La Corona británica tuvo beneficios de 1.340 millones en el último balance anual
El rey Carlos III y el príncipe Guillermo recibirán, además de 153 millones de subvención anual, otros 53 millones provenientes de otros arrendamientos privados
LondresA diferencia de la de la familia real española, que ha cerrado el 2024 en números rojos, la salud financiera de los royal británicos está mejor que nunca, que es lo mismo que decir como casi siempre. Así se desprende del informe anual de las cuentas del Crown Estate, el brazo financiero de la monarquía, que se ha hecho público este martes. El beneficio neto anual cerrado en marzo de 2025 ha sido de 1.340 millones de euros, similar al año anterior.
La casa de los Windsor recibe el 12% de los beneficios del patrimonio de la Corona (Crown Estate) para financiar su funcionamiento, lo que se llama Sovereign Grant. Este conjunto de propiedades y tierras incluye grandes extensiones urbanas (parte de West End de Londres), tierras agrícolas, bosques, costas y fondos marinos del Reino Unido. Su valor total supera los 16.000 millones de libras y cubre más de 7.000 propiedades. Los beneficios que genera se transfieren íntegramente al Tesoro británico.
Los beneficios del Crown Estate se han duplicado con creces desde hace dos años, en buena parte por el enorme crecimiento de la industria eólica y renovable. El patrimonio de la Corona, como propietaria legal de los fondos marinos en torno a Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte, es responsable de subastar esta propiedad para la instalación de parques para la producción de la energía eólica marina.
En virtud de dicho porcentaje, para el período 2025-2026 y 2026-2027 Carlos III recibirá 153 millones de euros, una parte de los cuales (106 millones para ambos períodos) servirán para terminar los trabajos de renovación del Palacio de Buckingham. De los ingresos recibidos en los tres años anteriores de fondos públicos, 60 millones de euros sirvieron para sufragar los costes del día a día y otros 40,3 millones se destinaron a cubrir las obras del palacio. Hubo además partidas especiales para el entierro de la reina Isabel II (2022) y la ceremonia de coronación de 2023.
Además del porcentaje sobre los beneficios del Crown Estate, el rey y su heredero recibirán también en los próximos dos años al menos 27 y 26 millones de euros, respectivamente, procedentes del ducado tradicional de Lancaster y del ducado de Cornualles. Ambos ducados son dos propiedades históricas (duchias) que generan ingresos privados estrictamente para la familia real británica. Aunque son propiedades de la Corona, no forman parte del Crown Estate, y sus beneficios no se transfieren al Tesoro público sino que van directamente a los bolsillos de Carlos III y de Guillermo.
Los millones que ingresan el jefe de la monarquía y su heredero a través de estas dos arcaicas instituciones han sido muy criticados recientemente, a raíz de una investigación de The Sunday Times.El diario informaba a finales del año pasado que tanto Carlos III como el príncipe Guillermo han obtenido en los últimos años muchos beneficios arrendando tierras reales a organismos públicos como el NHS (el Sistema Nacional de Salud), el ejército y el ministerio de Justicia. del NHS por el alquiler de un almacén para ambulancias; 43 millones de libras por arrendar la prisión de Dartmoor en el ministerio de Justicia; de escuelas públicas. El príncipe Guillermo ha visto rebajados ligeramente sus ingresos provenientes del ducado de Cornualles porque bajó algunos de los alquileres por las críticas que le supuso la investigación de The Times.
Ejercicio publicitario y de transparencia
Desde 1993, el anuncio de los números de la monarquía británica es un momento publicitario que intenta ofrecer una imagen de transparencia y, también, de austeridad de la casa real. nueve vagones, algunos de los cuales datan de los años ochenta, ha sido un emblema de la monarquía británica desde que la reina Victoria lo utilizó por primera vez, en 1842. En el último año sólo dos rutas hechas con este medio tuvieron un coste de casi 90.000 euros en cambio en el viaje oficial de nueve días. 30.000 euros.
La visita del rey Carlos III a Australia y Samoa para la cumbre de la Commonwealth costó al gobierno británico unos 472.600 euros, aunque tradicionalmente este tipo de gastos son asumidos por el país anfitriono. de 1,89 millones de euros, incluyendo 141 vuelos que costaron 560.800 euros. Los vuelos chárter ascendieron a 706.700 euros, los comerciales a 148.500 euros y los billetes de tren convencionales a unos 105.600 euros Buckingham, con un gasto de unos 2,17 millones de euros este año, y un total acumulado de 2,6 millones. energéticas también han crecido. El coste de la electricidad se ha triplicado desde el 2021: de 944.000 a 3,07 millones de euros. se han disparado: los salarios ascienden a 35,3 millones de euros, dos más que el año pasado, y más de 7 millones desde que Carlos accedió al trono. Los gastos en limpieza y celebraciones también han aumentado de 4,95 a 5,55 millones de euros. del 14%. La brecha salarial de género es del 2,2%, muy inferior a la media estatal.