BarcelonaEl caso Begoña Gómez amenaza con ser la piedra en el zapato del gobierno de Pedro Sánchez durante los próximos meses, si no años, viendo cómo funciona la justicia.
¿Cómo comienza el caso?
El inicio es una denuncia de la entidad ultra Manos Limpias construida a partir de titulares de prensa. El juez Juan Carlos Peinado le dio rienda suelta el 16 de abril, pocos días antes de que Pedro Sánchez publicara la carta en la que se planteaba dimitir. La Fiscalía pidió archivar la causa, pero el juez centró sus actuaciones en unas cartas de recomendación que Begoña Gómez había firmado como directora de un máster en la Universidad Complutense a favor del empresario Juan Carlos Barrabés (que también formaba parte del máster) para participar en unos concursos públicos. Barrabés obtuvo contratos por valor de 12 millones de euros de la empresa pública Red.es, un dinero que provenía de los fondos europeos. El juez considera que podría haber un delito de tráfico de influencias y corrupción en los negocios, por lo que decidió imputar a la esposa del presidente español el 4 de junio citándola a declarar el 5 de julio, lo que provocó una segunda carta de Sánchez. La Fiscalía Europea entonces reclamó el caso porque afectaba a fondos comunitarios. Sin embargo, Peinado no quiso abandonar el caso y citó a varios testigos, entre ellos Barrabés.
¿Qué pruebas hay?
El juez reclamó a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) que investigara las adjudicaciones por si detectaba alguna irregularidad. La Guardia Civil ya ha remitido dos informes al juzgado, en los que afirma que las adjudicaciones se realizaron "con normalidad y según los principios que rigen la contratación pública". La prueba más delicada para el gobierno español es que Barrabés habría declarado ante el juez, según las acusaciones, que se habría reunido varias veces con Begoña Gómez en la Moncloa y que en dos de ellas habría participado el propio Sánchez. Pero la defensa de Gómez lo matiza. Dice que en una de estas reuniones Sánchez simplemente entró a saludar y que el otro contacto fue en el marco de un encuentro con empresarios del ámbito de la innovación.
¿Qué pasa en la Universidad Complutense?
También existe un informe de la Complutense que afirma que no ha llegado a ninguna conclusión sobre si Gómez se habría aprovechado de la universidad para desarrollar un software para su empresa, pero en el que pide al juez personarse como acusación si detecta alguna "apropiación indebida". Por el contrario, el rector declaró que no había visto nada extraño en la actuación de Gómez, lo que demuestra que existe una guerra interna en la universidad al respecto.
¿Qué uso hace de ello el PP?
Feijóo era reacio a hacer entrar a la mujer de Sánchez en el debate público, pero tras el acuerdo de renovación del Consejo General del Poder Judicial ha endurecido el tono para neutralizar las críticas de Vox. El PP está convencido de que este caso acabará derribando a Sánchez.
