Periscopio global

El multimillonario que creó las Smartbox: es de extrema derecha y ha desheredado a sus hijos

El francés Pierre-Édouard Stérin, conservador, libertario y católico, ha creado su fortuna con las cajas regalo

Pierre-Edouard Stérin en 2018
21/03/2025
4 min
Regala este articulo

ParísCuando tenía 28 años tuvo que vivir de nuevo con sus padres. Todos los proyectos empresariales que había impulsado habían fracasado y carecía de dinero para pagar el alquiler. "Fueron tiempos difíciles", reconoce. Dos décadas después, Pierre-Édouard Stérin es una de las grandes fortunas de Francia y vive con una única obsesión: "Salvar a Francia". Esta expresión significa, para él, conseguir que la extrema derecha llegue al poder.

¿Cómo un joven sin suerte como emprendedor acaba convertido en un empresario con éxito que dedica su fortuna a promover las ideas más conservadoras? Lo que cambió la vida en Stérin son las Smartbox, las cajas con buenos regalo que se han popularizado en todas partes. Él es su fundador.

La idea no fue suya exactamente. Una pequeña empresa belga había empezado a comercializar, a escala pequeña, sólo en Amberes, unas tarjetas regalo que podían utilizarse en diferentes lugares de ocio. Un amigo de Stérin las vio y le habló. Pocos días después el francés tomó un tren hacia Bélgica para proponer al propietario de la empresa asociarse con él para desarrollar el mismo concepto en Francia.

Proyectos fracasados

Entonces Stérin aún vivía con sus padres y no tenía trabajo ni dinero. Anteriormente, había impulsado primero una empresa de distribución de videojuegos que funcionó muy bien hasta que llegó internet a los hogares, y después una veintena de proyectos que no habían tenido éxito, desde una carta de fidelidad que agrupara a diferentes marcas hasta el reciclaje de porexpán y cuadernos con espiral para poder sacar las hojas y sustituirlas. Más tarde había buscado trabajo en el sector bancario para poder tener un sueldo, pero nadie le contrató.

Pese a los fracasos acumulados, no tiró la toalla. Y apostó por importar a Francia la idea de las tarjetas regalo, convirtiéndolas en las cajas para regalar experiencias. Según explicaba él mismo en una entrevista en la revista económica Entreprender, sus padres le dejaron 5.000 euros para crear la empresa en Francia con el nombre de Weekendesk. Corría el 2003 y tenía 29 años.

En poco tiempo las cajas de buenos regalo vivieron un auténtico boom en el país galo. En 2007 el empresario decide comprar a su socio belga la compañía gracias al crédito de 60 millones de euros de dos fondos de inversión y expandir las cajas regalo a otros países. La empresa cambia de nombre y nace Smartbox. La compañía se extiende a distintos países, entre ellos España, y sus productos se venden en casi todos los supermercados y grandes superficies y crece a un ritmo acelerado. Stérin se hace rico.

"Las cajas regalo gustan sobre todo porque quien la recibe tiene siempre la impresión de que tiene un valor superior al precio pagado por quien la ha comprado", explicaba el empresario. Parte de los beneficios de la compañía provienen de las cajas regalo vendidas pero no utilizadas, entre el 5% y el 10%, según el diario económico Las Echos.

De The Fork a un fondo de inversión

Actualmente forman parte del grupo Smartbox la mayoría de las marcas de cajas regalo, como La Vida es Bella, Bongo, Cadeaubox, Dakotabox y Buyagift. La excepción es la también francesa Wonderbox, la principal rival de Smartbox. La fortuna de Pierre-Édouard Stérin, presidente y principal accionista del grupo, se estima en 1.400 millones de euros. El millonario también ha firmado otras operaciones exitosas al margen de las cajas regalo. En 2008 compró La Fourchette (The Fork) cuando la empresa de reservas de restaurantes estaba a punto de quebrar y la reflotó antes de revenderla en 2014 en Tripadvisor. En 2009 creó el fondo de inversión Otium Capital, a través del cual invierte en otros proyectos empresariales.

Detrás del éxito de Smartbox se esconde un hombre fervientemente católico y conservador. "Mi única ambición en la vida es convertirme en santo", ha dicho en más de una ocasión. Se autoproclama "libertario" porque no cree en el estado ni en sus instituciones. También se califica a sí mismo como "patriota", aunque hace años que trasladó la sede social de la empresa a Irlanda y su residencia familiar en Bélgica para escapar de la presión fiscal francesa.

Los hijos, desheredados

Stérin, de 51 años, tiene cinco hijos de entre 5 y 19 años que no heredarán su fortuna. En el 2021 anunció que no quería transferirles ni un euro para que se espabilaran como él tuvo que hacerlo cuando era joven. "No quiero arruinar a mis hijos, no quiero darles un céntimo. Es una libertad real empezar sin nada en la vida. No heredarán nada", declaraba al semanario económico Challenges. "Si tienen grandes dificultades les ayudaremos", puntualizaba. El millonario aseguraba que una parte de su fortuna irá a parar "a los más desfavorecidos, a las personas mayores que están solas ya las personas con discapacidad".

Lo que no explicó en aquella entrevista eran sus planes para invertir una parte de su dinero en crear internados católicos, en proyectos inmobiliarios dedicados a familias católicas y, sobre todo, en movilizar el voto de la derecha y la extrema derecha. Stérin, a quien en Francia comparan a Vincent Bolloré –magnado de extrema derecha propietario de un imperio mediático que incluye los canales de televisión Canal+ y CNews, la radio Europe 1 y Le Journal du Dimanche, entre otros–, lleva tiempo intentando comprar algún gran medio de comunicación. Por ahora no ha salido adelante y sólo financia medios digitales como Factuel, ligado a la extrema derecha.

Su gran proyecto político es unir a la derecha y la extrema derecha para que gobiernen en Francia. Ha creado el proyecto bautizado como Pericles a través del cual invertirá 150 millones de euros en los próximos años. El primer objetivo es que en las próximas elecciones municipales, en 2026, el Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen gane en 300 municipios. El segundo es que en las elecciones presidenciales del 2027 gane una figura conservadora, de la derecha o de la extrema derecha, "para salvar a Francia".

stats