La reválida de los nuevos índices de progreso social
En medio del debate, bastante intenso, sobre la propuesta de la consellera Mas de un modelo de financiación singular, y de las entrevistas, los debates, las mesas redondas, las demás ideas que circulan y se publican para mejorar las cartas de negociación política y las reacciones radicalmente contrarias de todos los miembros del Consejo de Política Fiscal y Financiera(CPFF), empezando por la ministra de Hacienda y vicepresidenta del gobierno del Estado, espero que aporte alguna luz la actualización de los datos del índice de progreso social (IPS). Éste ha sido calculado para todas las unidades subestatales de la Unión Europea (NUTS-2, equivalentes a las CA españolas).
Efectivamente, desde finales de mayo de este año están disponibles los nuevos IPS para el período 2021-2022. Ciertamente, sufren de la interferencia de la pandemia, que puede alterar bastantes resultados, pero también es verdad que la calidad del progreso social se puso muy a prueba durante los cierres. Se derrumbó el PIB per cápita pero no en la misma medida el ingreso per cápita y mucho menos el ingreso disponible per cápita y la provisión de bienes y servicios públicos.
Desde diversos medios, estudios y manifiestos se ha insistido en lo reveladora de la verdadera situación de infrafinanciación pública de Cataluña era la posición relativa del IPS catalán respecto al de otras comunidades autónomas españolas. Con los datos disponibles del IPS de 2020 (representativo de 2017-2018), Catalunya era la docena, exactamente igual que lo era para la disponibilidad de recursos públicos per cápita, y aunque fuera la cuarta en PIB per cápita y la quinta en capacidad fiscal per cápita. Elinput de recursos públicos explicaba los resultados medidos en progreso social. Algunos economistas, muy bien calificados, pero quizá demasiado sesgados políticamente, aprovechaban para decir que el duodécimo puesto en IPS demostraba lo mal que la Generalitat administraba Cataluña, pero un análisis más detallado de lo que se medía en el IPS y de la sospechosa coincidencia del mismo sitio en la clasificación por recursos públicos per cápita han disuelto, quiero pensar, las reservas que se habían formulado a la gestión de la Generalitat comparada con la de otras CCAA.
Cuatro años antes la situación era prácticamente idéntica. El IPS publicado en 2016, con datos de 2012-2013, en plena crisis económica, dejaba a Cataluña en la misma duodécima posición y los recursos públicos disponibles per cápita eran también los doceavos (ejaequo con Madrid). No ajusto en ningún caso por la paridad de poder adquisitivo, que derrumbaría a Catalunya y Madrid algunas posiciones más abajo, hasta el fondo de la mesa, entonces como ahora.
¿Qué pasa con el IPS de 2024 para Cataluña? Sube a la décima posición. Una mejora de dos posiciones. ¿Qué ocurre con los recursos públicos disponibles per cápita? Que siguen siendo, con los datos de la última liquidación del modelo de financiación (2021), los doceavas sobre diecisiete CA. Quizás sí que la buena gestión realizada entre 2017-2018 y 2021 ha permitido una mejora del impacto del gasto público sobre el IPS.
El ranking actual del IPS es éste (de mayor a menor): 1) País Vasco, 2) La Rioja, 3) Galicia, 4) Navarra, 5) Aragón, 6) Asturias, 7) Cantabria, 8 ) Comunidad Valenciana, 9) Madrid, 10) Cataluña, 11) Castilla y León, 12) Islas Baleares, 13) Canarias, 14) Murcia, 15) Castilla La Mancha, 16) Extremadura y 17) Andalucía.
¿Qué ha cambiado más del primer IPS en este último, ocho años posterior? Madrid ha bajado del primero al noveno puesto; Castilla y León del quinto al undécimo; las Islas Baleares del duodécimo al decimosexto, y, en sentido contrario, La Rioja ha subido del octavo al segundo y Galicia del décimo al tercero. Todos los demás cambios, que hay bastante, son de tres o menos posiciones, arriba o abajo. Por su relevancia demográfica, cabe mencionar que Andalucía era y es la decimoséptima, que la Comunidad Valenciana era la novena y ahora es la octava, y que el País Vasco era el segundo y ahora es el primero.
¿Se ha modificado mucho la financiación (los recursos públicos disponibles)? Lo cierto es que con la poca información disponible para País Vasco y Navarra se hace difícil dar cifras, pero sus posiciones son la primera y la segunda, siempre. El resto, para las comunidades autónomas de régimen común, son muy estables y no ha habido cambios de más de dos posiciones. Llama un poco la atención que Castilla y León mejore en dos posiciones en financiación, pero empeore seis en IPS, o que Aragón empeore dos en financiación, pero mejore dos en IPS.
La riqueza informativa es inmensa, y no cabe en un artículo de opinión. Sin embargo, nos actualiza sobre afirmaciones que se hacen, ratifica las que afectan a Cataluña, muestra alguna mejora que no parece debida a la financiación y nos permite insistir, con más autoridad moral, sobre la indispensabilidad de poder disfrutar de un modelo de financiación singular, con control de los propios recursos, para Cataluña.