El sueño ahogado de la chica del hockey
Shahida Raza, jugadora de la selección paquistaní, iba en la patera que se hundió en Italia
BarcelonaShahida Raza, una jugadora de la selección femenina de hockey del Pakistán, tenía 27 años y un sueño: encontrar tratamiento médico para su hijo, que cuando era un bebé sufrió una lesión neurológica que le dejó medio cuerpo paralizado. Según ha explicado su hermana Saadia a la BBC, ayudar a su niño de 3 años es lo que la empujó a subirse a una patera con unas 200 personas más para atravesar medio Mediterráneo desde Turquía hasta Italia. Ella viajó sola y planeaba llevar legalmente al niño a Europa una vez ella hubiera podido obtener los papeles. Después de tres o cuatro días de un viaje extenuante, casi lo habían conseguido. Pero, en pleno temporal, el domingo el motor de la precaria embarcación se incendió, la barcaza se partió y el domingo su cuerpo apareció en una playa de Calabria, al sur de Italia. Es uno de los 68 cadáveres que las autoridades italianas han podido recuperar. Ha habido 80 supervivientes que consiguieron llegar a la playa. Al resto se los ha tragado el mar.
La jugadora llamó a su hermana desde la patera. “Estaba muy contenta: decía que casi habían llegado y que no se creía que por fin pronto podría llevar al niño para que lo curaran”, recuerda. La familia no ha recibido todavía ninguna noticia de las autoridades y se enteró del naufragio a través de las redes sociales. Ahora solo pueden pedir la repatriación del cadáver. “No queremos nada más, de nadie”, sentencia la hermana, todavía en estado de shock. Asegura que la deportista tenía miedo al mar.
Raza jugaba también a fútbol para el Balochistan United –donde se la conocía con el apodo de Chintoo– y, aunque era internacional, no pudo encontrar un trabajo con un salario suficiente para pagar el tratamiento médico de su hijo.
La recordaba ayer Hajra Khan, jugadora de la selección femenina de fútbol de Pakistán: “Otra compañera de equipo ha muerto. Shahdida-Chintoo era muy lista y explosiva dentro y fuera del campo. Gracias por haber hecho la asistencia de mi primer gol internacional. Me gustaría que mi país respetara a sus deportistas, ¡a su gente! Descansa en paz eterna, hermana”.
Varias voces han recordado en Pakistán a la chica, incluyendo a Aurat March, una conocida activista feminista, y la federación de hockey de Pakistán, con quien ella había jugado seis partidos como internacional en 2013.
Demasiadas preguntas sin respuesta
A medida que pasan los días los relatos de los supervivientes y de los organismos oficiales van encajando para entender cómo se produjo el desastre. La barcaza la localizó por primera vez un avión operado por Frontex, la agencia europea de vigilancia fronteriza, a 75 kilómetros de la costa de Calabria.
Frontex ha asegurado que la embarcación navegaba sin mostrar señales de peligro, pero que alertaron a las autoridades porque las cámaras térmicas indicaban que podía haber gente bajo la cubierta. La Guardia di Finanza, que se ocupa de la vigilancia de las costas, envió a dos patrulleras a la zona, pero volvieron a puerto debido a las malas condiciones climatológicas.
El desastre ha puesto en el foco la batalla que la primera ministra italiana, la ultraderechista Giorgia Meloni, libra contra el rescate de migrantes en el Mediterráneo. Bajo las nuevas leyes, barcos como el Open Arms pierden días viajando hasta puertos lejanos, un tiempo que no pueden dedicar a salvar vidas.
