El Banco Sabadell gana 1.390 M€ y erige a los accionistas minoritarios como "verdadero núcleo duro" contra opas
El banco catalán inicia nueva etapa afianzando el compromiso de distribuir 6.450 millones a los accionistas hasta el 2027
BarcelonaNuevo récord de beneficios del Banc Sabadell. La entidad ganó entre enero y septiembre de este año un total de 1.390 millones de euros, lo que supone un incremento del 7,3% respecto al mismo período de 2024. Los del tercer trimestre son los primeros resultados del banco tras el largo proceso de la opa del BBVA, que fue rechazada al conseguir el apoyo sólo del 25,47% de los derechos de voto. Y se presentan cuando todavía se vive con euforia haber superado la operación del banco de origen vasco y se acerca la fiesta privada de este sábado, para la que ha alquilado el palacio Sant Jordi de Barcelona y esperan a unas 9.000 personas de la plantilla para celebrar la resolución del caso y agradecerles el esfuerzo realizado durante este tiempo.
El consejero delegado del Banco Sabadell, César González-Bueno, ha asegurado este jueves en la rueda de prensa habitual de presentación de resultados que con la opa fracasada del BBVA se ha demostrado que el banco cuenta "con un núcleo duro que son el 40% de los pequeños accionistas". El directivo enfatizó, cuando le preguntaron sobre la posibilidad de buscar socios estables para evitar nuevas opas, la importancia de los accionistas minoristas, de los que el 30% son a la vez clientes. Y también ha dicho que no ve en el horizonte próximo nuevas fusiones o compras en el sector en España.
Las ganancias obtenidas en los primeros nueve meses, aunque están por debajo de lo previsto por los analistas, permiten "reafirmar los objetivos de fin de año establecidos en el plan estratégico 2025-2027", así como confirmar la retribución prevista a los accionistas de 6.450 millones durante este trienio. Una parte provendrá del dividendo extraordinario de 2.500 millones (50 céntimos brutos por acción) avalado por la junta de accionistas en agosto por la venta de TSB en el Santander. Esta filial todavía ha aportado hasta septiembre 242 millones de libras (274 millones de euros), el 19,7% del resultado total.
Los accionistas minoritarios, el núcleo duro
En las preguntas sobre posibles compras para crecer, el consejero delegado afirmó que no hay ninguna en perspectiva. Y ha añadido que las tres grandes entidades, CaixaBank, BBVA y Santander "ya tienen un tamaño suficiente" y una operación podría plantear cuestiones como las que se han vivido con la opa que les planteó el BBVA.
"No es necesario ni incurrir en operaciones corporativas que podrían tener perfecto sentido, pero que no se producirán en un plazo previsible", concluyó. Y reiteró que el accionariado minorista del Sabadell se reveló como un verdadero "núcleo duro".
Un dividendo de 6.450 M€
La entidad financiera afronta ahora el reto de demostrar que, como afirmaba durante la opa, dará mejores resultados en solitario que con la integración con BBVA y deberá compensar, por ejemplo, la venta de la filial británica. El plan estratégico prevé alcanzar una rentabilidad (ROTE) del 16%. Actualmente, se sitúa en el 14,1%, con el objetivo de cerrar el año en el 14,5%, frente al 13,2% de hace un año. El compromiso es repartir a los accionistas el excedente del 13% de capital CET1 (el de mayor calidad). Este 2025 la remuneración a los accionistas alcanza los 1.450 millones, de los que quedan pendientes 350 millones de dividendo a cuenta que se pagarán el 29 de diciembre.
González-Bueno ha destacado que "el dividendo por acción será superior en los próximos tres años a los 20,44 céntimos pagados con cargo a 2024". Al mismo tiempo, la rentabilidad será del 16% al término del plan y se centrará "en la mejora de ingresos, la gestión de costes y la ejecución, con España como mercado central de actuación". El ratio de capital CET-1 se situó en el 13,74%. González-Bueno ha explicado que la entidad aspira a "ganar cuota de mercado, pero no de forma radical, sino moderada".
El director financiero, Sergio Palavecino, ha subrayado "la contribución positiva de todos los segmentos de negocio". Un aspecto destacado es una nueva reducción de la tasa de morosidad, hasta el 2,45% en el conjunto del grupo. El margen de intereses, obtenido por la diferencia entre lo que cobra por prestar el dinero y lo que paga por custodiarlo, alcanzó hasta septiembre los 3.628 millones, con una reducción interanual del 3,2% a consecuencia de unos tipos de interés más bajos. Esto se vio compensado por los ingresos por comisiones netas hasta 1.032 millones, el 2,1% más.
Crecimiento hipotecario
En el negocio del grupo en España destaca la nueva producción hipotecaria, que creció un 26%, hasta los 5.062 millones. También aumentó a buen ritmo su crédito al consumo, con un 19% interanual, hasta los 2.216 millones. El nuevo crédito a empresas alcanzó los 13.902 millones hasta septiembre, con un descenso interanual del 1%. Los recursos de clientes en balance, 167.780 millones, aumentaron un 2,6% interanual por las cuentas a la vista, y los de fuera de balance, 51.670 millones, crecen el 15,4% por los fondos de inversión y los seguros.
El banco está decidido a demostrar que puede tener buenos resultados en solitario. En su intervención en la Jornada de los Economistas en Barcelona la semana pasada, el presidente del banco, Josep Oliu, defendió la existencia de bancos de menor dimensión. "Necesitamos bancos solventes y eficientes y capaces de dar servicios a las empresas", dijo. Y en ese contexto en el que se habla de crear grandes bancos europeos, precisó que "no se trata de crear sólo bancos paneuropeos, ya que cuanto más amplio sea su foco más difícil es que sean competitivos en el ámbito local". En el futuro, añadió, debe haber "grandes entidades europeas, pero también regionales, que solucionan problemas a nivel local".