Mediodías muy cálidos a la espera de otro cambio de tiempo poco lucido

BarcelonaEmpezamos otra semana sin demasiadas perspectivas de lluvia. Entre el miércoles y el jueves llegará un cambio de tiempo que sí activará nevadas en el Pirineo y algunos chubascos entre el Empordà y la Garrotxa, pero en conjunto la sequía seguirá agravándose. Diciembre no es habitualmente un mes de mucha lluvia. 2 en la Ametlla de Mar o hasta los 22,1 en Constantí y en el aeropuerto de Reus. Temperaturas de principios de noviembre, 5 grados superiores a lo que tocaría para la época.

Este lunes la temperatura seguirá subiendo, sobre todo en algunas comarcas de Girona donde las máximas subirán entre 2 y 5 grados más que este fin de semana.

Mientras en la costa, en el prelitoral y en las cotas altas del Pirineo la temperatura será muy alta para la época, en hondonadas interiores los bancos de niebla mantendrán el termómetro un poco más a raya, o incluso lo harán bajar.

Sin embargo, la niebla que en los últimos años es cada vez menos protagonista, sobre todo en otoño, durará pocos días. El cambio de tiempo del miércoles removerá de nuevo la atmósfera y desvanecerá la mala visibilidad.

En general, en este inicio de semana el sol predominará, con algunas pinceladas de nubes delgadas y bancos de niebla matinales en hondonadas de Ponent, de la meseta central y de la Cataluña Central.

El próximo cambio de tiempo hay que esperarlo entre el miércoles y el jueves. Las previsiones en cuanto a nuevas precipitaciones a largo plazo no son nada estimulantes, pero el giro de guión que llegará a mediados de la próxima semana puede dejar una nevada destacable en el Pirineo occidental. Es posible que también en puntos del Empordà y la Garrotxa pueda llegar a llover con un poco de ganas, pero lejos de estos sectores del extremo norte de Catalunya es poco probable que llueva dignamente.

Este cambio de tiempo abrirá de nuevo la puerta al ambiente normal de principio de invierno. La temperatura hará una bajada notable a partir del miércoles y, durante la segunda parte de la próxima semana, el ambiente volverá a ser más de invierno que de otoño.

Es incierto si estas temperaturas más normales se alargarán demasiado. La previsión a largo plazo es todavía poco clara, pero se puede decir que con algunas subidas y bajadas del termómetro lo más probable es que hasta Navidad el ambiente sea relativamente normal para la época. No parece que las altas temperaturas de los próximos tres días deban ser una tónica de la parte central del mes de diciembre.

Las previsiones por semanas que elabora el Centro Europeo de Predicción dibujan un escenario en el que la próxima semana será muy cálida por ser diciembre, sin embargo, la semana previa a Navidad apunta a temperaturas mucho más normales o incluso algo bajas. Habrá que seguirlo.

Más allá del cambio de tiempo del miércoles y el jueves, no hay muchas más perspectivas de lluvia a largo plazo. Parece difícil que antes de Navidad haya otro cambio de tiempo destacable, en estos momentos los mapas de probabilidad de que llegue a llover con algo de ganas a largo plazo son un desierto.