BarcelonaEn el 2017 Blanca y Òscar salieron con dos bicicletas a viajar por el mundo. Pedalaron hasta Atenas, donde tomaron un vuelo dirección Ciudad del Cabo. En Suráfrica empezó la segunda parte de la aventura: cruzar el continente africano en bicicleta. "Al final de este viaje hacía un año y medio que íbamos en bicicleta viviendo con lo menos imposible y yo empecé a necesitar un lugar estable que fuera un hogar, pero al mismo tiempo quería seguir viajando, y la única posibilidad que veía era camperizar una furgoneta", explica Blanca. Con Óscar tienen Vivienruta, un perfil de Instagram y un blog en el que comparten su día a día, que desde 2017 se basa en viajar por todo el mundo, haciendo una vida nómada.
Compraron una furgoneta del año 85 con la que han estado tres años viajando por toda Europa. "Empezamos otro tipo de viaje en el que teníamos comodidades como electricidad, agua y un lugar donde trabajar", expone Blanca. Después de ese tiempo, se dieron cuenta de que la furgoneta se les había quedado pequeña: "Como vivimos con un perro galgo que es mayorcito vimos que necesitábamos más espacio y el año pasado decidimos venderla y comprar un camión para ir construyendo nuestra nueva vivienda, ya que nuestro proyecto de vida es vivir viajando", afirma Òscar. Desde diciembre trabajan para camperizar el camión con la ayuda de Vancraft, una empresa de Móra la Nova especializada en la camperización de vehículos.
Blanca y Òscar camperizaron la furgoneta guiándose con el material que hay en las redes sociales. "Fue una locura. Es realmente otro viaje antes del viaje, y al final siempre acabas tardando más de lo que pensabas; hay que ser paciente", apunta Òscar. Estuvieron nueve meses trabajando todos los días en el proyecto y después de la experiencia ellos recomiendan que, siempre que se pueda, se recurra a profesionales. "Siempre va a quedar mejor, tienen los conocimientos, las herramientas adecuadas y el espacio para hacerlo", sostiene. Sin embargo, todo depende del uso que se quiera hacer y del tamaño del vehículo en cuestión: "Hay gente que viaja con una furgo que es una minicamper con un colchón y algunas cosas más, y eso sí que es más fácil hacerlo uno mismo", dice Blanca.
Éste es el caso de Lydia Pérez y su pareja. Los dos jóvenes empezaron a camperizar una furgoneta hace cuatro meses para poder viajar y realizar escapadas de vez en cuando. En su caso lo están haciendo todo ellos, guiándose por los contenidos de YouTube, Instagram, TikTok y con la ayuda de un amigo que trabaja en un taller de camperización. Sin embargo, sí recurrirán a profesionales para instalar una claraboya: "Preferimos hacerlo en un taller especializado porque hay que hacer un agujero en el techo y debe quedar todo bien conectado para evitar fugas de agua de lluvia", subraya Pérez.
¿Qué necesitarás en tu día a día?
Si sois de los que desea convertir una furgoneta en una pequeña vivienda móvil, antes de empezar es importante preguntarse qué necesitarás en tu día a día en la camper para tener claro en qué vale la pena invertir más. Según Blanca y Óscar, hay tres elementos imprescindibles que cobran mayor o menor importancia según las necesidades de cada uno: la luz, el agua y el gas. Por ejemplo, si tienes un trabajo online y durante el viaje querrás teletrabajar, necesitarás luz y una buena conexión eléctrica: "La mejor opción, y la que da más autonomía a la hora de viajar, son las placas solares con una batería para cargar el móvil y un enchufe que soporte el portátil", asegura Óscar. También se puede viajar sin placas solares, sobre todo si la idea es realizar viajes cortos o de fin de semana y no vivir en la furgoneta. En caso de querer hacer un viaje largo, conviene, según Blanca, invertir "en una mayor furgo donde poder estar de pie".
Òscar apunta que lo más importante es el agua, que acaba muy deprisa, y recomienda tener un depósito para poder ducharse y cocinar. "Alrededor de los 60 litros ya estaría bien, aunque nosotros por el camión nos estamos haciendo uno a medida que tendrá 700", subraya. Y en cuanto a la ducha, no hace falta instalarla dentro del vehículo: "Nosotros hemos comprado una ducha portátil con un depósito de 25 litros. La enganchas en el maletero, llenas el depósito y ya te puedes duchar", explica Pérez. Desde MT Campers, una empresa dedicada, entre otros, a la camperización y homologación de vehículos, recomiendan que los vehículos más grandes apuesten por un depósito "de al menos 80 litros por no ir justos, pero las más pequeñas con un de 50 o incluso de 20 ya van bien".
Camperizar un vehículo grande como un camión no es lo mismo que una furgoneta o un coche grande y no requiere los mismos conocimientos: "Para el camión hay que hacerlo todo artesanalmente, con grandes proporciones, y son necesarios muchos conocimientos y habilidades que sólo tienen los talleres profesionales", explica Òscar. En estos casos es mejor acudir a profesionales. Desde MT Campers Marc añade que los camiones son fáciles de camperizar "porque el espacio es cuadrado y no hay peligro de cortar ningún nervio, como podría ocurrir con las furgonetas por las formas que hacen".
Si se hace una camperización casera, es importante ser paciente y estar preparado para hacer frente a todos los imprevistos que puedan surgir y que alargarán el proceso. "Cuando es algo que haces tú mismo, sobre todo si es algo que nunca habías hecho, debes empezar despacio para ver, primero, si eres capaz de hacerlo, y segundo, si realmente será práctico", apunta Pérez. Por su experiencia, también recomienda escoger materiales adecuados y de calidad: "Por ejemplo, si haces un mueble para la cama, compra una madera que sea resistente y pueda aguantar peso; si no, es probable que se acabe rompiendo", afirma . El Marco de MT Campers añade que, si es un vehículo pequeño, no es necesario romperse demasiado la cabeza: "Principalmente se necesita una segunda batería para conectar la luz, la neverita y el móvil cuando el motor no esté encendido, un sofá cama o un módulo de madera para dormir y, sobre todo, el aislamiento térmico y acústico”.
¿Dónde puedo pasar la noche?
Una de las preocupaciones que pueden surgir a la hora de viajar en un vehículo camperizado es encontrar un sitio donde pasar la noche. La legislación varía según los países y, por ejemplo, en el Estado puede pernoctarse prácticamente en cualquier lugar donde no existan prohibiciones expresas. Sin embargo, la normativa prohíbe desplegar objetos fuera del vehículo, como toldos o sillas. Antes de salir de viaje, es necesario revisar la normativa de los países que se quieren visitar.
A la hora de encontrar un lugar donde pasar la noche hay aplicaciones que lo ponen fácil. La más utilizada es Park4night , que funciona especialmente bien en Europa. La app tiene un mapa en el que aparecen los diferentes lugares en los que está permitido pernoctar y permite filtrarlos según sus características: con agua potable, gratuitos, rodeados de naturaleza, pavimentados, con depósito de aguas grises, etc. Lo interesante es que hay un apartado con comentarios de las últimas personas que han estado en cada uno de los sitios. Otras alternativas son CaraMaps , que es muy similar a la anterior, y iOverlander , que además tiene información sobre la fauna salvaje de cada sitio.