El análisis de Antoni Bassas: 'La decepcionante comparecencia de la consejera de Economía'

De un gobierno nuevo se esperan nuevas políticas, un nuevo tono y nuevos mensajes. Del gobierno de Salvador Illa podemos esperar aún más, porque los socialistas han estado 14 años en la oposición. En este tiempo hemos visto marcharse del partido figuras del maragallismo y el municipalismo y hemos visto la llegada de una nueva generación de dirigentes. Es un PSC nuevo y, sin embargo, su discurso es viejo, definitivamente viejo.

Les digo esto a propósito de la comparecencia ayerde la consejera de Economía y Finanzas Alícia Romero. Fue al Parlamento a explicar en comisión las líneas maestras de su departamento. Ahora mismo, los dos problemas más importantes que tiene sobre la mesa son dos: pactar los presupuestos para el próximo año y cerrar un acuerdo para el nuevo sistema de financiación de Catalunya. Y por enfado de Esquerra, Romero anunció que priorizaba negociar los presupuestos en el sistema de financiación. Ciertamente, calendario en mano, los presupuestos son urgentes, pero si éste es el argumento vamos bien, porque en política, como en la vida, siempre hay algo urgente que no te deja hacer algo importante. Y aquí lo importante, lo único importante de su departamento, por lo que puede pasar a la historia bien o mal, es la nueva financiación. Empezar diciendo que primero presupuestos, como si no pudiera haber dos equipos negociadores, es mostrar un entusiasmo relativo, un entusiasmo concordante con los mensajes de ayer. El mensaje de la consellera fue "Catalunya debe volver a liderar las grandes transformaciones de España". ¿Cuántas décadas hace que oigamos este mensaje? Si era el programa de la Liga Regionalista hace un siglo. Si esto lo decía Pujol, si era el programa del catalanismo político. Modernizar España desde Catalunya, como si saliéramos del franquismo, como si España, actualmente miembro de la UE y de la OTAN, necesitara algo más de Catalunya que pago puntualmente de sus impuestos.

Pero insistiendo en esa idea, la consejera Romero fue más lejos:

“A mí lo que me gustaría, y lo que gustaría en este gobierno, es que ese liderazgo que hizo Cataluña en los años 2007 y 2008 para conseguir ese sistema de financiación también lo hiciera este 2024. Cataluña debe volver a liderar las grandes transformaciones, en Cataluña y en España. Y una de ellas es el sistema de financiación”.

Si Catalunya debe volver a tener el liderazgo de 2007 y 2008, vamos servidos. Aquello fue un calvario. Pregunten al entonces conseller de Economia, Antoni Castells, o al propio president Montilla cómo era ir a negociar una mejora de la financiación con Zapatero y con Solbes, los cuatro socialistas. Era cuando el PP salió a la calle a recoger tres millones de firmas contra el Estatut del 2006. No, por favor, el liderazgo del 2007 y el 2008, no.

Por si fuera poco, también salió la frase “Cuando a Catalunya le va bien, a España le va bien”. ¿Qué es irle bien a Cataluña? ¿Aumentar el PIB y volver a pasarlo en Madrid para que se beneficie España y seguir soportando un muy insolidario déficit fiscal? ¿Y cree de verdad la consejera que Cataluña juega en las mismas condiciones de Madrid? ¿Ha oído hablar de la España radial? ¿Ha visto que el Corredor Mediterráneo todavía está por terminar? Hombre, han pasado cerca de 40 años y demasiada agua bajo los puentes de las relaciones Cataluña-España. ¿Cómo puede vender el Govern esta historia y con una sonrisa? El PSC ha estado 14 años en la oposición y ha tenido 14 años para preparar una propuesta alternativa de encaje. Se han quedado en el autonomismo más ortodoxo, porque la propuesta de financiación no es ni de ellos, es de Esquerra.

Y entonces viene el remate final. Ayer, mientras Romero estaba en el Parlament hablando de esta financiación singular, Pedro Sánchez estaba en el Congreso. ¿Financiación singular para Cataluña?

“Nuestro modelo de financiación autonómica es el mismo en todos los territorios. Es blindar los pilares del estado del bienestar que están en manos de las comunidades autónomas, dadas las particularidades de cada uno de estos territorios”.

"Nuestro modelo de financiación autonómica es el mismo en todos los territorios". Pues le pueden llamar de muchas maneras, pero si es lo mismo en todas partes, singular no es. La consellera tiene razón en algo: el reto de que Catalunya recaude, gestione, liquide (y espero que decida y disponga) los impuestos es gigantesco. Por eso hace falta un entusiasmo que ayer no vimos.

Buenos días.