“Siete años sin una 'final four' es demasiado tiempo”

BarcelonaEl Barça busca este martes (21 h, DAZN) una victoria contra el Zenit que le permita volver a disputar, siete años después, una final four de la Euroliga. La última vez que el equipo azulgrana llegó a las semifinales del torneo Xavi Pascual, ahora rival en el banquillo del conjunto ruso, era el entrenador. Era en 2014 y Joan Carles Navarro y Àlex Abrines fueron dos de los jugadores que no pudieron evitar en Milán una dolorosa derrota contra el Real Madrid. “Fue una de las derrotas más duras de mi carrera. Fue inexplicable”, asegura Navarro, que desde hace unas semanas es el mánager general de la sección de baloncesto azulgrana. El ex jugador quiere empezar su etapa en los despachos con buen pie. “¿Siete años sin final four? Es demasiado tiempo. Un club como el Barça siempre tiene que ganar cosas. Llevamos varias Copas del Rey, pero la Euroliga es un objetivo clave y esto pasa por estar en la final four. Uno de los objetivos para el Barça es ganar un título grande como es la Euroliga”, argumenta.

“No empezamos bien en los play-off en casa. Jugamos contra un equipo que está muy bien, muy bien entrenado. Creo que nos confiamos en el primer partido”, analiza Navarro, que durante dos años ha liderado el baloncesto formativo. El triunfo de Joan Laporta en las elecciones potenció su figura dentro del organigrama. “Tengo mucha ilusión. Ahora es un momento complicado de la temporada, en el que se decide todo, y nos hemos querido mantener un poco al margen. Muy contento de estar aquí, el equipo me conoce, y creo que he sido bien recibido. Ahora estamos trabajando por el equipo", añade.

“La nueva junta y el presidente confiaron en mí para liderar este proyecto. A mi lado tendré a Mario del Campo, que será mi adjunto, y también a Mario Bruno Fernández, que será el director deportivo que estará con el primer equipo. Son gente de baloncesto. Del Campo estará conmigo en todo tipo de negociaciones y hablando con la junta directiva. Fernández ha estado conmigo en el baloncesto base y es gente de la casa. Es muy trabajador y hemos hecho un buen trabajo en la base desde hace dos años. Con ilusión y sentido común lo haremos muy bien”, opina Navarro, que está muy contento de tener a Pau Gasol en el equipo. El pívot está teniendo más protagonismo en la Liga Endesa que en la Euroliga. “Es difícil para Pau, después de dos sin jugar, rendir al máximo. Pero no solo es en la pista, también fuera. Es lo que aporta a los jugadores en cada entrenamiento, y ahora está cogiendo el ritmo, fuerza, y cada día piensa menos en el pie y nos ayudará muchísimo”, explica.

Navarro, a quien Josep Maria Bartomeu prometió una estatua, se retiró en verano del 2018. “Son casi tres años. Al principio me costó el hecho de dejar de jugar, por las rutinas, y ahora es la hora de estar aquí, después de unos años, más en pista, con los compañeros, en contacto con el primer equipo, que hacía tiempo que no lo hacía”, dice.

Abrines, el otro superviviente

El otro superviviente de la final four del 2014 es Àlex Abrines, que no está consiguiendo jugar a su nivel habitual contra el Zenit de San Petersburgo. “El viernes las cosas no salieron bien. Ellos jugaron como si fuera el último partido de su vida y nosotros no fuimos capaces de igualar su esfuerzo y su intensidad. Desde el primer momento se vio que íbamos un paso por detrás”, asegura el jugador mallorquín. El partido decisivo se disputará sin público. “Es una putada, pero tenemos que tener confianza. Nos hemos ganado el derecho de jugar en casa y tendremos que hacer mejor las cosas para volver a una final four”, dice el tirador, que considera el ritmo como uno de los aspectos clave de esta eliminatoria.