Cristina Puig: "No puedo comprarme un piso y tengo tres trabajos"

La periodista Cristina Puig (Barcelona, ​​1972) se topó con el mundo de la información por accidente. "Yo quería ser cantante y actriz. Al entrar en la universidad puse como primera opción traducción e interpretación porque quería aprender mucho inglés, irme a vivir a Estados Unidos y llegar a Hollywood. Yo quería ser Madonna", rememora . Como era lo más parecido, Puig puso de segunda opción el grado de periodismo: "Realmente ahora me doy cuenta de que es lo único que sé hacer".

La comunicadora entró en el mundo laboral trabajando de dependienta: "Empecé vendiendo bragas y sujetadores en una tienda de lencería y haciendo de profesora de aeróbic". Durante la época estudiantil aprendió en la Cadena SER y en Radio 4. La primera nómina cobrada fue locutando la Cope. También ha trabajado en Catalunya Ràdio, en RAC1, en TVE y en TV3, en diferentes programas.

El actual responsable de contenidos estratégicos del Hospital de Sant Pau nació en una familia trabajadora y asegura que de pequeña nunca sufrió por el dinero: "Mis padres tenían en claro que si tenían dos hijos todo iría mucho más justo. Entonces , el hecho de ser hija única ha permitido vestirme siempre con lo que he querido, ir a una escuela privada y hacer danza". Ahora, sin embargo, la economía familiar ya le preocupa más: "Se podían permitir más cosas mis padres que yo".

En cuanto a las finanzas personales, asegura que después de la vivienda "el gran gasto es la comida": "No porque me pase la vida yendo a restaurantes caros, sino porque compro producto bueno, soy un pocopijaen este sentido". Puig no lleva un control estricto de los gastos, aunque lo ha intentado en varias ocasiones, y simplemente intenta "no hacer disparates": "Procuro no utilizar la tarjeta de crédito, que me descuenten el dinero en la cabeza de dos días en vez de mes y medio".

En este sentido, Puig siempre ha tenido "cierto miedo" a invertir: "He sido poco atrevida con los productos financieros. Lo poco que he ahorrado lo tengo en el banco, sin recibir nada a cambio, lo tengo como si fuera una hucha". En cambio, la periodista y su pareja sí han abierto una cuenta corriente a su hija. Han puesto mil euros en un fondo para que aumente de valor: "Cada mes añadimos dinero. Así, cuando tenga 18 años y lo necesite, tendrá algo".

Aunque no se considera una gran ahorradora, siempre tiene un "pequeño remanente por si van mal dados". Además, durante el año desvía un dinero para ir de vacaciones en verano: "Cuando tengo un rinconcito, Hacienda viene y me da un varapalo, y no porque me salgan el dinero por las orejas, sino porque cuando tienes tres trabajos tienes tres pagadores, y eso penaliza". Además de dedicarse a la comunicación corporativa, actualmente colabora en RAC1 y ejerce de profesora en Blanquerna. "Parece que para que tienes tres trabajos seas multimillonario. Y realmente tienes tres trabajos porque con uno no es suficiente", explica quien fue presentadora del programa Preguntas frecuentes (FAQS). "De hecho, la gente cree que cuando sales en la tele tienes un sueldo de estrella, y no es así. Los ricos en este trabajo del periodismo son muy pocos", dice.

La vivienda es la mayor angustia económica de la entrevistadora: "Yo toda mi vida he trabajado para poder comprarme un piso, y nunca me he comprado. Cuando era la época prioricé viajar y me' fui a vivir de alquiler". Así, la que fue la mejor decisión económica ha resultado no serlo tanto.

La periodista defiende que la actual crisis de la vivienda no sólo afecta a la gente joven que no se puede emancipar: "52 años, con una hija de 10 y cada cinco años debemos estar sufriendo por si nos renuevan el contrato o no .Además, ahora mismo si quiero comprarme un piso no puedo. ¡No tengo tres trabajos!" La presentadora remarca que las entradas para obtener un préstamo son cada vez mayores: "Si quiero pedir una hipoteca, con la edad que tengo ya no me la harán a 30 años". Ahora mismo le queda un año de contrato en el piso actual: "La pregunta es si será de alquiler o será de compra. Si es de compra, evidentemente no será el piso al que me hubiera gustado ir a vivir."

Puig priorizará dedicarse al periodismo y la comunicación sanitaria hasta su jubilación. La comunicadora confía en que recibirá una pensión, porque aunque la entidad bancaria se la ha propuesto en varias ocasiones, no tiene ningún plan de pensiones privado.