Cuando el franquismo hacía "urbanismo táctico" en el Portal de l'Àngel
BarcelonaEste año 2023 ha cumplido 50 años de las primeras intervenciones para sacar los coches del Portal de l'Àngel de Barcelona. La idea del alcalde franquista de la época, Enric Masó, era hacer la ciudad más "humana" (¿les suena?) inspirándose en los modelos de Munich y Essen, y la táctica que utilizó para convencer a los vecinos fue muy similar a la de Ada Colau con las supermanzanas. Empezó con "urbanismo táctico", es decir, colocando unos grandes parterres con jardineras para delimitar la zona peatonal con la promesa de que era sólo una prueba piloto para Navidad y que, si no funcionaba, se retirarían y los coches volverían a ocupar ese espacio. Sin embargo, los vecinos y comerciantes fruncieron el ceño y protestaron porque estaban convencidos de que si los coches no podían aparcar frente a sus tiendas nadie iría a comprar. El presidente de la Agrupación de Comerciantes y Vecinos de la calle Boqueria y adyacentes, Juan Frías, envió una carta a La Vanguardia, que se publicó el 14 de diciembre de 1973, donde se denunciaba que "son muchos los intereses que se lesionan con un cierre tan hermético; intereses que son todos de ciudadanos y contribuyentes, que no deben ser castigados por el hecho de vivir o comerciar en esa zona".
Los argumentos de Frías resultan calcados de los que utiliza el lobi Barcelona Oberta contra el eje verde de Consell de Cent: "Parece que la administración debería haber consultado a los organismos ciudadanos y vecinos para conocer los inconvenientes de todo tipo que una medida tan importante podría comportar, algo que no ha hecho. Y esto ha provocado una ola de descontento e irritación entre los afectados". 50 años después la película se repite punto por punto. Pero los coches nunca volvieron al Portal de l'Àngel.