Como siempre he dicho, tener el dinero en la cuenta corriente significa perder dinero. Quizás no nos hagamos a la idea, pero los precios siempre suben, y si nuestro dinero no lo hace, en la práctica, nos estamos empobreciendo. En una situación de tipos de interés a la baja, ¿qué opciones de inversión tenemos para los próximos meses?
Recuerde que invertir no sólo significa especular, comprar acciones o invertir en bitcoin. Lo que sí es cierto es que si queremos más rentabilidad, deberemos asumir más riesgo. ¿Es necesario que lo hagamos? No siempre. productos financieros hay tantos como inversores. Repasamos los más básicos.
Empecemos por lo más seguro: un depósito bancario Suelen ser productos 100% garantizados donde no perderemos el dinero invertido y conseguiremos entre el 0,5 y el 2% de rendimiento en un año Prácticamente nos permitirá cubrir la inflación actual.
Si queremos aumentar el riesgo, necesitaremos un intermediario financiero que nos permita invertir en renta fija, es decir, en deuda de estados o de empresas. Por ejemplo, la deuda española nos paga en torno al 2,5%-2,7% a 1 o 5 años. Podemos llegar al 4% en la deuda de empresas como Amazon o Google o hasta el 10% en pymes.
En caso de querer aún mayor riesgo, podemos invertir en renta variable. Por supuesto, el riesgo es elevado y el rendimiento también puede serlo. No es lo mismo invertir en las 5 empresas más consolidadas de Europa o en empresas de países en vías de desarrollo. Por ejemplo, la bolsa española creció un 15% en el 2024. ¿Significa esto que también lo hará durante el 2025? Rotundamente, no. Podemos perder o ganar mucho.
Decidimos lo que decidimos, un consejo: diversificar. Parece imposible que España o Amazon no paguen su deuda. Ahora bien, ¿y si lo dejan de hacer? Nunca debemos fiarnos de ninguna inversión, y por eso nunca debemos poner todos los huevos en la misma cesta: se pueden romper.
