Alemania prevé hacer obligatoria la vacuna contra el covid a partir de febrero

Las restricciones contra los no vacunados se amplían en todo el país

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La cancillera alemana saliente, Angela Merkel

BarcelonaAlemania ha decidido estrechar todavía más el asedio a las personas que no se han vacunado contra el covid. La canciller saliente, Angela Merkel, ha anunciado este jueves que las restricciones para limitar la vida pública a los no vacunados se ampliarán a escala nacional, mientras que ahora se aplicaban solo en algunas regiones. Además, el país avanza hacia la imposición de la vacunación obligatoria. El Bundestag (la cámara baja del Parlamento) lo debatirá las próximas semanas, con la intención de que la ley que lo permita entre en vigor en febrero , en un intento de aumentar la tasa de inmunización, estancada alrededor del 68% de la población general con la pauta completa.

Merkel ha detallado las nuevas medidas para hacer frente a la cuarta ola del covid en una rueda de prensa acompañada de su sucesor, el socialdemócrata Olaf Scholz, que tomará posesión del cargo la semana que viene y que, por lo tanto, liderará el gobierno que tendrá que gestionarlas. Los dos se han reunido con los presidentes de los estados federados, que tienen libertad de imponer restricciones todavía más estrictas que las acordadas a escala nacional.

En cuanto a la vacunación, antes de imponerla a la población general habrá que esperar también a la resolución de una comisión de ética implicada en el proceso. Scholz, que a partir del próximo miércoles encabezará el nuevo gobierno tripartito con verdes y liberales, se ha mostrado convencido de que el Parlamento llegará a la conclusión de que es conveniente hacer la vacunación obligatoria. Ha hecho un llamamiento a los alemanes a vacunarse, poniendo énfasis en las consecuencias de no hacerlo, y ha afirmado que tiene "el objetivo ambicioso" de administrar 30 millones de vacunas hasta finales de este año.

Merkel ha añadido que también se reducirá a nueve meses la validez del pasaporte covid después de recibir la segunda dosis, de forma que habrá que ponerse una inyección de refuerzo una vez pasado este tiempo para poder acceder a la mayoría de espacios públicos. Y es que entre las medidas pactadas este jueves se incluyen restricciones severas para los ciudadanos no inmunizados con la intención de que reduzcan al mínimo el contacto con personas fuera de su núcleo de convivencia.

Como norma general, al sector del ocio y la cultura se impondrá la denominada regla del 2G (por geimpft o genesen, que quiere decir vacunado o recuperado), negando el acceso, pues, a quien no esté inmunizado. Además, se podrá pedir, adicionalmente, un test negativo. En los comercios, excepto a los de primera necesidad, también regirá la norma del 2G.

Los líderes federales y regionales también han acordado que los locales de ocio nocturno tendrán que cerrar cuando el país logre una incidencia semanal acumulada de 350 nuevos casos por cada 100.000 habitantes. A partir de este valor también se reducirá el aforo de encuentros privados de inmunizados a las 50 personas en interiores y a las 200 en exteriores. A los no inmunizados se los insta a tener contacto solo con las personas con las que viven y dos más de otra burbuja de convivencia (sin contar los menores de hasta 14 años). Además, en las escuelas volverá a ser obligatorio utilizar la mascarilla.

Primeros indicios de bajada

"La situación es muy grave", ha avisado Merkel, que ha admitido que el número de infecciones se ha estabilizado los últimos días pero ha remarcado que sigue "a un nivel demasiado alto". La incidencia ha bajado este jueves por tercer día consecutivo, después de registrar récords sucesivos durante el mes de noviembre, y se ha situado a 439 nuevos contagios por cada 100.000 habitantes, mientras que hace un mes era de 154, según los últimos datos del Instituto Robert Koch, que monitoriza la evolución de la pandemia en Alemania.

Este jueves se han notificado 73.209 nuevas infecciones en 24 horas (un 3,5% menos que hace una semana) y 388 muertos (un 10,5% más). Las autoridades sanitarias temen que la cuarta oleada colapse las unidades de cuidados intensivos, como ya está pasando en los hospitales de las regiones más afectadas, que se están viendo obligadas a trasladar pacientes a otros estados federados. La Asociación de Cuidados Intensivos y Medicina de Emergencia avisó este miércoles que Alemania probablemente llegará al pico de infecciones a mediados de diciembre y que esto supone que las peores cifras en cuanto a hospitalizaciones llegarán sobre las fechas de Navidad, cuando podrían haber 6.000 camas de UCI ocupados, ante los 4.600 actuales, lo que representaría superar el máximo de enero pasado.

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