Patronal, pérfida; clase trabajadora, pura
El ministerio de Yolanda Díaz, ante la posibilidad de que la reforma laboral "para reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales" no se aprobara en el Congreso, ha decidido aplazar su debate parlamentario para tener tiempo de negociar con Junts.
Es por eso que los líderes de los dos principales sindicatos españoles han pedido a los "trabajadores" (sea cual sea este concepto) que sean "beligerantes". El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha dicho que "sólo desde la movilización, sólo desde la exigencia, se ganan derechos". Para Junts ha habido esta frase: "¿A qué perfil de empresa y en qué perfil de patronal representan? ¿A la patronal que sigue callada ante los disturbios racistas, ante la violencia racista y ante la violencia xenófoba que hemos visto en Torre Pacheco?"
Traslado enseguida esta consigna a mi amiga de la patronal, la peluquera Mercè, propietaria del establecimiento Fashion Mercè, en San Kevin de Vallfosca (Comarca del Baix Opencor). Estará encantada de quedarse media hora más barriendo los viernes, si la oficial beligerante se le va media hora antes porque lo dice la nueva ley. Pero lo hará a gusto por purgar la culpa de seguir callada con lo de Torre Pacheco. Todo el mundo sabe que "la patronal" (entre ellos, Mercè, de Fashion Mercè, o Elon, de Tesla) es mala y pérfida. Mercè cada noche, mientras acaricia un gatito, se ríe como una bruja, mientras se mira los vídeos escalofriantes de Torre Pacheco y sonríe con una alegría de no decir. Y todo el mundo sabe, también, que "los trabajadores" somos todos honrados y puros. Por eso no dudo que después de salir a la calle para pedir esta reducción salvadora (yo, en mi caso, me pediré la reducción de jornada a mí misma, a ver qué me digo) aprovecharemos el empuje para decir algo de Torre Pacheco. Si no lo hemos hecho hasta ahora, es porque no hemos tenido tiempo.