La HBO quita la máscara a Kevin Spacey
Este martes la plataforma HBO Max estrena Spacey unmasked, un documental de dos capítulos que recoge el testimonio de diez víctimas de los abusos sexuales de Kevin Spacey. El verano del año pasado, el actor protagonista de House of cards o American beauty fue declarado inocente de nueve delitos sexuales contra cuatro hombres. Desde el año 2017, cuando empezaron a surgir las primeras denuncias en su contra, se recogieron las alegaciones de más de treinta personas que le acusaban de conducta sexual inapropiada. Este fin de semana la cadena británica Channel 4 ha estrenado el documental, y ahora lo estrena la plataforma HBO. Los protagonistas son diez hombres que en algún momento a lo largo de cinco décadas sufrieron sus abusos. Nueve de ellos es la primera vez que hablan frente a las cámaras. El documental arranca con el primer testigo, un actor secundario de House of cards que interpretaba el papel de guardaespaldas del presidente Frank Underwood. El documental incluye algunas de las escenas de la serie para que entendamos la proximidad entre ambos. A lo largo de los dos capítulos, el documental aportará otros dos testigos que corroborarán el ambiente de tensión que se vivía en aquella serie, en la que varias personas del equipo estaban al caso de la conducta de Spacey pero nadie hacía nada.
Otro personaje clave en Spacey unmasked es el hermano mayor de Kevin Spacey. Sorprende por su frialdad. En ningún caso pretende defender a su hermano, sino que más bien aporta información familiar que contribuye a señalarle aún más, incluso justificarle. El documental va encadenando los relatos de las víctimas y, con cada uno de ellos, va ofreciendo el contexto profesional y la dimensión pública del actor en ese momento para que el espectador pueda percibir el nivel de autoridad y poder del que gozaba. Siempre se intentan recoger imágenes y pruebas que demuestren el vínculo entre víctima y agresor. Sin que sea necesario subrayarlo, el documental pone en evidencia el patrón de conducta de un predador sexual. Muchas de las historias de sus víctimas, aunque hayan ocurrido con décadas de diferencia, cuentan situaciones muy similares. Spacey utilizaba a menudo su fama, sus contactos profesionales y promesas de trabajo para captar el interés de sus víctimas.
Lo único que hace diferente esta historia de abusos es que, por una vez, no son mujeres las que denuncian la violencia sexual, especialmente en el ámbito de la industria cinematográfica y teatral. Las víctimas son varones. Pero el relato es idéntico. Hombres que, al sufrir los abusos, tienen la misma reacción que explican tantas y tantas mujeres cuando han pasado por lo mismo: el miedo, la incapacidad de reaccionar, acceder a algunas peticiones, mantener en secreto su drama y temer por su trayectoria profesional si hablaban.
Quizás las sentencias judiciales han sido favorables al actor, pero Spacey unmasked parece un acto de venganza de las víctimas para demostrar que allá donde no ha podido llegar la justicia llega el periodismo.
