Conversación con...

Dr. Ramon Grimalt: "La mayor parte de la cosmética es tirar los cuartos"

Hijo de dermatólogo y gran amante de la divulgación científica, se ha hecho popular por los vídeos en Instagram

3 min
El doctor Grimalt tiene la consulta en Terrassa y en Instagram.

BarcelonaEl doctor Ramon Grimalt (Terrassa, 1965) se ha convertido en el mayor influencer catalán de la dermatología. "Cada día gastamos mucha saliva explicando, una a una, cosas que debería saber todo el mundo: que el champú para la calvicie no vale, que a los mayores no se ponga maquillaje..." Por eso decidió resolver las principales dudas en Instagram, donde cuenta con más de 80.000 seguidores. Todo lo que necesitas saber y nunca te va a solucionar el doctor Google. "La mayor parte de la cosmética es tirar los cuartos, pero la cosmética en la adolescencia duele", sentencia.

En su cruzada para desmentir falsos mitos, el sol es la estrella de esta época del año. "No debes protegerte del sol con crema, eso es como si quisieras adelgazarte con sacarina cuando lo que tienes que hacer es comer bien", dice. Por tanto, sombrero? "Sé coherente. Si no quieres que te dé el sol, tápate". ¿Es posible estar moreno y protegido? "No. Tienes que elegir. Si para ti tu aspecto es lo suficientemente importante, no gastes dinero en cremas y decide a qué hora saldrás a pasear al perro, dónde vas de vacaciones, qué silla coges en una terraza..." Pero la gente sigue llenando la playa cada mediodía, lamenta: "No hay ninguna crema antiarrugas que sea efectiva. Lo único que evita el envejecimiento de la piel es la prevención solar. El punto clave es que no hemos conseguido que nos vemos bien estando blancos".

Que la exposición solar acabe siendo fatal depende mucho de la genética cutánea, me cuenta. "Si tienes el fototipo adecuado para vivir en el Mediterráneo, puedes tener alguna mancha o arruga de más, pero los disparates solares probablemente no les pagaremos caros. Lo que es blanquete, rubio, de ojos claros... éste lame. El país del mundo con mayor cáncer de piel es Australia, pero no tienen los aborígenes, solo tienen los hijos de los irlandeses y escoceses que fueron deportados allí", ejemplifica. El problema del sol es el mismo del alcohol: no cuenta la quemadura (la borrachera) sino la radiación sumada a lo largo de los años. Y lo cierra con otro ejemplo imbatible: "Si tú coges a la abuela y le miras el culo, con 87 años no tiene ni una mancha ni una arruga y no se ha jodido ni una crema, mientras que la cara está llena de manchas y arrugas y se ha gastado una pasta en cremas. ¿Funcionan las cremas para no envejecer? ¡No, lo que ayuda son las bragas y la falda! Ahora bien, ¿son útiles las cremas? Sí, porque nos hacen sentir bien".

Las redes están llenas de teorías acientíficas. Se le engalto la primera. ¿Las cremas solares químicas son cancerígenas? "No. Esto no se puede decir. ¿Qué ocurre? Que todas las cremas pueden actuar como disruptores endocrinos y, por tanto, una persona que pueda tener tendencia familiar al cáncer de mama, si se ha puesto muchas cremas con disruptores, esto puede favorecer o acelerar el cáncer, no de piel, sobre todo de la esfera ginecológica". Quienes por eso evitan las cremas con productos químicos, han optado por las físicas, que hacen pantalla protectora, pero un estudio reciente ha detectado que las nanopartículas de titanio también se absorben y pasan en la sangre, explica. "¿Esto quiere decir que es dañina?" No. ¿Son totalmente seguras? No. ¿Harán cáncer? Casi seguro que no. Pero fíjate: los científicos vamos encontrando año tras año que cosas que creíamos seguras no lo son, así que ponte quema sólo si estás enfermo –afirma–. No damos a nadie pastillas para estar sano, ¿verdad?"

Grimalt reparte el tiempo entre la consulta, la investigación, los congresos y las clases. Ciencia y divulgación son sus pasiones (junto con la ornitología, la fotografía y el jazz), y se nota. "No tengo secretos que los demás dermatólogos no tienen, sino que les cuento de modo que tengo ganas de agradar. En ocasiones necesito menos de 20 segundos entre que el paciente entra y ya sé lo que tiene. De hecho, sólo viendo la lista de pacientes del día por sexo y edad, podría adivinar ocho de diez, pero el paciente quiere sentirse escuchado, explorado y explicado. La parte más humana se ha perdido mucho, en la seguridad social y en las mutuas, por cuestión de tiempo. Yo les dedico rato".

stats