Ayuso flirtea con una ex consejera de Cs en plena campaña

MadridToni Cantó estaba llamado a ser la personificación en Madrid de la estrategia de absorción de Cs por parte del PP, pero el Tribunal Constitucional lo frustró apartándolo de la lista. La dirección del partido presidido por Pablo Casado es quien más publicidad ha dado a esta operación, con la revelación incluida de que el PP habría ofrecido una fusión orgánica bastante generosa con los de Inés Arrimadas, que ella no ha querido confirmar. Mientras tanto, Isabel Díaz Ayuso ya ve a través de las encuestas que el deseo de Génova de zamparse a Cs se impondrá por la vía de los votos el 4 de mayo. La posibilidad de que la formación naranja no obtenga ni representación en la Asamblea de Madrid no tiene que ser un obstáculo, sin embargo, para que algún miembro del partido, concretamente Marta Rivera de la Cruz, acceda a un hipotético gobierno de Ayuso.

Este lunes la candidata del PP se ha hecho acompañar de la ex consejera de Cultura del gobierno de coalición en el acto de presentación de una exposición sobre el pintor Antonio López celebrado en la sede de la Puerta del Sol. Rivera de la Cruz ha quedado fuera de la candidatura liderada por Edmundo Bal el 4-M, pero sigue formando parte de Cs, si bien su primera aparición en campaña –aunque no haya sido en un acto propiamente de campaña– ha venido de la mano de Ayuso, que le ha guiñado el ojo. “Querida Marta, quiero que tengas durante unos minutos la oportunidad de explicarnos el proyecto”, le ha dicho, y ella la ha correspondido agradeciéndole la “generosidad”.

Cuando el 10 de marzo convocó elecciones anticipadas en Madrid, la presidenta destituyó a todos los consejeros de Cs y a sus equipos. En cambio, al que había acompañado a Rivera en Cultura lo mantuvo. Un gesto que explica la buena relación entre las dos y que también conecta con el hecho de que la actual directora general de medios de la Comunidad de Madrid, Sandra Fernández, sea la exjefa de comunicación de Rivera. Ayuso la reclutó cuando dimitió Nacho García Mostazo del cargo, según eldiario.es por discrepancias con Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de la presidenta madrileña.

“Lamento profundamente que Rivera de la Cruz no pueda seguir. Hay gente en este partido que me parece que vale mucho la pena y, si tengo la posibilidad, contaré con ellos”, afirmó la presidenta en funciones en esos días de terremoto político. Últimamente, tampoco ha querido aventurarse más y, en un desayuno informativo organizado por Europa Press ahora hace unos días, Ayuso prefirió no avanzar si Rivera de la Cruz sería un activo del nuevo ejecutivo si el PP gana. “Es pronto para hablar de a quién incluiré o no en mi gobierno, pero tengo muy buena opinión de ella”, dijo.

La presidenta en funciones dinamitó el gobierno de coalición con la convocatoria electoral, pero no todos los puentes con sus ex socios. La prueba es que Bal ya ha dejado claro en precampaña que solo quiere pactar con Ayuso para dar continuidad a la tarea iniciada la legislatura anterior. Con quien sí se exteriorizaron grandes discrepancias es con Ignacio Aguado, el ex vicepresidente y portavoz y máximo representante de Cs en Madrid, que, paradójicamente, a pesar de la polémica decisión de Ayuso de romper el gobierno y convocar a los madrileños a las urnas, es quien ha quedado apartado de la carrera electoral.

Cantó entra en campaña

Relegado también quedó Cantó –él por decisión de la justicia–, pero tendrá una cierta visibilidad en campaña. De hecho, Ayuso ya dejó claro antes de que se conociera la resolución judicial que el ex dirigente de Cs sería “eternamente candidato” del PP. Este martes acompañará a la secretaria general del PP de Madrid y número tres de la candidatura, Ana Camins, en un acto en el municipio de Galapagar, donde reside el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias. Cantó quedó fuera de la lista, pero esto no impide que, como Rivera de la Cruz, pueda formar parte de un hipotético gobierno de Ayuso.