Los actores del nuevo 'Harry Potter': ¿cómo se graba una serie con niños?

BarcelonaUna de las series más esperadas de los próximos años es la adaptación que HBO Max está preparando de Harry Potter, que recuperará, catorce años después, a los personajes de la saga de libros de JK Rowling. Para hacer realidad la nueva serie, que se estrenará en el 2027, se han tenido que buscar nuevos actores para interpretar a personajes tan queridos como Harry Potter, Hermione Granger y Ron Weasley. Este martes la plataforma anunciaba el inicio del rodaje de la serie y mostraba una primera imagen del mago con la cicatriz del rayo en la frente.

Dominic McLaughlin será el nuevo Harry Potter, mientras que Arabella Stanton hará de Hermione Granger y Alastair Stout, de Ron Weasley. Ninguno de los tres actores tiene más de doce años, por lo que el rodaje representa un reto para los intérpretes y el equipo de producción. Cuando Daniel Radcliffe rodó la primera entrega de Harry Potter tenía once años.

Sobre cómo se gestiona el rodaje de una producción televisiva de este nivel con niños, Reichel Delgado, directora de casting y coach, explica que en proyectos que tienen continuidad o son largos, es fácil que un cambio de voz o aspecto físico de los actores pueda romper la continuidad de los personajes. En estos casos, se intenta que los rodajes con niños sean cortos, o bien realizar ajustes de guión, pregrabar escenas o hacer doblajes posteriores. "Es importante que el menor entienda que no deja de servir por actuar, sino que está pasando por un proceso natural de crecimiento. Si no se trabaja en esta gestión emocional, los cambios pueden afectar a la autoestima del niño", explica Delgado.

Es recomendable que los menores tengan un apoyo psicológico durante el rodaje para "ayudarles a entender qué significa formar parte de un proyecto que será público", explica esta directora de casting. coach por gestionar la fama, las críticas y la presión externa. Además del factor psicológico, rodar con niños también implica que deben tenerse en cuenta una serie de permisos legales: autorizaciones de los padres o tutores legales, de la escuela y del territorio donde se rueda. Los niños también tienen una normativa específica en cuanto a horarios y descansos y deben estar acompañados por un adulto responsable, que puede ser un tutor legal o un coach de menores.

Aunque los protagonistas de la nueva serie de Harry Potter ya han pasado la edad más complicada para rodar que, según Delgado, es hasta los seis o siete años, todavía son niños y seguro que estarán expuestos a un gran nivel de fama: la continuación de una saga como ésta no pasará desapercibida.