Las lluvias remontan los embalses hasta el 50%
El sistema Ter-Llobregat ha triplicado sus reservas respecto a hace un año


BarcelonaYa es una realidad: los embalses de las cuencas internas han alcanzado el 50% de su capacidad. Una cifra que llevaba casi tres años sin alcanzarse –concretamente 987 días– y que marca, sin lugar a dudas, un punto de inflexión en la lucha contra la sequía. Las lluvias de las últimas horas y días han dado un nuevo impulso a unas reservas que no han parado de crecer desde que empezó marzo y ven el vaso medio lleno al acumular un ascenso continuado de cerca de 18 puntos y 345 hectómetros cúbicos (hm³) almacenados. Una gran noticia cuando apenas comienza la primavera oficial, que todas las previsiones a largo plazo apuntan a que será lluviosa.
Los embalses que han liderado este último crecimiento han sido sobre todo los de Baells, Sau y Darnius-Boadella, ya que sus cabeceras han sido especialmente beneficiadas por el último temporal de levante. Unas lluvias que en 48 horas dejaron registros de entre 40 y 70 l/m² en esta zona noreste del país. Incluso en el área del Montseny se han superado localmente los 100 l/m2. Como el terreno está bien empapado después de tantas precipitaciones, el agua caída ha llegado con mayor facilidad a unos ríos y rieras que han aumentado considerablemente su caudal.
Dando un vistazo a cómo está cada embalse, destaca el de la Baells, uno de los mayores de las cuencas internas y que ya roza el 83% de su capacidad. Un nivel impensable hace apenas un año, cuando se registró el mínimo histórico de esa sequía. También ha subido y mucho el pantano de Sau, que en pocas semanas ha pasado del 7% al casi 43%. El agua vuelve a rodear después de bastante tiempo toda la iglesia de Sant Romà de Sau, el icono referente por excelencia del estado de la sequía en nuestro país. Una imagen vale por mil palabras, y esa mujer fe del buen momento en que nos encontramos. Como Sau recauda toda el agua del Ter, el pantano de Susqueda no sufre grandes cambios y se mantiene en el 42%. El conjunto del sistema Ter-Llobregat más que triplica las reservas de hace un año.
Destaca también el caso de Darnius-Boadella, que ha pasado del 17% de principios de marzo al 45% actual. Un espectacular ascenso que ha permitido que los municipios que estaban hasta ahora en emergencia por sequía hayan podido salir recientemente de esta fase. La Llosa del Cavall también está al 45% y Foix sigue lleno del todo. Por lo que se refiere a los embalses de las cuencas internas del sur del país, la situación todavía no es tan buena, aunque también han subido claramente. Riudecanyes supera ya el 37% –lo que ha permitido a los municipios que abastece a salir de la emergencia– y Siurana el 16%. En cambio, los embalses catalanes de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) siguen jugando en otra liga y se encuentran ya en el 74%.
¿La sequía se está acabando?
Este mes de marzo ha resultado muy lluvioso y acumula ya más de 200 l/m² en las principales cabeceras de las cuencas internas, pero hay puntos del país donde las cifras son aún más espectaculares. Unos datos que dejan muy tocada esta larga e histórica sequía que ya llevamos más de tres años arrastrando. Pero aún no ha terminado, al menos en lo que respecta a las reservas.
Apenas hemos alcanzado el 50%, y para ir bien deberíamos plantarnos en junio con el 75% para afrontar el verano con garantías. Ahora bien, los ríos siguen bajando con alegría y aportando agua a unos embalses que mantienen el crecimiento, y las previsiones apuntan a que la lluvia nos seguirá visitando a lo largo de esta primavera. Además, en las cotas más altas del Pirineo todavía hay más de un metro de nieve, una gran reserva de agua de cara al deshielo.