Sanciones en Rusia

El Espanyol, entre los clubs investigados por comprar futbolistas en Rusia

Hasta treinta operaciones están bajo sospecha por incumplir las sanciones con Rusia

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Tonny Vilhena poniendo como nuevo jugador del Espanyol.

BarcelonaEl 24 de febrero de 2022 comenzó la invasión rusa en Ucrania. Después de años de conflicto, desde 2014, Vladimir Putin proclamó las repúblicas de Donetsk y Lugansk. Occidente no podía permitirlo. Por ese motivo, los países aliados decidieron aplicar medidas para castigar al Kremlin. Una de las más importantes: las sanciones económicas que tenían como objetivo hundir a la economía rusa. Si bien ya existen más laxas desde el inicio del conflicto, ocho años antes, las de ahora pretendían ser de amplio recorrido. Por eso apuntaron a todos los frentes: individuos, bancos, empresas, intercambios monetarios, transferencias bancarias, exportaciones e importaciones. Ahora, sin embargo, una investigación de medios de trece países diferentes apunta a que el mundo del fútbol pudo saltárselas en varias ocasiones. En concreto, 28 equipos habrían realizado hasta treinta operaciones bajo sospecha. Uno de ellos, el Espanyol.

El club catalán se habría visto implicado con la operación por Tonny Vilhena, que se puso la camiseta blanquiazul después de que el club abonara 2,5 millones de euros en el FK Krasnodar ruso. Éste no es el único caso en España. De hecho, de las decenas de casos que señala la investigación, cinco de ellos tendrían como protagonista a un club español. La Real Sociedad, el Almería, el Elche y el Cádiz son los demás implicados. Todos ellos habrían realizado operaciones por un total de 31,5 millones de euros. En total, las operaciones investigadas de todos los relacionados con las supuestas regularidades suman 66. El mayor traspaso lo habría llevado a cabo la Real Sociedad, después de que este verano pagara 13 millones de euros por Arsen Zakharyan.

El Espanyol logró la cesión de Tonny Vilhena, jugador al que había seguido de cerca en su etapa en Países Bajos, en enero del 2022, pocos días antes de que Rusia iniciara la invasión en Ucrania. El club blanquiazul aprovechó que el jugador quería salir del país para incorporarle al mercado invernal procedente del FK Krasnodar. De entrada, no pagó traspaso por el préstamo y sólo asumió una pequeña parte del salario, una cifra inferior a 400.000 euros. Aquel verano, sin embargo, el Espanyol hizo efectiva la opción de compra de la que disponía, de unos 2,5 millones de euros, y se quedó en propiedad el centrocampista. Fue una operación más comercial que deportiva, ya que el jugador se marchó cedido ese mismo verano a la Salernitana italiana a cambio de un pequeño pago. Un traspaso que revalorizó el jugador, que un año más tarde, el verano del 2023, con el Espanyol en Segunda, se marchó traspasado al Panathinaikos por unos 3 millones de euros, algo más de lo que había abonado inicialmente el entidad blanquiazul.

El Espanyol se declara inocente

Pero el caso de Vilhena tiene una particularidad. Según la misma investigación, el Espanyol no realizó la transferencia bancaria a una entidad rusa, sino que acordó con el FC Krasnodar efectuar el pago a una tercera cuenta corriente. De esta forma, los 2,5 millones que se abonaron no fueron a parar a un banco del país sancionado. El FC Krasnodar es propiedad del millonario ruso Sergei Galitski. Fuentes oficiales del Espanyol dicen al ARA que la operación Vilhena se cerró "antes de la guerra" y que "no entra en el blog" investigado. "La opción de compra se negoció y cerró antes de los ataques a Ucrania", añaden desde Cornellà-El Prat, donde sí admiten que el pago se hace efectuar una vez iniciado el conflicto, aunque sostienen no han sido notificados de ninguna investigación.

El caso de Arsen Zakharyan

Durante el último mercado de fichajes, el nombre de Arsen Zakharyan fue muy sonado. Todo apuntaba a que el jugador, que militaba en el Dinamo de Moscú, acabaría fichando por el Chelsea, un club históricamente vinculado con el Kremlin por su antiguo propietario, Roman Abramovich. Sin embargo, la operación no llegó a buen puerto. De hecho, los de Stanford Bridge llegaron a pedir al club de Moscú la propiedad del jugador y retrasar el pago hasta que las restricciones económicas lo permitieran. El club dijo que no.

Semanas más tarde, sin embargo, aparecía un nuevo actor: la Real Sociedad. Después de que una grave lesión forzara la retirada de la leyenda David Silva, los donostiarras salieron al mercado en busca de un sustituto. La opción que más gustaba era la de Zakharyan. Tanto fue en cuanto abonaron 13 millones de euros por hacerse con el jugador. La Real Sociedad explica que no tuvieron ningún problema a la hora de efectuar el pago. "Se hicieron todas las comprobaciones: la categoría futbolista no estaba incluida en la lista de sanciones", ha asegurado un portavoz del club a El País.

La otra cara de la moneda

Unos casos muy diferentes son los que tienen como protagonistas al Almería y al Cádiz. Los equipos andaluces, a diferencia de los otros tres españoles, no realizaron ninguna compra en el mercado ruso, sino que vendieron allí. Así, los pagos no van en contra de las sanciones. Ahora bien, sí se saltaban las normas, ya que al vender a un futbolista a un equipo vetado, los bienes salidos de Rusia deberían haber quedado congelados. Los traspasos en cuestión son los de Théo Bongonda (Cádiz) y Srdjan Babic (Almería), que recalaron en el Spartak de Moscú por un total de 7 millones y 5 millones, respectivamente.

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