“Sin lista cívica, el independentismo se quedará en casa y gobernará Illa o votará a Orriols”

BarcelonaLa propuesta del ANC de impulsar una lista cívica sigue levantando pasiones muy divergentes entre sus socios, como se ha visto este jueves en uno de los pocos debates con un ponente en favor de la lista cívica y otro en contra. Aunque el coloquio era organizado por la territorial de Sants-Montjuïc, la única que públicamente se ha mostrado a favor de presentar batalla en el Parlament, Juan Carlos Manzanero, ex secretario y portavoz del colectivo crítico Indesinenter, no ha jugado fuera de casa como temía. Numerosos asistentes han mostrado sus dudas en presentar lista.

Joan Mollà, defensor del sí, ha recordado que más de 700.000 votantes independentistas que votaron el 21 de diciembre de 2017 se quedaron en casa el 14 de febrero de 2021 para defender la necesidad de presentar una alternativa. "Es una hemorragia que debe cortarse. Sin la lista cívica, el independentismo se quedará en casa y gobernará la Isla o votará otras listas como Orriols que no nos acaban de satisfacer", señaló. El santsense ha subrayado que conseguir varios diputados "puede remover las aguas estancadas del Parlament".

Manzanero, que ha avisado de que habrá un cuarto, un quinto y un sexto espacio independentista haga lo que haga la ANC, ha rebajado las expectativas: "Solidaridad con Laporta como cabeza de lista logró 100.000 votos y sólo cuatro diputados cuya financiación arruinó a López Tena". El exsecretario ha acusado precisamente a Solidaridad, en la que milita Uriel Bertran, de estar detrás de la iniciativa: "El partido mayoritario en el secretariado es Solidaritat, que acaba de presentar la ILP para levantar la DUI, y que ya ha dicho que no se presentará y que da todo el apoyo a la lista cívica".

Mollà ha replicado que la entidad "siempre ha sido colonizada por los partidos" y ha recordado que Carme Forcadell ha terminado en ERC y Jordi Sánchez, en Junts.De hecho, ha lamentado que la candidatura de Junts pel Sí, que recibió el apoyo de la Asamblea, no acumuló las críticas que recibe ahora la lista cívica."Los partidos tienen miedo", ha concluido.El miedo de los críticos, en cambio, es la pérdida de la transversalidad de la entidad: "La lista cívica puede arrastrar a la desaparición de la Asamblea porque ya está tocada de muerte", ha señalado Manzanero, quien ha recordado que de los 2.000 autocares de la Diada del 2015 este año sólo vinieron 150 y que el número de socios no deja de bajar.

Los partidarios de dar el salto al Parlamento sostienen que es la parálisis del Proceso la que está acabando con "Asamblea. "Los partidos nos han desmovilizado y la Asamblea ya no puede actuar de palo de pajar cuando la paja está esparcida", espetó Mollà, que defendió la lista cívica como "desarrollador" después de seis años vegetando. "¿Y habrá miles de personas fuera del Parlament cuando reclamen la DUI?", le preguntó Manzanero ante la incomodidad del auditorio.