Infraestructuras

La alta velocidad conectará Barcelona y Valencia en 2027

Los empresarios se muestran escépticos con el nuevo calendario del gobierno español para el Corredor Mediterráneo

El ministro Óscar Puente durante su intervención.
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BarcelonaIr de Barcelona a Valencia en tren es mucho más complicado que ir a Madrid, aunque ambas ciudades estén separadas por menor distancia. En el mejor de los casos, el trayecto en Euromed se alarga durante tres horas y media, una hora más que para ir a Madrid. Un diseño centralista de la red ferroviaria que ha lastrado durante décadas la conexión entre la capital catalana y la valenciana y que ahora parece estar más cerca de remediarlo.

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha marcado este jueves un nuevo calendario para el Corredor Mediterráneo, una de las grandes asignaturas pendientes para potenciar la red ferroviaria estatal. Lo dijo ante 2.500 empresarios reunidos en Valencia, en un acto que organiza hace años la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) para reclamar la ejecución de esta infraestructura, y que es el último año que se celebra.

Según Puente, Barcelona y Valencia pasarán a estar conectadas por alta velocidad dentro de dos años. Este objetivo se alcanzará cuando se haya culminado el cambio de ancho de vía estándar entre Tarragona y Castellón, unos trabajos que permitirán circular en ancho internacional en el trayecto que conecta Barcelona y Valencia. Quedará pendiente el desarrollo de la doble plataforma entre Valencia y Castellón, para la que se solicitará la declaración de impacto ambiental en las próximas semanas.

Durante el 2027 el ejecutivo socialista también prevé que esté construida la infraestructura del Corredor Mediterráneo para conectar desde Almería hasta la frontera francesa. Sin embargo, el ministro no ha puesto una fecha para la construcción completa de toda la infraestructura, que nacerá en Algeciras, porque el tramo entre Granada y Almería es el que está menos desarrollado y, además, deberá resolver importantes complejidades técnicas.

Pese a los retrasos continuados, los avances en el Corredor Mediterráneo coinciden con un esfuerzo inversor que está llevando a cabo el gobierno español desde la llegada de Pedro Sánchez a la Moncloa. Desde el año 2018 se han licitado 8.327 millones de euros, de los que 5.389 millones ya se han ejecutado, con obras en marcha en todas las comunidades autónomas por donde pasa el Corredor Mediterráneo. Según el ministerio, durante este período se ha pasado de un 21% de la infraestructura en servicio a un 36%, y de un 45% a un 83% en fase de obra.

Sólo en Catalunya se han licitado nuevas obras por cerca de 917 millones de euros y se han ejecutado por 1.397 millones, con un peso muy relevante del presupuesto destinado a concluir las eternas obras de la Sagrera. Unos trabajos que están "prácticamente terminados" en cuanto a la parte ferroviaria de la futura estación, que habrá supuesto una inversión de 1.000 millones de euros.

Sin embargo, el nuevo calendario no ha acabado de convencer a los empresarios presentes en el encuentro. "Todos los ministros que han pasado por ahí han dicho que a los tres o cuatro años estaría hecho el Corredor Mediterráneo. A ver si a la última va la vencida", ha dicho el presidente de Mercadona, Juan Roig. "Habrá un día que habrá un ministro al que nos vamos a creer, pero de momento no ha llegado", ha añadido.

En una semana en la que también se han anunciado los estudios para valorar la posibilidad de conectar con alta velocidad Barcelona y Madrid en menos de dos horas, a una velocidad de 350 kilómetros por hora, Roig reivindicó que las obras del Corredor Mediterráneo vayan a "mucho más" ritmo, sin olvidarse de lamentar que la segunda y la tercera ciudades de España. "No queremos ir a 350 km/h, nosotros con pasar de los 100 km/h entre Valencia y Barcelona estaríamos contentos", criticó.

Transporte de mercancías

Más allá de poder ir de Barcelona a Valencia en menos tiempo, el Corredor también permitirá, muy importante, mover más mercancías de una punta a otra de todo el arco mediterráneo. En Catalunya el gobierno español espera que la terminal de La Langosta, a quince kilómetros de Barcelona, ​​esté terminada en el primer trimestre de 2026, y que el acceso a la Seat esté operativo en el segundo trimestre de 2027. "Los avances son tangibles", ha dicho el ministro.

Los accesos al puerto de Barcelona es otra de las grandes asignaturas pendientes, en marcha desde hace unos años, pero sin conseguir que avancen al ritmo previsto. "Targaremos porque son muy complejos, pero ha llevado 20 años desbloquearlos y éste ya es un momento de optimismo", ha remarcado Puente. Asimismo, la conexión con el puerto de Tarragona se prevé que estará terminada a finales de 2026.

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