Sarah Andic, hija del difunto fundador de Mango, crea la patrimonial Kiwi
La compañía de la más pequeña de los descendientes del empresario empezó a funcionar el pasado mes
BarcelonaEl 11 de diciembre entró en funcionamiento, según consta en el Registro Mercantil, la compañía Kiwi Capital SL, según avanza este jueves Expansión. Lo hizo para dedicarse a la "compra, suscripción, tenencia, permuta y venta de toda clase de valores mobiliarios, nacionales o extranjeros, incluidas acciones, participaciones e intereses". La administradora única de la sociedad es Sarah Andic Raig, la menor de los tres hijos del fundador de Mango.
En la fecha marcada para el inicio de las operaciones de esta sociedad patrimonial faltaban tres días para el trágico accidente en Collbató que puso fin a la vida de Isak Andic. Sarah es la pequeña de los tres hijos de Andic y su primera mujer, Neus Raig. Estudió gestión de empresas de moda en el Instituto Marangoni de Londres y también pasó por la prestigiosa Parsons School of Design de Nueva York. Ni ella ni su hermana Judith forman parte de los órganos de gobierno de Mango y ambas formaban parte junto a su hermano mayor, Jonathan, y su padre como consejeras de Punta Na, la sociedad patrimonial que agrupa las inversiones inmobiliarias de la familia en España, Francia, Turquía, la República Checa y Grecia.
La repentina muerte de Andic ha abierto un escenario todavía incierto sobre la propiedad de la compañía. El fundador de la empresa tenía el 95% de las acciones, mientras que el 5% restante estaba en manos de Toni Ruiz, su hombre de confianza y consejero delegado. En las próximas semanas se leerá el testamento del empresario, que aclarará quién obtiene las acciones y, por tanto, quién controla la compañía. Fuentes oficiales de Mango consultadas por el ARA apuntan a que no hay una fecha concreta marcada para conocer cuándo se llevará a cabo este trámite ante el notario.
Las fuentes consultadas en las últimas semanas dan por hecho que Toni Ruiz continuará liderando la empresa (de hecho, ahora ha sumado temporalmente la presidencia provisional a su cargo de consejero delegado), dado que era la persona de confianza de Isak Andic a la compañía y gran responsable de haber superado la crisis de resultados que sufrió Mango a mediados de la década pasada. Donde existen más dudas es en el reparto de las acciones, del que, en última instancia, depende también la gestión de la compañía.