Muere el empresario catalán de la construcción Julio Sorigué a los 92 años

BarcelonaEl empresario catalán de la construcción Julio Sorigué ha fallecido este martes a los 92 años, según ha confirmado la compañía en un comunicado. Su despedida tendrá lugar este jueves, 14 de agosto, a las 11 h en la Catedral Nueva de Lleida.

Nacido en Cervera en 1933, Sorigué empezó a trabajar en este sector en 1954 en Binéfar (Huesca), donde se dedicó a la producción de áridos y al tratamiento de asfaltos, y fundó la empresa que lleva su apellido en 1968 en Lleida. Sin embargo, el gran salto del negocio llegó en el 2005, cuando la compañía compró Acsa, la antigua división de construcción de Agbar, y se transformó en el grupo Sorigué. En 2011 Julio Sorigué dio el relevo generacional a su sobrina Ana Vallés, que asumió su presidencia. Él se mantuvo en el cargo de presidente honorífico.

Más allá de su trayectoria empresarial, Sorigué también fue reconocido por su labor como mecenas. En 1985 creó junto a su mujer, Josefina Blasco, la Fundación Sorigué, que impulsa actividades culturales, educativas y sociales desde Lleida y gestiona un centro ocupacional para personas con discapacidad intelectual. Además, cuenta con una colección de arte contemporáneo, considerada hoy una de las más importantes de España, donde existen obras de artistas de prestigio internacional como Anselm Kiefer, William Kentridge, Bill Violes, Juan Muñoz, Chuck Close, Anish Kapoor y Antonio López. La fundación tiene como misión acercar el arte a todos los públicos, por lo que también organiza exposiciones temporales y mantiene una política activa de préstamos y colaboraciones con otras instituciones.

Julio Sorigué recibió varios galardones a lo largo de su vida como la Medalla al Trabajo Francesc Macià, que le concedió la Generalitat. El Gobierno también le reconoció con la Cruz de Sant Jordi en 2013. Además, la Diputación de Lleida le condecoró con el premio Especial Prestigi por sus 60 años de trayectoria en el sector y la Medalla de Oro de la ciudad de Lleida en reconocimiento a su actividad empresarial.

De las obras a las energías renovables

"La muerte de Julio Sorigué supone un momento de gran dolor, ya no sólo en el ámbito personal sino por la pérdida de un gran empresario que, como muchas personas, he admirado profundamente", ha lamentado Ana Vallés, sobrina del empresario y actual presidenta del grupo. "Su trayectoria profesional supone un referente para nuestro grupo y su legado perdurará en nuestra compañía a través del compromiso de todo nuestro equipo por continuar con la misión que él inició. Continuaremos trabajando con la misma dedicación y pasión que nos inspiró, asegurándonos que Sorigué siga siendo un referente de liderazgo y compromiso".

El grupo Sorigué cerró el 2024 con una facturación de 784 millones de euros y un ebitda (resultado de explotación) de 31 millones de euros. Con los años, la empresa ha ido diversificando su negocio hacia otros sectores, además de la construcción, como la gestión de infraestructuras hidráulicas o la generación de energías renovables, sobre todo a través de la explotación de parques fotovoltaicos.