La poción mágica de los (buenos) directores deportivos del Espanyol
El club blanquiazul redebuta en Primera con un proyecto de pura supervivencia
BarcelonaAntes de la llegada de Chen Yansheng, en el área deportiva de el Espanyol se le exigía hacer milagros con economías de guerra. La deuda que arrastró durante años a la entidad obligaba a malvender la mayor parte del talento y limitaba la capacidad de inversión en refuerzos. El club se adaptó a ese complejo escenario, hasta el punto de mantenerse durante casi tres décadas en la élite. Sobrevivir en Primera sin dinero para invertir en refuerzos será el gran reto de Fran Garagarza, el actual responsable deportivo de un Espanyol que empezará la Liga este lunes en el campo del Valladolid (19 h, DAZN).
“Necesitamos dos delanteros con un buen nivel. También dos jugadores creativos, sean extremos o piezas que jueguen por dentro y por fuera, además de un centrocampista y un central”. Ésta fue la carta a los Reyes que el entrenador, Manolo González, recitó hace unas semanas en una entrevista en TV3. El preparador reivindicó “refuerzos necesarios”, si bien dejó claro que es plenamente consciente de la situación que vive la entidad: “Por desgracia existe un tema económico que nos ha impedido llevar a algunos jugadores que queríamos. El día de hoy estamos jodidos, hay que decirlo así. Garagarza me dijo que van a intentar llevar todo lo que puedan, pero debemos ser conscientes de que no estamos en la situación de repetir movimientos como los que se produjeron hace unos años”.
En esta última reflexión, González se refería a los nueve fichajes más caros de la historia del Espanyol, todos ellos contratados bajo el mandato de Chen: Raúl de Tomás (22,5 millones), Matías Vargas (10,5) , Borja Iglesias y Embarba (10), Cabrera (9), Darder, Calero y César Montes (8) y Leo Baptistao (7). Las pérdidas que arrastra la entidad a raíz de los dos últimos descensos y de la pandemia, así como una deuda que ha vuelto a engordar, han reducido el fair play financiero y obligarán a volver a apostar por la inagotable plantel y los refuerzos low cost.
Álvaro Tejero (libre) y Carlos Romero (cedido) marcaron el camino a seguir por un Garagarza que hará bien en buscar la poción mágica que permitió sobrevivir a dos de sus predecesores, los druidas Ramon Planes y Òscar Perarnau. Por el momento, el ejecutivo vasco se plantará en la jornada 1 con seis caras nuevas en la plantilla que compensan los adios de Braithwaite, Melamed y Keidi Bare.
Además de Tejero y Romero, en las últimas semanas han llegado a Cornellà-El Prat cuatro jugadores a préstamo. El último es el defensa italoalbanés Marash Kumbulla, perteneciente a la Roma. Los otros son el centrocampista centro checo Alex Král, propiedad del Union Berlin, y los delanteros Irvin Cardona y Alejo Veliz, del Augsburgo y el Tottenham, respectivamente. Futbolistas poco conocidos por la parroquia blanquiazul que deben ayudar al Espanyol a remar contra la precariedad y continuar en Primera. Sin embargo, con la lista de la compra de Manolo en la mano todavía faltan recursos: los dos jugadores creativos son el objetivo antes del cierre del mercado.
Fichar con pocos recursos, una rutina habitual
Garagarza intenta repetir la poción mágica de Planes y Perarnau para fichar bueno y barato. Pese a disponer de pocos recursos, ambos tuvieron buen ojo para rehacer plantillas que cada año perdían buena parte de sus mejores jugadores.
Con Planes, que ocupó el cargo entre el verano de 2009 y el invierno de 2012, el Espanyol nunca pagó más de 6 millones por nadie. Solo llegó a esa cantidad por Sergio García, que la amortizó a base de goles. Su segundo fichaje más caro, Dani Osvaldo (5,1 millones), dio también un gran rendimiento antes de ser traspasado por 16 millones. Durante su mandato también fichó a Héctor Moreno y Cristhian Stuani, por 2,5 y 2,7 millones, e incorporó libras a Verdú, Víctor Sánchez y Kalu Uche, y cedidos a Coutinho o Longo. El Espanyol le cesó en el 2012, pero le intentó recuperar en hasta tres ocasiones. La última de ellas, en el 2022, tal y como avanzó el ARA. Planes, de hecho, era el candidato escogido por José María Durán si finalmente Chen vendía el club a Mountain Star Sports Group. Ahora es el director deportivo del Al-Ittihad saudí.
Si sus números fueron ajustados, aún lo fueron más los de Perarnau. Entre finales del 2012 y principios del 2016, el del Maresme no pudo pagar más de 1,5 millones por nadie. Ésta, de hecho, fue la cifra que abonó al Villarreal por el 50% de los derechos económicos de Gerard Moreno. Perarnau también recuperó a David López por 250.000 euros, fichó a Álvaro González y Hernán Pérez por 1,1 y 1,3 millones y, sobre todo, reconstruyó las plantillas a base de jugadores cedidos (Lucas Vázquez, Marco Asensio, Sidnei, Pizzi o Córdoba) y libras (Caicedo, Sevilla, Cañas, Abraham, Diop). Oportunidades de mercado con talento y hambre suficientes para mantener al Espanyol en Primera. Justo lo que vuelve a necesitar la entidad.