La serie más caliente y adictiva del momento se llama 'Rivals' (y está en Disney+)
Protagonizada por David Tennant, explica la rivalidades dentro de una cadena de televisión británica durante los años 80
Hombreras, canciones de Roxy Music, Julio Iglesias y Meat Loaf y una serie de personajes con dinero que van más encendidos que una teia. La última sensación televisiva llegada del Reino Unido es Rivales, serie de Disney+ que explica las rivalidades que se cuecen en el mundo televisivo de los años 80. David Tennant interpreta a Lord Tony Baddingham, propietario de una cadena de televisión privada que ficha al periodista irlandés Declan O'Hara (Aidan Turner), proveniente de la BBC, por ser la imagen de su canal. El tercer hombre en discordia es el archienemigo de Baddingham, Rupert Campbell-Black (Alex Hassell), ex jinete olímpico, noble y seductor profesional.
La primera escena de Rivales marca el tono de la serie. Durante un vuelo del Concorde, el hedonista Campbell-Black disfruta de una intensa sesión de sexo en el lavabo del avión mientras de fondo suena Addicted to love, de Robert Palmer. Cuando el protagonista vuelve al asiento, el espectador descubre que en la fila de al lado está Baddingham, con quien se hace la puñeta intercambiándose reproches e insultos sin levantar nunca la voz más de la cuenta. En Rivales, que puede recordar seriales de lujo como Dinastía y Dallas, hay toneladas de sexo, muchas enemistades y paisajes de ensueño, porque todos los personajes viven en los Cotswolds, una zona de campo cerca de Londres conocida por sus casas señoriales y pueblos bucólicos.
En un momento en que el sexo es cada vez más difícil de ver en la ficción televisiva, con contadas excepciones como Los Bridgerton, esta serie inglesa va en dirección inversa. Uno de los motivos es que la ficción se basa en una de las novelas románticas de Jilly Cooper, popular por sus historias sobre los líos de faldas de las clases altas inglesas. Rivales, publicada en 1988, es el segundo volumen de la serie conocida como Ruthsire Chronicles, formada por once títulos. Muchos de los personajes son recurrentes, pero hay uno que sobresale, Campbell-Black, que Cooper escribió inspirándose en varias personas reales, una de ellas el exmarido de la actual reina Camila, Andrew Parker- Bowles.
Dos coordinadores de intimidad
Rivales está ambientada en los años 80 y muchas de las actitudes que aparecen en la serie no pasan el filtro post-Me Too (por ejemplo, una de las relaciones principales es la tensión sexual no resuelta entre Campbell-Black y la hija de Declan O'Hara , veinte años más joven). No puede ser de otra forma, porque la serie también es el reflejo de una época marcada por el machismo. Pero, fuera de la ficción, la producción quiso asegurarse que todas las personas implicadas en escenas sexuales –que son la mayoría del reparto– se sintieran cómodas y seguras. En este sentido, durante el rodaje hubo dos coordinadores de intimidad, unas figuras cada vez más imprescindibles en las producciones audiovisuales.
"Tuvimos conversaciones muy abiertas a todos los niveles para saber con qué cosas nos sentíamos cómodas, porque las escenas de sexo siempre son algo bastante raro. Siendo consciente de que debería hacer muchas, tomé la decisión de estar lo más relajado posible y asegurarme de que todo el mundo estuviera cómodo y que todos conociéramos los límites de los demás. en Campbell-Black.
El compañero de reparto de Hassell, David Tennant, también ha señalado las bondades de tener coordinadores de intimidad en el sed de rodaje: "Estas escenas nunca son cómodas, por eso es realmente importante el entorno que se crea. La llegada de los coordinadores de intimidad ha sido realmente beneficiosa para todos". "Recrear este tipo de intimidad no es algo que te emocione, pero quieres asegurarte de que en este entorno todo el mundo se sienta seguro y cuidado, y que pueda ser lo más cómodo posible", añade.
Si tradicionalmente las series de televisión y el cine han tenido tendencia a mostrar más los nudos femeninos que los masculinos, en Rivales se ha buscado la paridad, según ha explicado el showrunner Dominic Treadwell-Collins. El guionista, que trabajó durante mucho tiempo en Gente del barrio, llevaba dos décadas intentando convencer a alguna cadena inglesa para llevar a la pantalla el universo de Cooper. "Tuve reuniones con la BBC e ITV hace años cuando todavía no tenía los derechos y cuando decía «¿Le interesaría hacer algo como los libros de Jilly Cooper?» me miraban como si me hubiera echado un pedo –explica–. Hay cierto esnobismo respecto a ella. A lo largo de mi carrera he seguido mencionando a Jilly y todo el mundo se reía y me ridiculizaba".
Rivales termina con un cliffhanger potente, una pista que la serie podría tener una segunda temporada, aunque Disney+ aún no lo ha confirmado. En Reino Unido la serie está en boca de todos (en Londres se anuncia en todas partes, incluidas las grandes pantallas de Piccadilly Circus) y en el resto de mercados empieza a coger impulso. "Debes vivir en una cueva si no te has cruzado con Rivales. Todo el mundo habla. Nunca he visto nada igual. Pero está en la plataforma desde hace poco más de una semana, así que dénos una oportunidad y pronto podremos ofrecerle más noticias. Basta decir que nos encanta la serie", ha señalado el vicepresidente de contenidos originales en Europa de Disney+, Liam Keelan, en una entrevista en The Times.