La banca cooperativa, más fuerte después de la crisis pero todavía lejos de Europa
El volumen de negocio de Caixa Ingenieros creció un 148% entre 2007 y 2023, mientras que el sector disminuyó un 12%
BarcelonaMientras los grandes bancos debían ser rescatados con más de 66.000 millones de euros, la banca cooperativa en España no solo aguantó su tipo con la crisis económica, sino que les fue mejor sin recibir nada. Es decir, estas entidades no cerraron oficinas ni despedir a trabajadores de forma masiva y, además, ganaron mucho más negocio en comparación con el resto del sector.
Así lo constata un estudio elaborado por la Cátedra de Economía Social del TecnoCampus. En el caso de Caixa Ingenieros, los créditos crecieron un 70% entre 2008 y 2023, mientras que el sector veía cómo disminuían un 24% durante el mismo periodo. Por lo que se refiere a los depósitos, la banca cooperativa vio cómo se dispararon un 149%, en comparación con el aumento del 1% del resto del sector.
Pese a las buenas cifras que ha registrado en las últimas décadas, la banca cooperativa todavía está lejos de alcanzar los niveles que tiene en otros países. La cuota de mercado en Europa se sitúa en el 22% en depósitos y el 23% en créditos. Sin embargo, en España la cifra disminuye hasta el 10% para los depósitos y el 9,5% en los créditos, con 3,5 millones de usuarios. Unas proporciones equiparables a Cataluña. Son de los niveles más bajos entre los países europeos, sólo son algo peores en Italia —10% en depósitos y 8% en créditos—, donde sólo hay 1,4 millones de clientes.
Nada que ver con otros estados del continente. El líder indiscutible es Francia, donde la cuota de mercado sube hasta el 63% para los depósitos y el 64% para los créditos, y la banca cooperativa da servicio a 29,7 millones de usuarios. En segunda y tercera posición, se encuentran Austria y Finlandia. Para el director de la Cátedra de Economía Social, Eloi Serrano, las diferencias entre países se deben a cuestiones culturales, con un ciudadano francés más receloso de la banca tradicional o la preferencia en Finlandia y Austria por una atención más cercana.
"En los países donde hay más cooperativas de crédito, hay menos inestabilidad financiera. Este modelo bancario es una fuente de estabilidad", remarca Serrano. Esto explica que hayan ido sumando más clientes desde el estallido de la burbuja inmobiliaria y la posterior crisis económica, y que hayan pasado de los dos millones de usuarios en 2007 en España hasta los casi 3,5 millones actuales. Otros ejemplos de banca cooperativa en el Estado son Cajamar o Laboral Kutxa.
El caso de Caja Ingenieros
A raíz de la crisis, Caixa Ingenieros ha visto cómo el número de clientes se duplicaba. Hace casi 20 años se encontraba por debajo de los 100.000 y ahora ha superado el umbral de los 200.000. Aparte, el volumen de negocio ha crecido un 148% durante este período, en comparación con la caída del 12% que vivió el sector, según el informe elaborado por el TecnoCampus. En 2024 los beneficios de la entidad fueron de récord un año más, con 24 millones de euros.
Para hacer crecer la cuota de mercado de la banca cooperativa, la directora del área de Negocio de Caixa Ingenieros, Anna Salvatella, defiende que hay que explicarse más, especialmente entre los jóvenes que están buscando otros modelos bancarios y acaban prefiriendo a los neobancos. "La economía social debe dar un paso y ponerse sexy para aproximarse a otros colectivos", añade Maria Teixidor, directora general del Grupo Clade, grupo de empresas en el que se integra Caixa Ingenieros.