Biden anuncia que se retira de la carrera electoral
El presidente da su apoyo a Kamala Harris para que sea su sustituta en la candidatura demócrata
WashingtonAl final no ha sido necesaria la intervención divina, aunque seguramente muchos de los demócratas pensarán que les ha costado Dios y ayuda. El presidente Joe Biden ha anunciado este domingo que da un paso al lado. Tres semanas después del desastroso debate en la CNN y del goteo constante de peticiones para que el presidente renunciara a la candidatura, Biden ha cedido. El demócrata lo ha anunciado a través de un comunicado en las redes en el que ha defendido su legado y ha avisado de que se dirigirá a la nación a lo largo de esta semana.
"Deje que exprese mi profunda gratitud a todos los que han trabajado tan valiente para verme reelegido. Quiero dar las gracias a la vicepresidenta Kamala Harris por ser una extraordinaria compañera en todo este trabajo. Y deje que exprese el mi cariño a los ciudadanos estadounidenses por toda la fe y la confianza que han puesto en mí", ha escrito Biden, que continúa en aislamiento por cóvido en su casa de la playa en Delaware.
En otro tuit en la red social X, Biden ha anunciado que da su apoyo a su vicepresidenta Kamala Harris para ser su sustituta y encabezar el ticket electoral. "He decidido no aceptar la nominación y concentrar todas mis energías en mis deberes como presidente para lo que queda de mandato. Mi primera decisión como candidato en el 2020 fue elegir a Kamala Harris como mi vicepresidenta. Y ha sido la mejor decisión que he tomado. Hoy quiero ofrecer mi apoyo completo para que Kamala sea la nominada para la candidatura del partido este año", ha escrito Biden.
Donald Trump, que justo esta semana ha formalizado su candidatura a Milwaukee, ha asegurado tras conocer la renuncia de que "el corrupto Joe Biden no era apto para presentarse a presidente, y ciertamente no es apto para servir -y no lo ¡ha sido nunca!–. Sólo logró la posición de presidente a través de mentiras, noticias falsas y de no salir de su sótano". En su publicación en la red social Truth ha acusado a Biden de hacer mucho "daño en el país" y ha aprovechado también para alimentar la teoría de que las elecciones de 2020 fueron manipuladas para robarle la presidencia. Destaca que en el post no menciona a Harris, a quien sí atacó durante la Convención Republicana previendo que podría ser la sustituta de Biden.
El presidente no sólo se ha encontrado con llamadas y posicionamientos públicos de congresistas demócratas, sino que también ha tenido que lidiar con la presión de pesos pesados como Nancy Pelosi, la antigua speaker de la Cámara de Representantes, y Chuck Schumer, líder de la mayoría en el Senado. Pelosi dijo en una entrevista en la MSNBC que creía que Biden debía replantearse su decisión, mientras que en privado Schumer (que en un momento había mostrado públicamente su apoyo a Biden) dijo a los donantes que estaba abierto a un candidato alternativo a Biden.
En los últimos días el asedio demócrata se había intensificado. Mientras Trump recibía el calor de las bases y la plana mayor del partido, Biden se estaba quedando cada vez más solo mientras estaba en aislamiento por cóvido. El jueves el expresidente Barack Obama también "formalizaba" la pérdida de confianza en su antiguo vicepresidente y comentaba privadamente con otros compañeros del partido que creía que Biden ya no estaba capacitado para poder liderar la candidatura demócrata.
La editorial y los reportajes del New York Times tampoco han sido fáciles de digerir para Biden, quien en una carta a los congresistas demócratas ya señaló a la prensa como uno de los urdidores de su crisis. Uno de los últimos artículos que más ha dañado al presidente ha sido el del actor George Clooney pidiéndole que renunciara. “Es triste decirlo, pero Joe Biden con el que estuve hace tres semanas en un acto de recaudación de fondos no es Joe Biden de 2010, ni siquiera Joe Biden de 2020. Era el mismo hombre que todos presenciamos en ese momento. ¿Es justo señalar estas cosas? […] No ganaremos en noviembre con este presidente. No ganaremos la Cámara de Representantes y perderemos el Senado", escribía.
Quien se queda los delegados
La renuncia de Biden deja el partido embarrado dentro de una carrera a contrarreloj para relanzar a un nuevo candidato de cara a la Convención Demócrata de agosto. Hasta ahora, Biden era el presunto candidato, porque durante el proceso de primarias había conseguido a más de 3.800 delegados, superando el mínimo necesario de 1.986 delegados. Aunque el presidente haya decidido apoyar a Harris, la realidad es que estos 3.800 delegados han quedado libres y serán ellos los que tendrán la palabra final en Chicago. Biden no puede obligarles a votar a otra persona en concreto.
La otra opción, que defiende a Pelosi entre sus compañeros de partido, es que, en lugar de hacer que el partido cierre filas en torno a Harris, hacer que se celebre un proceso abierto de nominación. Pelosi lo defiende como una forma más democrática de conseguir el candidato y también de movilizar a los votantes demócratas. Pero para que se produjera un proceso abierto sería necesario que alguien le disputara la sucesión a Harris. Nombres posibles en la lista no faltan. Entre los posibles rivales de la vicepresidenta se encuentran el gobernador de California, Gavin Newson, el gobernador de Pensilvania, Josh Saphiro, y la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer.
La última vez que los demócratas vivieron un proceso de nominación presidencial abierto fue en 1968, cuando Lyndon Johnson decidió renunciar poco antes de las elecciones debido a la impopularidad que tenía por la guerra de Vietnam. Tras las batallas internas por hacerse con la nominación, Hubert Humphrey, el vicepresidente de Johnson, fue quien ganó, aunque después perdió contra el republicano Richard Nixon.
Desde el debate la CNN contra Trump que las opciones de los demócratas para seguir en la Casa Blanca se han hundido. El margen porcentual que separaba a Biden de Trump se ha ido haciendo mayor y el trabajo será doble: recuperar la posición perdida en las encuestas y acabar superando a Trump. Todo esto es lo que ahora deben intentar hacer los demócratas en apenas cuatro meses.
- 20-01-2021<p>Dieciocho días después de que Donald Trump animara a sus seguidores a asaltar el Capitolio, Joe Biden se convertía en la persona mayor que ha jurado el cargo de presidente de Estados Unidos. Biden cogía las riendas de un país inmerso en la pandemia y con la tensión social y política disparada por la negativa de Trump a reconocer su derrota electoral.</p>
- 31-08-2021<p>Joe Biden completó la retirada de los soldados estadounidenses desplegados en Afganistán. Era una promesa electoral de Donald Trump que Biden decidió salir adelante. Se llevó a cabo de forma caótica, con varios fallecidos los días antes de que saliera el último avión hacia Estados Unidos. Los índices de aprobación del presidente cayeron en picado y ya no remontaron.</p>
- 08-11-2022<p>2022 fue un año marcado por la guerra en Ucrania. Estados Unidos sufrió una inflación que alcanzó en junio el 9,1%, la más alta en 40 años. En noviembre, en las elecciones de medio mandato, los demócratas salvaron a su mayoría en el Senado, pero perdieron la de la Cámara de Representantes. Esta división ha marcado el resto de la legislatura de Biden.</p>
- 08-01-2023<p>El 8 de enero de 2023, el presidente visitaba la frontera con México tras endurecer la política migratoria de Estados Unidos. En un principio, intentó detener las deportaciones en caliente que se habían llevado a cabo durante la presidencia de Donald Trump, pero a raíz del número récord de migrantes que atravesaban la frontera decidió endurecer las leyes migratorias.</p>
- 07-10-2023<p>Los últimos meses de la presidencia de Biden también han estado condicionados por la guerra entre Israel y Gaza. El apoyo inequívoco del presidente a Israel fue debilitándose a medida que se multiplicaban las pruebas de que Israel vulneraba el derecho internacional. En las últimas semanas había impulsado un plan de paz de tres fases con el apoyo de la comunidad internacional.</p>
- 27-06-2024<p>La imagen de Joe Biden ya no se recuperó después del debate en la CNN con Donald Trump. El magnate, acostumbrado a los platós de televisión, arrinconó totalmente al presidente. Desde entonces, las voces de demócratas que le pedían que diera un paso al lado se han ido multiplicando, y en la última semana se han añadido pesos pesados como Nancy Pelosi y Barack Obama. Desde Delaware, donde se recupera de la cóvida que marcó el inicio de su presidencia, Biden ha renunciado a la reelección.</p>