Tomàs Muniesa, el sindicalista que ha alcanzado la cima del primer banco catalán
El histórico directivo de La Caixa, confirmado como presidente de CaixaBank después de casi medio siglo en la entidad
Barcelona"Es el sindicalista que ha llegado más lejos en el gobierno corporativo de una empresa del Ibex 35". Con estas palabras se refería a un veterano del sector bancario al nombramiento, confirmado este miércoles al mediodía, de Tomàs Muniesa como presidente de CaixaBank. Así, a partir del 1 de enero, Muniesa, nacido en Barcelona en 1952, sustituirá a José Ignacio Goirigolzarri, nacido en Bilbao en 1954.
En efecto, en el sector recuerdan que Muniesa era en su día el responsable sindical de Comisiones Obreras en La Caixa cuando la primera entidad financiera de Cataluña estaba presidida por Josep Vilarasau. El directivo se percató de la capacidad del joven sindicalista y su trayectoria en La Caixa, donde había entrado en 1976, y con el tiempo le hizo responsable del área de recursos humanos. "Es muy listo y muy estratega", explica otra voz del sector financiero.
Muniesa, licenciado en Ciencias Empresariales en la Universidad de Barcelona y máster en dirección de empresas en Esade, vuelve a hacer posible que el presidente de CaixaBank, la empresa más influyente del país –aunque con sede en Valencia desde del 2017– vuelva a ser catalán, después de los cuatro años en los que Goirigolzarri, vasco, ha ostentado el cargo. "Es una gran noticia", explicaba una voz empresarial. "Lo valoro mucho, y especialmente ahora que Àngel Simón está al frente de Criteria; son dos veteranos de guerra y los dos de aquí", añadía este empresario.
Esta misma voz recordaba que el lugar donde vive el presidente es clave a la hora de decidir dónde se celebran las reuniones corporativas, y que esto explica que últimamente CaixaBank ha tenido más presencia en Madrid, donde vivían Goirigolzarri y Gortázar (el consejero delegado del banco) y donde el banco catalán tiene también sede operativa.
"Es un corredor de fondo, ha aguantado en esa casa a pesar de todos los vaivenes; eso tiene mucho mérito y ha sido así porque es un hombre muy capaz", explicaba otra voz. "Tiene toda la confianza de Isidre Fainé [presidente de La Caixa, el accionista de referencia de CaixaBank], y es porque es muy potente, muy corporativo y mucho La Caixa", añadía este banquero.
Cabe decir que la mujer de Muniesa, Asunción Ortega, también ha tenido una larga vinculación con La Caixa, donde ha ocupado diferentes cargos.
Un perfil discreto
Fuentes de los trabajadores del banco destacan también la discreción de Muniesa. "Siempre sabíamos que estaba allí, pero no le hemos tratado demasiado, ha pasado siempre muy desapercibido".
Otras voces del sector apuntan a que Muniesa cumplirá sin dificultades con el papel representativo y no ejecutivo que quiere el Banco Central Europeo, y que es muy improbable que tenga choques por las parcelas de poder con Gortázar, como había ocurrido en el caso de Goirigolzarri. "Tendrá poca proyección pública, entre otras cosas porque sabe que no le conviene", afirmaban fuentes conocedoras de la galaxia La Caixa.
Otro banquero coincidía en esta opinión. "Estaba muy retirado de la parte ejecutiva, entiendo que con el nombramiento quieren que no haga ruido". Varias fuentes apuntan a que su edad (es dos años mayor que Goirigolzarri) dificultan que sea un presidente a muy largo plazo y le ven más como una solución temporal. "El nombramiento de [Jordi] Gual [presidente entre 2016 y 2021 ya tuvo algo de esta nota de provisionalidad", añade un buen conocedor del universo de La Caixa.
Muniesa daba esta mañana una buena prueba de su proverbial discreción. En un grupo de WhatsApp con distintos directivos, alguien le felicitaba antes de que el nombramiento fuera oficial (la CNMV lo ha publicado a las 12.45 horas de este miércoles) y Muniesa no ha contestado, a la espera de que todo fuera oficial.
Los seguros, su gran mérito
En el sector explican que Muniesa ha sido el gran arquitecto y "autor intelectual" del imponente negocio que CaixaBank ha levantado con sus seguros con su filial VidaCaixa. "Gracias a los seguros, CaixaBank pudo atravesar la crisis con cierta tranquilidad", apuntan estas voces. En 2023, VidaCaixa dio unos beneficios de 1.147 millones de euros, cuando el conjunto del banco ganó 4.816.