"Lo está haciendo muy bien": Buenafuente protagoniza la fiesta de los suscriptores del ARA
La comunidad del ARA se cita para el encuentro de verano en la Antigua Fábrica Damm
BarcelonaDesde su aparición, el ARA nació con la idea de comunidad bien arraigada en sus valores. Esto se nota desde la redacción a pie de calle hasta las múltiples actividades que se hacen para conectar con todos los que comparten la mirada en el país, en el periodismo y en el mundo que propone el diario. ya a los quince años. La Antigua Fábrica Damm ha sido el escenario este miércoles de un acto que ha combinado periodismo, humor, historias y, sobre todo, conexión entre los que escriben y los que leen.
poética, sino racional. En el ARA creemos que las noticias pueden ser gratis, pero el periodismo debe pagarse, así que nos sentimos al deber con nuestros suscriptores, que nos hacen mantener la exigencia y también la alegría de hacer un diario con el que queremos ser útiles". Son 40.000 personas que tienen confianza en el diario y lo convierten.
La parte central del encuentro consistía en una entrevista al humorista Andreu Buenafuente, realizada por Albert Om. La charla forma parte de su sección "La última de Albert Om" y se podrá leer completa este domingo, cuando se hará la última entrega de la temporada antes de la pausa de verano. Los asistentes pudieron compartir la conversación, que trató temas diversos, desde Lamine Yamal –con el deseo de que no se nos estropee o estremece– al reenamoramiento que el cómic ha oído con Barcelona desde su vuelta a Catalunya, hace tres años.
El oficio manda y la entrevista tenía varios excursos en los que mutaba hacia el monólogo, estableciendo complicidades con los lectores, que fueron salpicando de carcajadas una conversación que fue a la vez emotiva y desgarradora. Uno de los momentos más divertidos fue cuando Buenafuente detalló algunos de los choques más inusuales que ha tenido con gente que le ha reconocido, como el que le exigió: "Cuéntale un chiste al perro".
Con todo, el invitado se sentía honrado de haber formado "parte de la historia de la gente" y de ejercer en Madrid como "el catalán", si bien, según admitía, a menudo no encaja "en el patrón de lo que creen que es un catalán". Las entrevistas de Albert Om siempre terminan cediendo las bandas últimas palabras del fundador de los hoteles Hilton ("La cortina de la bañera va por dentro de la bañera"), también quiso felicitar al diario. "Es un proyecto chulo. Lo está haciendo muy bien y sois parte del paisaje periodístico. El panorama es complicado, así que no es fácil encontrar una cabecera de prestigio y de calidad", dijo.
Una vez terminada la entrevista, los cerca de 200 asistentes al encuentro subieron a la terraza para disfrutar de los aperitivos ofrecidos por Patates Piqué y de la cerveza Damm, en el marco notable de la centenaria fábrica y sus espacios emblemáticos como la sala de cocción, o cerca de los tradicionales tanques de fermentación. Ha sido el momento en que algunos de los suscriptores han podido saludar a los autores del ARA, como el matrimonio que le ha recordado a Antoni Bassas que ya habían podido hablar con él, treinta años atrás, en la inauguración ya lejana de Port Aventura.
También había reencuentros entre suscriptores, como dos personas del ámbito de la traducción que recientemente habían coincidido en un encuentro de bailes occitanos y ahora lo hacían aquí como seguidores del ARA. O Mercè, una maestra jubilada que, acompañada de Montse, también docente, explicaba a la directora cómo está dedicando estos años a hacer de voluntaria para promover la formación en teatro de sus colegas en activo. Según se lamentaba, los Centros de Recursos Pedagógicos del departamento de Educación pueden subvencionar pocos cursillos, por lo que materias como el teatro, pese a su profunda aportación, acaban cayendo al fondo de la lista de prioridades. He aquí, pues, un tema periodístico a desarrollar.