Díaz sella un acuerdo con los sindicatos para reducir su jornada laboral a 37,5 horas
El pacto con CCOO y UGT, y sin la firma de la patronal, prevé el mantenimiento de los salarios
MadridYolanda Díaz no verá cómo la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas comienza a desplegarse este 2024, tal y como acordaron PSOE y Sumar, pero sí acaba el año cerrando un acuerdo con los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, para implementarla este 2025. El ministerio de Trabajo y los dos sindicatos sellan este viernes por la mañana el texto que recoge una de las medidas estrellas de la cartera que pilota Díaz, pero también de la actual legislatura del gobierno español. En cambio, quien no va a salir a la foto es la patronal CEOE. Los empresarios llevan semanas descartando sumarse a la propuesta, al menos en los términos en los que se estaba negociando, y de hecho mantienen el pulso con Díaz. Las patronales catalanas, por ejemplo, han aprovechado la tradicional copa de cava de Navidad para volver a reiterar su rechazo a aplicar de forma universal una jornada laboral que suponga pasar de las 40 horas semanales a las 37,5.
A través de la red social X, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo concretó que el pacto con CCOO y UGT prevé el establecimiento de las 37,5 horas a la semana "sin reducción salarial". "Hoy somos un país más justo, más democrático y más feliz", afirmó Díaz. Se calcula que la medida afectará a 12 millones de asalariados.
La reducción de la jornada laboral es un compromiso incluido en el acuerdo entre el PSOE y Sumar, aunque ha suscitado diferencias en los plazos de aplicación entre los socios del gobierno de coalición, especialmente entre el ministerio de Trabajo y el de Economía, en manos de los socialistas y comandado por Carlos Cuerpo. De hecho, habrá que ver cómo quedará finalmente el texto, que no se prevé que llegue al consejo de ministros hasta enero. Sin embargo, la intención de Díaz es acelerar su tramitación parlamentaria para que la reducción se aplique a todos los trabajadores a 31 de diciembre de 2025, un horizonte que Economía apuesta por flexibilizar.
Aparte de los peros de los de Pedro Sánchez, del acuerdo no formarán parte ni la CEOE ni Cepyme, que han rechazado la medida alegando que no incrementará la productividad, como defiende Díaz, y que supone una "intromisión" en la negociación colectiva de empresarios y sindicatos. La reforma prevista, que también incluirá el derecho a la desconexión digital de los trabajadores y la mejora del horario del registro, deberá ser validada por el Congreso, con la duda de que realizarán formaciones como Junts o el PNV (en el País Vasco, la reducción de la jornada laboral ya se aplica). No se puede olvidar que los lobis de empresarios que rechazan la medida llevan tiempo presionando a los dos partidos. Fuentes consultadas por el ARA apuntan a que, por ahora, los juntarías estarían lejos de secundarla.