Elisabet Bach (Pimec): "Con la reforma, los autónomos tienen que empezar a planificar el sueldo"

Todavía no se sabe muy bien quién tendrá que pagar qué, pero sí que los autónomos tienen que agarrarse fuerte porque todo apunta que vienen curvas. Cuando menos, tienen que empezar a planificar mejor sus cuentas, mirar detalladamente cuánto ingresan y cuánto gastan y asumir (quien no lo haya hecho) que, además de la actividad que hagan, son empresarios. Estos son los consejos que Elisabet Bach, presidenta de la sección de los autónomos dentro de la patronal Pimec, da a los autónomos ante la inminente reforma de su régimen.

La reforma se situó en el centro del debate después de que se filtrara que la idea del gobierno central era que los autónomos empezaran a pagar en base a sus ingresos reales. Y que lo intentaría conseguir mediante un sistema que, a largo plazo, bajaría la cuota más baja de los 200 a los 90 euros pero subiría la más alta hasta más allá de los 1.000.

"Dada la reacción que hubo por parte de los agentes sociales, finalmente lo que se ha acabado enviando [a Bruselas] son solo aquellos puntos en los que sí había acuerdo", explica Bach en una entrevista al ARA. Esto incluye un acuerdo en la necesidad de una reforma, que tiene que ser gradual y que vaya según ingresos reales y no por cuotas mínimas, como ahora. "En esto no todos estamos de acuerdo, pero la idea del ministerio es esta", matiza esta economista.

Y aunque la propuesta de los tramos nunca haya llegado a pasar de borrador, Bach sostiene que los autónomos ya tienen deberes. Por ejemplo, dice, hay que fijarse un sueldo equiparable al que crean que ganarían si trabajaran para un tercero. "Normalmente la persona autónoma tiene ingresos, tiene gastos y lo que sobra es su sueldo. Si este sueldo no lo planifican un poco se verá aminorado", anticipa la presidenta de Pimec Autònoms. "¿Cuándo se tiene que planificar? Es lo que no sabemos", confiesa.

Lo que sí tienen claro es que el planteamiento base de esta reforma de momento ha dejado fuera reivindicaciones históricas del sector. "Pedimos no solo hablar de la reforma laboral, sino también de una reforma fiscal que nos dé capacidad de deducirnos lo mismo que puede deducirse una empresa -reclama Bach-. Puesto que me lo mides todo y me haces pagar por los ingresos reales, déjame descontar todos aquellos gastos que realmente tienen que ver con mi actividad", manifiesta.

Reivindicacions de los autónomos

Bach tampoco encuentra sentido al hecho de que cuando un autónomo o alguien dentro de una microempresa se pone enfermo se tenga que seguir pagando la cuota, o que los complejos condicionantes para pedir el paro hayan hecho que durante el 2020 solo 3 de cada 10 personas hayan tenido acceso a ello. O al hecho de que solo después de que los trabajadores asalariados hayan empezado a trabajar desde casa masivamente por culpa de la pandemia una ley (la del teletrabajo) haya reconocido que trabajar en casa conlleva gastos. "Los autónomos somos la mitad de las empresas de Catalunya y el 10% de la fuerza laboral -afirma Bach-, y no hay nadie que se preocupe de ello".

Mientras empiezan las negociaciones donde podrán dar su opinión, Bach tiene claras sus recomendaciones para los autónomos: que asuman que esta reforma se aplicará más tarde o más temprano "y que su espíritu es que haya esta obligatoriedad y que haya más contribución de las rentas más altas", avisa Bach. "Los invitaría a hacer esta planificación, a hacer los deberes y a descontar todo aquello que se pueda descontar", dice. En resumen: que si se paga al Estado en base a ingresos netos, que sean netos de verdad.