que mejoraron sus cifras ofensivas la temporada del fichaje. Del resto, pocos repuntaron su rendimiento. Diego Simeone no ha tenido la intención de potenciar la creatividad de João Félix, sino que ha continuado practicando un fútbol pragmático. Grealish ha estado lejos de la titularidad, a pesar de que desde Manchester confían que este año será un jugador importante. En octava posición está Cristiano Ronaldo y la fallida apuesta de la Juventus para luchar por la Champions. Justo detrás del portugués, está su sustituto en el Madrid, Hazard. Como Coutinho, llegó a ser uno de los mejores jugadores de la Premier. Cierra la clasificación Romelu Lukaku, un caso paradigmático. El Chelsea invirtió 113 millones en el belga, que la temporada anterior fue uno de los mejores jugadores de Italia. Thomas Tuchel fue incapaz de adaptar a su sistema el fichaje más caro de la historia del club, que a media temporada reveló en una entrevista que quería volver a Mián. Dicho y hecho, el Inter lo ha recuperado cedido.
