Viajar en avión o en tren: ¿el Barça, el Espanyol y el Girona hacen como el PSG?

BarcelonaMientras en Barcelona la gente se hacía eco, especialmente en las redes sociales, de la conciencia ecologista del último fichaje del Barça, Héctor Bellerín, paralelamente en Francia crecía una polémica relacionada con el impacto medioambiental de los aviones privados que usan los equipos de fútbol de primer nivel. Que el PSG, propiedad de Qatar Sports Investments, es un club que hace bandera de su ostentación no es nuevo -en 2017 pagaron la cláusula de rescisión de Neymar, 222 millones de euros-, pero sí que han sacudido el país el cinismo de su entrenador, Christophe Galtier, y las burlas de la estrella del equipo, Kylian Mbappé. Los desplazamientos en jet privado de futbolistas, cuerpo técnico, personal y directivos del club parisiense a ciudades relativamente próximas a la capital han provocado un alud de críticas.

La desafortunada reacción de Galtier y Mbappé fue durante una rueda de prensa. Cuando un periodista les preguntó por qué el equipo había ido en avión al campo del Nantes, a poco menos de 400 kilómetros al oeste de París -un trayecto que se puede hacer en menos de dos horas en tren de alta velocidad-, el entrenador y el futbolista estallaron a reír. Galtier, además, decidió hacer mofa y dijo que el equipo se estaba planteando desplazarse con "una carreta". La bola de nieve se hizo tan grande que el técnico acabaría pidiendo disculpas en la rueda de prensa siguiente. La pregunta del periodista venía a cuento de unas declaraciones de Alan Krakovitch, uno de los directivos de la empresa ferroviaria SNCF, que el domingo había hecho un tuit recomendando al PSG utilizar el tren de alta velocidad.

El Parlamento francés aprobó el año pasado una ley que prohíbe los vuelos nacionales cuando haya una alternativa ferroviaria -mucho menos contaminante- en desplazamientos inferiores a dos horas y media. Una normativa, sin embargo, de la cual están exentos los vuelos privados. En unas declaraciones de hace unos meses, el director general de la SNCF, Jean-Pierre Farandou, afirmó que un tren de alta velocidad contamina "80 veces menos que un avión". La política de desplazamientos del PSG contrasta con el acuerdo que el Betis, equipo de la Liga española, ha firmado recientemente con Renfe. El equipo andaluz y la empresa ferroviaria estatal han firmado un pacto de colaboración para que el tren sea el "transporte oficial" para los equipos de fútbol y de baloncesto de la entidad. De hecho, la ministra francesa de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, mencionó el ejemplo del Betis en declaraciones a la emisora France Info.

Una práctica habitual

Sin embargo, el uso de los vuelos chárter es una práctica habitual de los grandes equipos de fútbol. El Barça utiliza a menudo bajo el pretexto de que los horarios de los partidos de Liga los suelen saber con un margen de pocas semanas de antelación (entre tres y cuatro) y que a menudo juegan tarde, lo que dificulta coger vuelos regulares. Además, las expediciones azulgranas a menudo son superiores a la cuarentena de personas. También porque la acumulación de partidos en un calendario apretado reduce las posibilidades de transporte teniendo en cuenta el descanso de los jugadores. A diferencia de la polémica con el desplazamiento a Nantes del PSG, el Barça sí que ha ido a campos como el del Villarreal, en Castellón de la Plana (a poco menos de 300 kilómetros), en autobús, o a Zaragoza (300 km), cuando el conjunto aragonés militaba en Primera. A veces, sin embargo, también se han desplazado a Castellón en vuelo chárter. En cuanto a las secciones, el club sí que utiliza muchas más alternativas a los aviones privados. Paralelamente, desde la entrada de la nueva junta el club dice que se ha comprometido a trabajar por la sostenibilidad, especialmente en cuanto a la construcción del Espai Barça.

La política del Espanyol es similar a la azulgrana y el primer equipo periquito se desplaza a menudo en chárter pequeños, con capacidad alrededor de 50 plazas, que son para el personal del club. En cuanto a los desplazamientos de entre dos y tres horas de trayecto por carretera, se suelen hacer en autocar, lo que incluye los desplazamientos dentro de Catalunya y al País Valenciano. En ciudades como Pamplona o Bilbao, en cambio, van en vuelo privado. Desde la pandemia también van en avión a Madrid, a pesar de que antes lo solían hacer en tren de alta velocidad.

El caso del Girona, equipo que ha subido este año a Primera, contrasta. El año pasado en Segunda se desplazaban a menudo con autocar y este curso, si optan por hacerlo en avión, lo hacen con vuelo regular. Esto quiere decir que el equipo va en autocar al aeropuerto de Barcelona para coger el avión. Desde el club gerundense explican, sin embargo, que priorizan el tren de alta velocidad si pueden. Es el que utilizarán para ir a los desplazamientos a Madrid y, seguramente, también lo harán cuando vayan a Pamplona o al País Vasco, como ya hacen con el País Valenciano. No descartan volar en chárter, pero solo si los horarios y el calendario complican el descanso de los jugadores. De hecho, el último chárter que cogió el primer equipo del Girona fue en verano, para ir a jugar a Tenerife el retorno del playoff de ascenso y porque las opciones con vuelo regular no les encajaban.

El ejemplo del Sankt Pauli

Si hay un equipo que está en los antípodas del PSG (y otros grandes clubes europeos) en cuanto a la política de desplazamientos es el Sankt Pauli, actualmente en la Segunda División alemana. Conocido por ser estatutariamente antirracista, antihomófobo y antifascista, el popular conjunto de Hamburgo está preparando el primer partido sin coches en su estadio este fin de semana. Esto quiere decir que el equipo llegará con un autocar eléctrico y los aficionados lo tendrán que hacer a pie, en bicicleta o en transporte público. "Es un primer paso junto con nuestro socio de movilidad, la organización de transporte público de Hamburgo", explica al ARA Oke Göttlich, presidente del club.