¿Qué necesita el Espanyol para huir del infierno más igualado de Europa?

BarcelonaSólo quienes han pisado la Segunda División española entienden bien por qué es un infierno. Dos datos ayudan a entender la dificultad de una categoría de la que el Espanyol intenta huir por sexta vez. La primera: en la última jornada sólo ganó uno de los primeros 11 clasificados y sólo perdió a uno de los 11 últimos. La segunda: es la única de las principales categorías de plata del fútbol europeo donde todavía no hay nada decidido: ni el ascenso a Primera ni la promoción de ascenso ni el descenso. Está abierto a cinco jornadas para el final.

Una situación bastante diferente a la que vivió el Espanyol hace tres temporadas. En ese punto del curso era líder con 77 puntos, 13 más que el actual primer clasificado, el Leganés. Los blanquiazules tenían casi asegurada una plaza en la máxima categoría, ya que tenían 14 puntos más que el tercero, el Almería. Este año el escenario es más dramático para todos los aspirantes al ascenso. La actual LaLiga Hypermotion es la única gran segunda europea donde antes del inicio de esta jornada sólo había 10 puntos de distancia entre el primero (Leganés) y el décimo (Racing de Ferrol). La diferencia se reduce a sólo seis entre el cuarto (Espanyol) y el conjunto gallego. Además, teniendo en cuenta que el Levante tiene la última plaza de play-off a sólo tres puntos, son once las aficiones que aún mantienen vivo el sueño del ascenso a falta de un mes para el final de la liga regular.

Leganés y Valladolid, con 64 puntos, tienen el Eibar a sólo tres, el Espanyol a cuatro, y el Elche a seis. Las dos plazas de ascenso directo, por tanto, todavía están por decidir. Para optar, hay que ser fiable: los madrileños han empatado en los últimos cinco partidos. El Espanyol, en cambio, suma cuatro empates y un solo triunfo. El calendario que les queda a los de Manolo González no es fácil: recibirán en el Stage Front Stadium dos equipos en un punto de la zona de promoción, el Sporting y el Oviedo, y un Cartagena que ha sacado la cabeza del descenso después de ser colista durante 16 jornadas. Los blanquiazules tampoco tienen salidas asequibles: visitarán al Valladolid, en un partido a cara o cruz, y el Amorebieta, otro modesto que lucha por escapar del descenso y que estuvo cerca de puntuar en Cornellà.

La diferencia es mayor en Europa

La comparación con otros campeonatos evidencia aún más la igualdad que se vive en España. En Inglaterra, el Leicester ha asegurado su regreso a la Premier League después de sumar 97 puntos en 45 jornadas. Son otros 34 puntos de los que tiene el décimo, el Preston North. En la Serie B italiana, el Parma tiene el ascenso a tocar porque aventaja en seis puntos al Venezia, tercero, a falta de nueve por disputar. Le saca 28 al décimo, el Cittadella. También significativa es la distancia que separa a los líderes y los décimos clasificados en otros campeonatos: en la Bundesliga 2 alemana hay 23 puntos entre St. Pauli y Elversberg. Los mismos que le quita, en Portugal, el Santa Clara al Torreense. En la Ligue 2 francesa, hay 21 entre Auxerre y Amiens. Son 28 en la segunda división de Turquía; 25 en la de los Países Bajos; 19 en la de Bélgica y 14 en la de Rusia.

Leganés y Valladolid, por cierto, son dos de los colíderes con una puntuación más baja de entre las diez principales segundas divisiones europeas. Suman los mismos puntos que el líder portugués –con seis jornadas menos– y sólo superan a los de Alemania, Bélgica y Rusia, que han disputado seis, siete y ocho jornadas menos, respectivamente.

Si encarnizada es la lucha por subir, también lo es por no bajar. España es el único país que no tiene ningún equipo virtual o matemáticamente descendido en el tercer escalón. El Andorra, colista, tiene la salvación a sólo cinco puntos. Hasta diez clubs lucharán por la permanencia en este tramo final, ya que el Zaragoza, decimotercer, tiene el descenso a sólo cinco puntos. A Primera, en cambio, el decimotercer (Sevilla), le quita 12 puntos al primer equipo en descenso, un Cádiz que tiene la salvación a cinco puntos. Hyperemotion hasta el final.