Suspenden el juicio por abusos sexuales en 'Gran Hermano' por los problemas psiquiátricos de la denunciante
Carlota Prado no ha podido comparecer y la juez ha solicitado un informe psicológico
BarcelonaUna juez de Madrid ha suspendido el juicio contra José María López Pérez, acusado de haber cometido abusos sexuales durante su participación en el reality Gran Hermano Revolution, después de que la denunciante no haya comparecido en el juzgado alegando "problemas psiquiátricos graves". Carlota Prado no se ha presentado a la vista oral y la juez ha pedido que un médico forense haga un informe psiquiátrico que acredite cuál es el estado de la denunciante y si está en condiciones de declarar.
El abogado de la joven ha explicado que Prado ingresó de manera voluntaria en un hospital psiquiátrico en diciembre pero que hasta ayer creían que podría comparecer en la vista oral. De hecho, el letrado ha explicado que esperaban que llegara ayer a Madrid para declarar hoy pero que finalmente no fue así. Asegura que en la conversación telefónica que han mantenido la chica decía "incoherencias". Aseguran que la salud mental de Prado ha empeorado mucho desde 2017, cuando se habría producido el abuso. "Tenía antecedentes de algún problema psiquiátrico, y el programa lo tendría que haber sabido", ha remarcado.
Los representantes de José María Pérez López se han mostrado en contra de la decisión de la juez alegando que existe una contradicción entre lo que dicen los abogados de Prado, que aseguran que está "inhabilitada", y su actividad en las redes sociales. La juez, sin embargo, se ha reafirmado y ha dicho que el juicio se tiene que celebrar con la presencia de la víctima, motivo por el cual ha reclamado pruebas documentales que acrediten cuál es su estado.
El abogado de Carlota Prado quiere que haya un cambio de instrucción en el caso y que pase a ser juzgado como un abuso sexual con penetración y no sin penetración, como se juzgará. A la salida del juzgado, el letrado ha remarcado que "hay indicios serios, por imágenes grabadas, de que hay penetración". Si se hiciera este cambio de instrucción, la pena para el acusado podría ser de entre cuatro y diez años de prisión, en vez de los dos años y medio que pide ahora la Fiscalía.
En cuanto a los daños morales y la petición de una reparación económica, la Fiscalía solicita 6.000 euros de indemnización y una cantidad idéntica a pagar por parte de la productora del programa por los daños ocasionados a raíz de la exhibición a la perjudicada de las imágenes grabadas. Los escritos de la acusación particular elevaban la cantidad a 133.333 euros.
El presunto caso de abuso se habría producido el 14 de noviembre de 2017, cuando Carlota Prado y José María López eran los dos concursantes de Gran Hermano Revolution. Los hechos habrían tenido lugar después de que la productora organizara una fiesta en la casa de Guadalix de Sierra donde se rodaba el programa y en la que los concursantes consumieron alcohol. Hacia la 1.30 h, Prado, que iba bebida, se retiró a la habitación. López (que anteriormente había mantenido relaciones consentidas con ella dentro de la casa) la acompañó, se tumbó con ella en la cama y, después de taparse con un edredón, la habría penetrado sin su consentimiento. Posteriormente, la productora del programa, Zeppelin TV, habría intentado ocultar la agresión.