Las elecciones que han puesto fin al cordón sanitario en la extrema derecha en Francia

ParísAl día siguiente del anuncio de la convocatoria avanzada de elecciones legislativas, Éric Ciotti, líder del partido de Los Republicanos (LR) –la derecha conservadora tradicional, formación del expresidente Nicolas Sarkozy–, sorprendía a todos, incluso los miembros de su formación, anunciando que quería una alianza electoral con la extrema derecha de Marine Le Pen, Reagrupamiento Nacional (RN). La decisión fue criticada de inmediato por buena parte del partido, y especialmente por la cúpula y por losvarones. Pero Ciotti no se echó atrás. El resultado ha sido una grave crisis de la formación conservadora, que llegó a expulsar a Ciotti del partido, algo que ahora está en manos de la justicia.

Mientras el grueso del partido ha dicho no a un pacto electoral con Le Pen, Ciotti y sus fieles han salido adelante y en las elecciones legislativas de este domingo han presentado candidatos propios, sin la marca de Els Republicans, en 62 circunscripciones en alianza con la RN. Por su parte, el partido ha presentado a sus candidatos a la mayoría de circunscripciones. El paso de Ciotti supone una ruptura traumática con el partido conservador, pero sobre todo es una ruptura del cordón sanitario que hasta ahora se había mantenido en Francia.

Coincidiendo con el auge de Le Pen de los últimos años, el cordón era cada vez más débil, pero hasta ahora se mantenía el pacto no escrito de todas las formaciones, a excepción de los demás partidos de ultraderecha, de no pactar nunca con el RN. Ciotti ha roto el tabú.

La extrema derecha de Le Pen tiene más de 50 años de historia, pero hasta ahora sólo ha logrado llegar a los ayuntamientos. Nunca ha gobernado ni en la Asamblea ni en el Elíseo, y en parte es gracias a los llamamientos que suelen hacer los líderes de los demás partidos a votar a cualquier candidato que no sea de extrema derecha. Jean-Marie Le Pen, padre del actual líder del partido, llegó a la segunda vuelta de las presidenciales en 2002 con Jacques Chirac, y Marine Le Pen también ha llegado en dos ocasiones, 2017 y 2022, siempre con el presidente Macron como rival.

Una de las claves de estas elecciones legislativas será la actitud de Macron después de la primera vuelta. ¿Hará un llamamiento a votar a los candidatos del Nuevo Frente Popular (NFP), la alianza de los partidos de izquierdas, en esas circunscripciones donde la segunda vuelta se juegue entre un candidato de Le Pen y un candidato del NFP? Es una de las grandes incógnitas.