Energía

Bon Preu entra en el negocio del autoconsumo con las baterías virtuales

El encarecimiento de la electricidad hace más rentable y acelera el negocio fotovoltaico

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Trabajadores instalando placas solares en Baviera. En Alemania la formación dual es habitual: los estudiantes trabajan en una empresa y reciben un sueldo.

BarcelonaLa división de energía de Bon Preu empezó a comercializar electricidad hace un año y medio. La compañía ya ha conseguido en este negocio unos 32.000 clientes y ahora da un paso más y entra en el negocio del autoconsumo fotovoltaico. La compañía de Osona ha llegado a acuerdos con la empresa catalana SUD Energies para hacer las instalaciones y con un par de entidades bancarias para financiarlas. Hasta ahora Bon Preu ya ha puesto en marcha unas 150 instalaciones de autoconsumo, pero espera un importante impulso por el aumento del precio de la electricidad, que “hace más atractiva la inversión para los clientes”, según explica al ARA Pere Baucells, jefe de servicios de Bon Preu Energia.

Además, Bon Preu ha puesto en marcha un sistema de batería virtual, explica Baucells, que todavía hace más atractiva la inversión, puesto que el cliente puede recuperar el 100% de la energía excedentaria que haya generado y abocado en la red. Es decir, si en horas de mucho sol y poco consumo genera más electricidad de la que necesita, el excedente va a la red y, cuando consume más de la que produce, puede recuperar el excedente anterior. El sistema de Bon Preu permite incluso vincular a un mismo contrato la segunda residencia. Así, si el cliente tiene una casa en la playa donde está generando con las placas pero no consume, el exceso de electricidad que aboca en la red se lo puede descontar del consumo de la casa principal.

Rentabilidad en cuatro años

Según Bon Preu, la instalación de placas puede reducir entre un 30% y un 40% la factura eléctrica. La instalación tiene un coste de entre 6.000 y 10.000 euros, y la legalización se consigue en menos de tres meses. Una inversión que “en cuatro años queda amortizada”, asegura Baucells, un plazo que incluso se podría acortar gracias a las múltiples ayudas que hay para las energías renovables.

Así, según los cálculos de Bon Preu, las ayudas pueden suponer entre el 30% y el 40% del coste de la instalación, puesto que la mayoría de los municipios tienen importantes bonificaciones en el impuesto de bienes inmuebles (IBI) para los hogares que se sumen al autoconsumo. Además, hay otras ayudas de diferentes administraciones y ahora, también, se pueden conseguir fondos europeos Next Generation. También en algunos casos se pueden obtener deducciones en el impuesto de la renta en función del ahorro conseguido.

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