Aragonès defiende la mesa de diálogo y desafía a los escépticos a presentar "una alternativa"

BarcelonaUna de las claves con las que se leerá esta Diada es hacia dónde tiene que avanzar la hoja de ruta independentista. Ahora mismo el movimiento se divide entre los partidarios de dar una oportunidad a la mesa de diálogo con el Estado y los que la critican y defienden volver a la unilateralidad. Entre los primeros está el president de la Generalitat, Pere Aragonès, que este viernes ha vuelto a defender este instrumento de negociación y ha desafiado a los escépticos a decir, si no la quieren, cuál es su propuesta. "Si alguien cree que hay una vía alternativa, que lo explique y que la concrete, pero que la concrete de verdad, exactamente, y no se quede solo en palabras", ha dicho en una entrevista a Catalunya Ràdio.

Ni el conflicto abierto con el Estado por la inversión fallida al aeropuerto ha hecho menguar la apuesta del president por la mesa. Él considera que si el Govern va con la "máxima fuerza y unidad" y un apoyo institucional amplio será posible abordar una solución al conflicto político. "Si alguien cree que, ante la oportunidad que tenemos de discutir con el Estado el derecho a la autodeterminación y la amnistía, tenemos que renunciar a ello, que me diga qué hacemos, que me diga cuál es la alternativa a corto plazo", ha insistido. ERC ya hace tiempo que considera que no se dan las condiciones para retomar la vía unilateral y, a pesar de que Aragonès ha vuelto a admitir que pueda haber un "escepticismo lógico" por la vía dialogada, cree que ahora mismo es la única factible.

La situación del independentismo, sin embargo, es compleja. Enseguida ha habido las primeras respuestas de los detractores de la vía negociada. Entre las más destacadas está la de la presidenta del Parlament, Laura Borràs, que ha afirmado que la mesa de diálogo "es un eslogan que hace un año y medio que dura" y que "pedir concreciones a los otros cuando eres tan pobre en las tuyas no es aceptable". "La alternativa está: ¡unilateralidad!", ha concluido. También la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, se ha contado entre los escépticos en una entrevista con el ARA este mismo viernes: "De momento parece un diálogo de sordos, porque el gobierno catalán quiere hablar de amnistía y autodeterminación y el gobierno español no".

Al margen de la divergencia estratégica del movimiento, ahora misma la mesa no tiene ni delegación confirmada por ninguna de las dos partes –la catalana y la española– ni fecha concreta. Aragonès, sin embargo, ha confirmado que será el jueves o el próximo viernes en Barcelona y que la Generalitat concretará a sus integrantes después de la reunión del consejo ejecutivo de la semana que viene. No ha aclarado si tiene la garantía de que estará el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Si Sánchez viene, el encuentro tendrá que ser el jueves, puesto que el viernes empieza un viaje oficial.

El traspaso de los aeropuertos

Aragonès ha reiterado su disgusto por el desenlace que ha tenido la reforma de El Prat y ha vuelto a reclamar el traspaso del aeropuerto de Barcelona, además de los de Girona y Reus. Entre los detalles nuevos que ha ofrecido, ha asegurado que nunca se planteó que "ningún conseller" asistiera a la manifestación contra la ampliación de El Prat que se había convocado para el día 19, a pesar de que la portavoz del ejecutivo no lo descartó la primera vez que se le preguntó. El presidente republicano ha recordado que él defendía la reforma siempre que se hubieran respetado los criterios medioambientales y ha considerado que, si ha fracasado, ha sido por "esconder la división interna" que había en el gobierno español entre el PSOE y Unidas Podemos.